Fundación AQUAE refuerza su compromiso con la educación y la lucha contra el cambio climático en un año marcado por la COVID-19
En el ámbito de la Educación, por ejemplo, aunque crisis sanitaria ha impedido materializar las de ámbito internacional, la Fundación promovió un total de 26 becas en colaboración con el CERN, la Fundación ONCE y la OCDE, para contribuir a la especialización de estudiantes, graduados, profesores, investigadores y profesionales comprometidos con la sostenibilidad. Además, AQUAE amplió su programa de Doctorados Industriales. Con tal fin ha puesto en marcha el doctorado en Metagenómica, que desarrolla junto a la Universidad de Alicante y Labaqua, y que está enfocado a estudiar los virus y las bacterias presentes en las redes y sistemas de distribución de agua potable.
Otro de los hitos del área educativa conseguidos por AQUAE en 2020 ha sido aumentar hasta 51 el número de colegios de toda España que tienen integrado en su plan curricular el programa AQUAE STEM, destinado a fomentar el interés de las alumnas de 2º a 6º de Primaria por las disciplinas STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), para conseguir más pronto que tarde un futuro repleto de científicas, matemáticas, biotecnólogas e ingenieras.
Educación contra el cambio climático
Asimismo, la Fundación ha revalidado con la UNED la Cátedra AQUAE de Economía del Agua, con la que ha apoyado a estudiantes de Grado, Máster y Doctorado para que continúen sus estudios e investigaciones sobre gestión sostenible del agua. Ha organizado la convocatoria española del Stockholm Junior Water Prize, que premia proyectos de investigación alrededor del agua y la calidad de vida realizados por estudiantes de secundaria, bachillerato y formación profesional. Y ha seguido buscando alianzas con universidades españolas para potenciar la carrera de los estudiantes universitarios y las líneas de investigación orientadas al estudio del cambio climático y de su impacto sobre el agua.
“Apostamos por el talento, porque nos hace más fuertes y competitivos como sociedad, a la vez que nos permite establecer liderazgos para responder a los retos del futuro”, manifiesta Ángel Simón, presidente de Fundación AQUAE.
En el terreno de la sostenibilidad, cuyo eje central de actuación se focaliza en la lucha contra el cambio climático, Fundación AQUAE realizó en 2020 dos nuevas plantaciones de árboles en territorio español en el marco de su proyecto Sembrando Oxígeno. En concreto la reforestación de 15.000 m2 de superficie forestal con 750 árboles en el paraje de La Candeleda (Zamora), y la plantación de 800 árboles de distintas especies en el municipio malagueño de Manilva. Ambas acciones permitirán absorber más de 250 toneladas de CO2 durante las tres próximas décadas.
A raíz de desatarse la crisis sanitaria, la Fundación decidió prorrogar el proyecto Agua para la Amazonía peruana, iniciado en marzo de 2014 con UNICEF, para facilitar que la población de estas comunidades rurales, en su mayoría indígena, pueda acceder a agua y saneamiento, claves para garantizar una higiene adecuada y evitar la propagación de la COVID-19. UNICEF y Fundación AQUAE cuentan con la colaboración del gobierno peruano y ya son 7.000 las personas con acceso a agua segura, servicios de saneamiento básico y conocimiento y práctica para el consumo adecuado de agua y para evitar y prevenir enfermedades.
Por su parte, la Red Impulsores del Cambio, alianza internacional en marcha desde 2016, continúa avanzando y cuenta ya con seis emprendedores sociales de España, Chile y Colombia que buscan respuesta a diferentes objetivos de la Agenda 2030.
El trabajo medioambiental de Fundación AQUAE obtuvo en 2020 el triple sello ‘Calculo + Reduzco + Compenso’ que otorga la Oficina Española de Cambio Climático (OECC) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), y es la única fundación española que lo ha conseguido ese año.
Fundación AQUAE nació en 2013 con el objetivo de ser un laboratorio de ideas y de reflexión e investigación en temas de agua. A lo largo de sus siete años de vida, ha crecido, evolucionado y ampliado esa visión. Sin dejar de lado el aspecto del conocimiento y la divulgación, que siguen siendo ejes centrales de su actividad, la Fundación ha abierto nuevas líneas de trabajo en el campo de la innovación, la cooperación, el emprendimiento y la integración.
