El impacto del teletrabajo en la negociación colectiva de las empresas de servicios públicos
Como representante empresarial, AGA juega un papel principal en la negociación colectiva junto con los sindicatos, que estuvieron representados en el evento a través de CCOO y UGT.
Como ejemplo de empresa, participó la asturiana EMULSA (Empresa Municipal de Servicios de
Medio Ambiente Urbano de Gijón, S.A.). Enrique Hernández, como representante de AGA y Director General de la asociación, aprovechó su primera intervención para agradecer al conjunto de personas que forman las plantillas de las empresas del sector del agua urbana, su enorme trabajo durante la pandemia, pocas veces reconocido cuando se mencionaban a los servicios públicos, siendo este absolutamente esencial; agradecimiento al que se unieron el resto de entidades representadas.
Por parte del sector del agua urbana, el evento sirvió para poner de manifiesto algunos datos, muy relevantes, respecto al funcionamiento de las empresas del ciclo urbano del agua durante la pandemia:
- Las empresas tienen un 40-50% de teletrabajo y turnos en las infraestructuras críticas (laboratorios, plantas).
- El diseño ha sido organizado por especialistas de recursos humanos, en colaboración con los de prevención y seguridad laboral.
- Donde hay representación de los trabajadores, se ha contado con ellos y/o se les ha comunicado la estrategia a seguir. En muchos casos se han efectuado auto evaluaciones de riesgos de los puestos de trabajo.
- El trabajo en servicios públicos urbanos, tiene una diferenciación clara entre puestos de trabajo en oficinas, en campo y a pie de calle. En estos últimos casos, se han establecido turnos para salvaguardar la salud de las personas y tener plantilla de recambio en caso de incidencias.
Algunas ideas tratadas por los ponentes en la reunión fueron: - El teletrabajo no es simplemente pasar de la oficina a casa. El contexto del domicilio
impone algunas condiciones (conciliación, libertad de movimiento, circunstancias externas, etc.). - Lo importante en el mundo actual son los objetivos y la producción, no la presencia en la ubicación física.
- Varía el sentido de pertenencia. La desubicación física, también puede provocar cierta desubicación mental.
- Patronal y sindicatos coincidieron en que, en un sector como el del agua urbana, elementos como el telemando y la digitalización van a tener un papel cada vez más relevante. Pero que, por la propia naturaleza del sector, éste exige mucha presencialidad, sobre todo en campo. Por tanto, en el futuro, se tendrá que lidiar con dicha diferenciación, para regular el teletrabajo.
Los sindicatos apuntaron que la negociación colectiva del teletrabajo en sí, tiene mucho recorrido por delante, sobre todo con la publicación hace unas semanas del correspondiente Real Decreto, ya que, actualmente, el teletrabajo ha sido prácticamente impuesto por la emergencia sanitaria. Cuando la situación se normalice, será el momento de negociar en los convenios el teletrabajo a largo plazo.
El encuentro sirvió para recordar la “voluntariedad” del teletrabajo, tanto por parte de la empresa como del trabajador. Coinciden en que ha habido tantas situaciones como personas trabajan en una empresa y que, en algunas ocasiones el teletrabajo no ha sido sencillo.
Algunas de las desventajas posibles son: perdida de conexión con los compañeros (y de información) y sobre todo de no poder desconectar (horarios) y dificultad de separar familia- trabajo, dificultad para separar espacio privado y de oficina en casa (videoconferencias).
También se complica el efectivo control horario de los tiempos de trabajo (fichaje). También se destaca el riesgo psicosocial a consecuencia de la “hiperconexión”. Es importante señalar dos diferencias importantes:
- “Teletrabajo” es otra forma de trabajar, no es llevarse la oficina a casa.
- No es lo mismo “conciliación” que “corresponsabilidad familiar”.
Los sindicatos señalan que es importante hacer una valoración puesto a puesto y ofrecer al trabajador lo que necesite para su labor y desempeño diario, como, por ejemplo, el equipo informático adecuado. También señalan otros aspectos importantes como que no sólo hay que respetar el horario de teletrabajo, sino establecer unas indicaciones claras de “disponibilidad horaria”, evitando así la “hiperconexión”. Las empresas que no aprovechen esto para hacer
una apuesta decidida por la “transformación digital” se van a quedar atrás.
Lo que es evidente y compartieron todas las entidades representadas es que, en la próxima negociación colectiva de cada convenio, la regulación del trabajo a distancia tendrá un peso relevante. Además, habrá que regular ciertos beneficios sociales como son ayudas a comedor y al transporte, la condiciones para considerar un accidente como doméstico o laboral, el lugar desde el que se puede trabajar, el tratamiento de datos confidenciales y muchos otros aspectos.
El teletrabajo es una oportunidad y hay que aprovechar para cambiar la metodología de trabajo. Es un camino que se va recorrer de la mano de empresas, trabajadores y sindicatos.