Paso a paso de una rehabilitación energética

Este año Knauf Insulation ha participado en las obras de rehabilitación de un edificio de viviendas en Ordizia, Guipúzcoa. La arquitecta responsable del proyecto de reforma y de las obras de rehabilitación ha sido Cristina López Jiménez, una arquitecta independiente y natural de la localidad, que ha centrado su proyecto en la mejora de la envolvente del edificio, concretamente en la instalación de un sistema de fachada ventilada con el aislamiento como principal protagonista.

El edificio se encuentra en una parcela rodeada de zonas verdes, junto a la red ferroviaria Madrid-Irún (autovía A-1) y junto a un puente sobre el que discurre una vía de acceso directo al centro del municipio. Esta localización y las características constructivas del edificio han sido los detonantes de su deterioro y las responsables de su urgente rehabilitación.

Antes y después de los trabajos de rehabilitación en el edificio.

El edificio que se ha rehabilitado es un bloque de 20 viviendas, distribuidas en 3 portales en un único volumen rematado con una cubierta inclinada a un agua, en el que destacan dos cuerpos iguales en los extremos y otro intermedio interrumpido en su fachada principal por la escalera de acceso de uno de los portales.

Consta de cuatro plantas de vivienda (planta baja más tres plantas tipo) y una planta semisótano que acoge garaje y trasteros. La planta es de forma sensiblemente rectangular con los balcones como elementos singulares y tiene unas dimensiones aproximadas de 43 x 13 metros, con una superficie total construida de 2.066 m².

Se aprovechó el desnivel del terreno circundante al edificio para ubicar el garaje y los trasteros, que ocupan aproximadamente el 40 % de la superficie de la planta tipo y cuyo acceso se realiza desde la fachada sureste.

Fachada lateral suroeste antes de la rehabilitación.

La arquitecta planteó la ejecución del proyecto con dos acciones fundamentales, por un lado mejorar la envolvente térmica del edificio y por otro lado, resolver las carencias detectadas al realizar la Inspección Técnica del Edificio (ITE).

Para mejorar la envolvente del edificio, en concreto, para renovar la fachada, se optó por instalar una fachada cerámica ventilada (Sistema Faveton) que incorporara un sistema de aislamiento térmico y acústico. De este modo, se lograría reducir el consumo energético y resolver los problemas de condensaciones existentes, asegurando el bienestar y confort de sus ocupantes. Para ello se colocó Ultravent Black de 60 mm, y para aislar térmica y acústicamente el techo de espacio bajo cubierta se recurrió a Manta TI 212 de 80 mm, ambos productos de Knauf Insulation.

Pero el nuevo aislante, además de tener propiedades térmicas y acústicas, era necesario que respondiera a una de las principales necesidades del proyecto que era acoplarse a la deteriorada fachada existente.

Según la arquitecta, uno de los mayores retos en la rehabilitación, es que las fachadas de los edificios antiguos han sufrido pequeñas deformaciones o movimientos y eso puede dificultar la instalación del nuevo sistema de aislamiento, como era el caso de este proyecto, por eso no sirve cualquier producto.

“Conocía la marca Knauf Insulation desde hace tiempo, pero fue una prescriptora la que me hizo decantarme definitivamente por Ultravent Black al explicarme detalladamente sus características y su relación calidad-precio respecto a la competencia, ” explica Cristina López al preguntarle por las razones para elegir los productos utilizados en la rehabilitación de la fachada.

Y añade “para mí es esencial el posicionamiento y apuesta por la sostenibilidad medioambiental que realiza Knauf Insulation, invirtiendo en tecnologías como E-technology con la que fabrican sus lanas minerales, como es el caso de Ultravent Black”.

Por otro lado, en la ITE realizada se detectaron varias patologías existentes en el edificio que podían afectar a la seguridad y bienestar de vecinos y transeúntes. Para resolver estas deficiencias fue necesario intervenir tanto en elementos estructurales (aleros y balcones) como de seguridad (barandillas) que conferían además una nueva imagen al edificio.

Los diferentes problemas detectados en la ITE estaban causados principalmente por la falta de aislamiento y el tipo de construcción del edificio. Además era imprescindible integrar todos los elementos existentes (instalaciones por fachada, calderas y armarios en los balcones, miradores…etc.) para conseguir una imagen unitaria del edificio.

Esquina suroeste del edificio antes de la rehabilitación.

El contacto directo de la fachada con el jardín había favorecido la absorción de agua del muro por capilaridad, provocando patologías en las viviendas. Y la composición de la fachada a base de una hoja de bloque de hormigón con un mortero y pintura como acabados también había propiciado esas patologías.

Por otra parte, la proximidad de la red ferroviaria y la autovía generan vibraciones continuadas que han provocado pequeños asentamientos en algunas zonas, además de ruido constante en el interior de las viviendas.

Para minimizar la absorción de agua a través de los muros y resolver los problemas de humedad existentes en las viviendas de planta baja se ha protegido el perímetro del edificio mediante la instalación de una red de drenaje de las aguas provenientes del jardín, se ha ejecutado una solera perimetral de protección y se ha aumentado el tamaño y el número de las rejillas de ventilación de la cámara sanitaria existente.

Fachada lateral noreste.

Una vez realizados todos estos trabajos de rehabilitación se puede apreciar las mejoras conseguidas, en especial en la fachada.

Knauf Insulation continúa así apoyando proyectos de rehabilitación como estos, destinados a mejorar la calidad de vida de los inquilinos, la vida útil del edificio, disminuyendo la contaminación que estos edificios sin aislamiento provocan, mejorando su eficiencia energética, e incluso favoreciendo la estética de las ciudades.

Según Cristina López, “las ventajas que ofrece la rehabilitación tienen que ver con la posibilidad de alargar la vida útil de los edificios con intervenciones puntuales o integrales, mejorando la calidad de vida de sus usuarios, sin tener que derribar un edificio y volver a construirlo, con el coste económico y medioambiental que eso supondría”.

Composición formal del edificio:

• Integración de miradores existentes en el conjunto del edificio
• Integración de los armarios y calderas situados en los balcones
• Integración y registro del conjunto de las instalaciones

Trabajos realizados en la cubierta:

• Reparación de chimeneas
• Protección de petos
• Evitar la acumulación de agua en algunos puntos
• Limpieza de canalones
• Limpieza de cámara bajo cubierta (acceso a cubierta)

Trabajos realizados en las Fachadas:

• Tapado de agujeros, reparación de desconchados en el revestimiento y adición de aislamiento
• Reparación de aleros y frentes de balcones
• Sustitución de barandillas de los balcones y refuerzo de sus muros de cierre (encuentro de barandilla con muro)

Trabajo realizado en el suministro de agua:

• Colocación de contadores individuales de agua de lectura por radiofrecuencia y ajuste puntual de la red.

Trabajo realizado en la evacuación de aguas:

• Reparación de tabique de cierre de bajante en trastero de planta semisótano