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"El sector químico contribuye a la descarbonización mediante el desarrollo de nuevos materiales para mejorar el rendimiento y la sostenibilidad de tecnologías de generación renovable"

Entrevista a Santiago Rementeria, director general de Gaiker

Nerea Gorriti05/09/2022

Interempresas Industria Química cumple 100 ediciones impresas. Para conmemorar tal efeméride, publicamos en nuestras páginas un dossier especial en el que presentamos empresas de renombre en el mercado nacional e internacional. Además de destacar productos y servicios, publicamos un especial con importantes entidades del sector químico quienes nos ofrecen una radiografía de la industria química en la actualidad. Santiago Rementeria, director general del Centro Tecnológico Gaiker, nos ofrece su visión sobre el sector químico, cuya competitividad se enfrenta a retos derivados de la inflación de los costes de producción y operación, entre los que destacan el encarecimiento de las materias primas, el transporte marítimo y la energía. Además, se mantiene como reto la defensa comercial ante competidores de fuera de la Unión Europea.

El sector químico continúa liderando la inversión industrial en I+D+i, es gran generador de puestos de trabajo y uno de los motores económicos en España. ¿Cree que está suficientemente reconocido en la sociedad, que ha sabido transmitir la importancia de esta actividad en el bienestar de una sociedad?

Pienso que la percepción social de nuestro sector en su conjunto es mejorable. La obtención y transformación de elementos y compuestos naturales, los materiales sintéticos, la contribución de la química a la agricultura, la alimentación o los disolventes se dan, en general, por supuestos, pero no siempre se valoran. La sociedad reconoce favorablemente la actividad de la industria farmacéutica, por ejemplo, pero otras ramas como la petroquímica o la industria del plástico no se aprecian igualmente. Pasan relativamente desapercibidas la fortaleza innovadora del sector y su capacidad tractora, pues aporta materiales, productos y tecnologías a prácticamente todas las cadenas de valor de las industrias manufactureras.

Santiago Rementeria, director general de Gaiker.

El sector químico es claramente exportador. Las últimas cifras publicadas apuntan a que las cifras han crecido el último año (un 21%), ¿qué nos diferencia de nuestros competidores en el extranjero?

Somos innovadores, tenemos una importante capacidad de producción y una situación geográfica privilegiada como acceso europeo a los mercados de Latinoamérica y el norte de África. Resultamos competitivos en un contexto internacional en el que la demanda es creciente. Sin embargo, no debemos perder de vista que el volumen de recursos importados es considerable, de forma que el valor añadido doméstico asociado a las exportaciones brutas no es tan elevado.

Objetivos de descarbonización y economía circular. ¿Cuáles son las tendencias actuales?

El sector químico contribuye a la descarbonización mediante el desarrollo de nuevos materiales para mejorar el rendimiento y la sostenibilidad de tecnologías de generación renovable como la solar fotovoltaica o la eólica, para posibilitar el almacenamiento eléctrico en baterías más eficientes, escalables, robustas, baratas y reciclables que las actuales, y favoreciendo la movilidad y el transporte sostenibles mediante el aligeramiento de los vehículos, por ejemplo. También se observa un interés creciente en vectores energéticos más sostenibles como el hidrógeno renovable, los biocombustibles o los combustibles sintéticos, y en tecnologías para reducir emisiones y capturar CO₂ con el objetivo de procesarlo y reintroducirlo en la cadena productiva.

Esta noción de circularidad se extiende a todos los productos, buscando minimizar la utilización de materias primas no renovables y la generación de residuos. Las tendencias en soluciones de economía circular basadas en la industria química incluyen, entre otras, el reciclado de plásticos por medio de pirólisis, gasificación, solvólisis o degradación enzimática, la valorización energética de residuos y el desarrollo y la utilización de materiales alternativos de base biológica, habitualmente compostables y más sencillos de reciclar.

"Los mayores retos para la competitividad se derivan de la inflación de los costes de producción y operación", señala el director general de Gaiker.

