Sevilla, Palma y Las Palmas de Gran Canaria, las peores
Oviedo, Vigo y Bilbao, las ciudades que mejor gestionan sus residuos
La cantidad de residuos que se producen en las actividades diarias es ingente. Recoger, clasificar y procesar esos residuos se ha convertido en una tarea cada vez más complicada para los ayuntamientos a medida que los ciudadanos aumentamos nuestras exigencias. Hay distintas formas de gestionar los residuos urbanos y OCU quiere saber qué tal lo están haciendo los gobiernos municipales de nuestras principales ciudades, señalaron fuentes de la organización de consumidores en una nota de prensa.
Para averiguarlo, OCU ha realizado un estudio demoscópico entre 6.863 encuestados residentes en 69 ciudades sobre su nivel de satisfacción con la gestión de las basuras en su localidad. ¿Les resulta cómoda?, ¿tienen cerca los contenedores?, ¿reciben una buena información? La asociación de consumidores solicita a los encuestados que puntúen su satisfacción de 1 a 10 con la recogida de cada residuo, su satisfacción general, la cercanía de los contenedores, entre otras cuestiones.
Además, OCu ha consultado a cada ayuntamiento sobre su dotación: número camiones y de contenedores de cada tipo, la frecuencia de recogida, el presupuesto, las fracciones que recogen... Por último, añaden las mismas fuentes, se ha buscado conocer qué factores son más determinantes en el nivel de satisfacción.
Grandes diferencias entre la mejor y la peor
En los resultados de la encuesta, se aprecia una leve mejoría respecto la encuesta de 2019 sobre residuos: la nota media ha subido de 53 puntos en 2019 a 56 en 2023, que contrasta con la bajada de satisfacción con la limpieza de las calles.
Tres modelos de separación de residuos
Una de las primeras conclusiones de la encuesta es que, en estos momentos, coexisten en España tres modelos distintos de separación:
1.- Uno antiguo y en extinción, que consta de cuatro cubos: papel-cartón, vidrio, envases ligeros y un resto en el que va todo lo demás. En este modelo no se separan los biorresiduos en contra de lo que hoy exige la norma en las ciudades de más de 5.000 habitantes.
2.- Otro también de cuatro cubos, que separa orgánico de inorgánico: los envases no tienen un contenedor específico, sino que van al contenedor inorgánico.
3.- El modelo más común es el de cinco contenedores: papel, vidrio, orgánico, envases y resto. Este sistema, impulsado por Ecoembes, tiene una pega y es que hay que desechar los envases en un cubo distinto al de otros artículos de plástico como un juguete o un cepillo de dientes, lo que crea dudas y reduce la implicación con la tarea de reciclar. Sería deseable que la separación se haga solo por materiales (plástico, en este caso) y no por uso (envases).
Las ciudades del norte, en cabeza
En cuanto a la satisfacción global con la gestión de residuos, hay casi un 100 % de diferencia entre las ciudades con mejor y peor calificación en valoración de los usuarios. Oviedo, la primera de la lista, Vigo o Bilbao sacan mucha ventaja respecto a las últimas del listado. Estas diferencias no siempre serán totalmente achacables a la gestión municipal, pues la implicación ciudadana también cuenta.
Guadalajara, la que más ha mejorado
Hay algunas ciudades que han subido de valoración tras poner en práctica acciones que mejoran el servicio, como la sustitución de los contenedores soterrados inutilizables en Guadalajara, cuya nota ha subido 21 puntos sobre 100.
El aumento de la frecuencia de recogida en ciertos barrios y urbanizaciones de Albacete o la ampliación del servicio en Jaén también se percibe en la subida de sus respectivas notas.
Caminar dos minutos para tirar la basura
Aparte de su satisfacción, los encuestados también declararon el tiempo que tardan en llegar a cada contenedor. En Toledo, para la mayoría de los residuos hay que caminar cerca de dos minutos de media, lo mismo que en San Sebastián de los Reyes, Madrid, para arrojar el papel y el vidrio; en Granada para la basura orgánica (contenedor que no se ha implantado en toda la ciudad) o en Cádiz para los envases. OCU advierte que “no todas las ciudades ofrecen los mismos tipos de contenedores, pues hay distintos sistemas de separar los residuos”.
Pocos contenedores para aceite y vidrio
El 11 % de toledanos y el 8 % de los habitantes de Cuenca, Lugo y San Sebastián de los Reyes tienen que salir de su barrio o caminar más de cinco minutos de media para encontrar un contenedor verde, “algo bastante fastidioso por lo que pesa el vidrio”, señala la OCU. Con el aceite usado el recorrido a pie es mayor: el 37% de los encuestados “tiene que caminar un buen rato para depositarlo y en Las Palmas, más de la mitad de los vecinos no saben dónde hay un contenedor para poder tirarlo”.
Basura orgánica: en una de cada tres ciudades no se separa
La Ley de Residuos exige que los municipios con más de 5.000 habitantes tengan recogida separada de la basura orgánica a 30 de junio de 2022. Sin embargo, la encuesta de OCU ha constatado que una de cada tres ciudades no la han completado o, incluso, no han empezado a recogerla separadamente. Esto supone un retraso de un año difícil de justificar y ante el que OCU exige que se tomen medidas.
¿En qué ciudades se recicla más?
Los porcentajes de encuestados que afirman separar siempre cada tipo de residuo presentan grandes variaciones por ciudad, relacionadas con la distancia a los contenedores, aunque también con los hábitos y la implicación ciudadana. Está claro que cuanto más cerca estén los contenedores más aumentan las posibilidades de que se recicle habitualmente.
Mejor las distancias cortas
¿Qué factores son los que más influyen en la valoración de los ciudadanos? Según los datos btenidos por OCU, lo que más contribuye a elevar la satisfacción de los ciudadanos es que haya poca distancia hasta los contenedores donde deben depositar sus basuras. Este factor correlaciona más con las buenas notas que el modelo de separación elegido, si la gestora de los residuos es pública, privada o empresa mixta o incluso que el número de contenedores por habitante o la frecuencia con la que se vacían.
Esto explica el éxito de Oviedo donde, en lugar de tener contenedores en la calle, se depositan los cubos durante unas horas a la puerta de cada edificio. Los distintos tipos de contenedores van rotando según el barrio y día de la semana.
OCU pide cambios en el modelo de separación
Los resultados de este estudio muestran que hay varios asuntos pendientes para mejorar la gestión de los residuos urbanos y la satisfacción de los ciudadanos con esta tarea. En concreto, OCU pide que:
1.- A los ayuntamientos que todavía no la han implementado, hay que exigirles que completen la recogida separada de los residuos orgánicos en todos los municipios de más de 5.000 habitantes, tal y como establece la Ley de Residuos.
2.- Un nuevo modelo de recogida que sea claro y evite las dudas: por ejemplo, que se recoja en el mismo cubo lo que sea del mismo material. La nueva directiva europea ya exige que los símbolos de los envases sean comunes en toda Europa para ofrecer una mayor claridad.
3.- OCU aboga también por la implantación de un sistema de envases retornables con reembolso por la devolución de latas y botellas, que suponga un incentivo para su reciclado. La ley prevé que este sistema se implante si no se cumplen los objetivos de recogida con el modelo actual.
4.- Mejorar la red de puntos limpios para que todos los residuos peligrosos que no se recogen habitualmente se procesen y reciclen correctamente.