Valorsul recurre a AMP para mejorar la calidad del biogás

El principal reto al que debe hacer frente Valorsul es el de las partículas inorgánicas contenidas en la pulpa de alimentación de los digestores, que en gran medida reducen la eficiencia del proceso.

AMP fue contactada para encontrar e instalar una solución que permitiera eliminar las partículas inorgánicas sin cambiar las propiedades de la pulpa.

Las claves del proyecto son:

• La nueva instalación debe funcionar en consonancia con la antigua, lo que significa un flujo de alimentación no continuo.

• Se requiere la máxima eliminación de partículas inorgánicas.

• Las partículas inorgánicas presentes en la pulpa son de distinta naturaleza (metálicas, pétreas, plásticas, entre otras) y tienen una amplia distribución de tamaños (0/50 mm).

• El agua utilizada en el proceso está restringida a un máximo del 5% referido a la pulpa alimentada.

Tras realizar varias pruebas in situ, AMP ha diseñado una nueva instalación que cumple todos los requisitos de Valorsul. Así, se ha instalado un sistema de silo para resolver los problemas de caudal de la antigua planta. Con este sistema la pulpa se recircula hasta que se alcanza un nivel establecido que permite homogeneizar la pulpa.

Desde este silo la pulpa se bombea a los hidrociclones y al hidroclasificador. En primer lugar, el hidrociclón separa un flujo superior (con orgánicos y agua) y un flujo inferior (con orgánicos, agua y todas las partículas inorgánicas).

El flujo inferior se conduce al hidroclasificador, que funciona en la fase inicial como un depósito espesador. El hidroclasificador se llena con la pulpa, mientras que las partículas inorgánicas y orgánicas gruesas se depositan en el fondo; a la vez, todas las partículas orgánicas finas y el agua salen del hidroclasificador por el rebosadero.

Cuando la pulpa a tratar ha pasado por el hidroclasificador se inicia una segunda etapa. En este punto se introduce un pequeño volumen de agua en el hidroclasificador con una corriente ascendente de alta presión, lavando las partículas y realizando una clasificación por densidad, con el fin de eliminar los orgánicos por el rebosadero y mantener las partículas inorgánicas en el hidroclasificador.

Tras el proceso de limpieza, las partículas inorgánicas se conducen a un tamiz vibratorio para reducir el contenido de agua y producir una pila de reserva (con una humedad inferior al 20%). Por otra parte, todos los desbordamientos (hidrociclón e hidroclasificador) van al digestor anaerobio para producir el biogás.

Después de algunos meses de funcionamiento, los datos obtenidos muestran una gran mejora en comparación con el proceso antiguo.

Las partículas inorgánicas se han reducido en los digestores anaerobios en más de un 90% y, además, el agua añadida se sitúa en torno al 3% del volumen de pulpa tratada.