Schneider Electric y WAS lanzan un nuevo informe sobre adaptación climática
Schneider Electric, “líder en la transformación digital de la gestión de la energía y la automatización”, ha colaborado con Women Action Sustainability (WAS) para publicar un nuevo informe titulado ‘Creando un impacto sostenible: construyendo resiliencia a través de la adaptación climática’, en el que se destacan “las interdependencias entre los actores públicos y privados y la responsabilidad colectiva necesaria para impulsar acciones que construyan resiliencia en medio de los crecientes impactos del cambio climático”.
“En Schneider Electric reconocemos la vital importancia de integrar estrategias de riesgo climático y adaptación para mejorar la resiliencia de las empresas”, declara el presidente de Sustainability Business de Schneider Electric, Steve Wilhite, quien añade que “el cambio climático está afectando financieramente a muchas empresas, no solamente con la destrucción de activos físicos, sino también debido a tasas de interés y seguros más altos. Schneider Electric se dedica a ampliar los límites del progreso climático, colaborando con nuestra red para integrar prácticas sostenibles en todo nuestro ecosistema”.
El estudio, señalan fuentes de Schneider Electric, destaca cómo las empresas de diversos sectores y regiones están abordando los riesgos relacionados con el clima con estrategias de adaptación, e identifica oportunidades de mercado y brechas que requieren atención.
Descubrimientos clave
Varios son los “descubrimientos clave” de este informe:
- El 38% de las empresas ha desarrollado planes de adaptación climática; sin embargo, solo el 6% ha implementado completamente las medidas de adaptación.
- Solo el 12% tiene métodos detallados para poder cuantificar el impacto financiero de los riesgos climáticos físicos.
- Muchas empresas han experimentado impactos relacionados con el clima en sus cadenas de suministro (30%) y en las operaciones directas (28%).
- El 30% de las empresas encuestadas no cuenta con cobertura de seguros para rebajar los riesgos financieros vinculados a los peligros climáticos.
El riesgo climático está reconocido como un riesgo financiero y se espera que tenga un impacto significativo en los beneficios y pérdidas de compañías. Las Naciones Unidas apuntan que los eventos meteorológicos extremos “han causado unas pérdidas de 4 billones de dólares en los últimos cincuenta años. Con el aumento de la temperatura global, se prevé que la frecuencia y severidad de los desastres relacionados con el clima aumenten anualmente, reforzando la urgencia de desarrollar planes y acciones de adaptación climática”.
Por otra parte, en el informe de la Brecha de Adaptación 2024 del UNEP, se estima que la brecha de financiamiento para la adoptación se sitúa entre 194.000 y 366.000 millones de dólares estadounidenses anuales, “lo cual es un factor para el retraso en la planificación e implementación de esfuerzos de adaptación”.
“Se remarca la adaptación como una tendencia emergente significativa, debido a la creciente frecuencia e intensidad de los fenómenos climáticos extremos, y a que las corporaciones están experimentando los impactos del cambio climático”, afirma Mónica Chao, presidenta de Women Action Sustainability, asociación sin ánimo de lucro que promueve la sostenibilidad entre empresas, instituciones y la sociedad.
“Nuestro objetivo”, prodigue Chao, “es inspirar acciones en la adaptación climática a nivel corporativo. Invitamos no solo a las corporaciones, sino a todos los actores involucrados, incluidos los responsables de políticas, las instituciones financieras y las aseguradoras, a participar en la colaboración para impulsar y permitir la acción”.
Adaptarse para garantizar la resiliencia
En el informe se resalta que, mientras los negocios de todo el mundo están mostrando esfuerzos para mitigar su impacto en el medio ambiente, las formas actuales de operar deberán cambiar para garantizar la resiliencia de las actividades. Esta transformación requiere una inversión. La participación del sector bancario y servicios financieros es clave para apoyar a las empresas en el proceso de implementación de sus planes de adaptación. WAS quiere hacer un llamamiento a la administración pública y a los científicos, también a nivel global, para ayudar a las empresas en este camino, proporcionando orientación, herramientas y todos aquellos recursos que sean necesarios.
La presidenta del Grupo de cambio climático de Women Action, Ana Peña, añade que “en un mundo donde las demandas y condiciones cambian rápidamente, acelerar las estrategias de adaptación de las infraestructuras es crucial para garantizar su resiliencia y eficiencia. La capacidad de anticiparse y responder ágilmente a nuevos desafíos y oportunidades asegura que las infraestructuras no solo soporten el presente, sino que también estén preparadas para el futuro”.
Este informe ofrece recomendaciones estratégicas para así ayudar a las corporaciones a implementar acciones, al mismo tiempo que enfatiza los roles críticos del sector financiero, que actúan como un catalizador para el cambio, y de la administración pública en la facilitación de la planificación de adaptación al clima. Este informe también aborda la necesidad de que las empresas no solo adapten los activos físicos actuales, sino que también diseñen proactivamente los futuros activos físicos para que sean más resilientes y capaces de resistir los impactos del cambio climático.