¿Qué papel ha jugado la industria química en la pandemia del Covid-19?

Su contribución ha sido esencial, sobre todo en el campo de la salud. Hubo que incrementar la capacidad de producción y en muchos casos adaptar los procesos para garantizar suministros cuya demanda aumentó exponencialmente durante la pandemia: fármacos y medicamentos, productos de desinfección y limpieza, gases medicinales, materias primas para mascarillas y equipos de protección individual, etc. Tampoco debemos olvidar la contribución de la agroquímica en el aseguramiento del suministro de alimentos.

¿A qué retos se enfrenta la industria en la actualidad?

Los mayores retos para la competitividad se derivan de la inflación de los costes de producción y operación, entre los que destacan el encarecimiento de las materias primas, el transporte marítimo y la energía. Además, se mantiene como reto la defensa comercial ante competidores de fuera de la Unión Europea, para lo cual sería conveniente una simplificación de la normativa aplicable.

Ustedes llevan muchos años trabajando en la industria química, ¿Cómo ha sido la evolución en los últimos años en materia de sostenibilidad y economía circular?

En poco más de una década hemos pasado de percibir estos aspectos como aspiraciones deseables, pero no rentables, a asumirlos como especificaciones adicionales del negocio, no sólo exigidas por la legislación y normativa, sino también reclamadas por el conjunto de la sociedad. Lo que al comienzo se pudo contemplar como un mero gasto y elemento de imagen constituye ahora la oportunidad de cubrir una demanda empresarial y social.

Gaiker está especializado en composites sostenibles, polímeros funcionales y biobasados, tecnologías de reciclado y economía circular, así como en aplicaciones biotecnológicas.

¿Qué cambios tecnológicos puede destacar como más representativos del sector en la actualidad?

Los principales cambios están orientados a mejorar la competitividad y desarrollar las tecnologías necesarias para alcanzar los objetivos marcados en las tres transiciones globales planteadas por las instituciones y gobiernos europeos: la energético-ecológica, la digital y la sanitaria. La apuesta por la innovación y la I+D aplicada está asociada a la consecución de esos objetivos para mejorar los procesos propios del sector químico avanzando en su productividad, eficiencia y sostenibilidad, y a la vez ofrecer soluciones con esas mismas características a otros sectores.

¿En qué ámbitos se está invirtiendo más I+D+i?

Aunque la actividad de I+D en el sector abarca muchas áreas básicas de la química orgánica, inorgánica, física y computacional, desde un punto vista aplicado deben destacarse los ámbitos centrados en la transición ecológica relacionados con la descarbonización y economía circular que se han detallados anteriormente, y a los que se puede añadir la fotosíntesis artificial. La transición sociosanitaria se apoya en la I+D de la química farmacéutica y en el desarrollo de biosensores, nuevos medicamentos y vacunas de origen biotecnológico, así como en el desarrollo de compuestos nutracéuticos y alimentos funcionales, todo ello orientado a la personalización de los tratamientos y el envejecimiento saludable.

Finalmente, la aportación del sector a la transformación digital incluye, además de los materiales para fabricar todo tipo de hardware para el procesamiento, almacenamiento y comunicación de la información, la plastrónica, el desarrollo de polímeros con capacidades sensoras y actuadoras intrínsecas, y materiales como los elastómeros de cristal líquido, hidrogeles y polímeros con memoria de forma aptos para la impresión en 4D. Además, se están empezando a aplicar tecnologías como la inteligencia artificial, blockchain o los gemelos digitales para asegurar la transparencia y trazabilidad y para optimizar procesos de la industria química.

¿Qué papel desempeña su entidad en el sector químico?

Gaiker es un centro tecnológico dedicado a la I+D y la prestación de servicios tecnológicos avanzados. Estamos especializados en composites sostenibles, polímeros funcionales y biobasados, tecnologías de reciclado y economía circular, así como en aplicaciones biotecnológicas. Abarcamos la mayoría de las tecnologías mencionadas, siendo nuestro objetivo contribuir al desarrollo tecnológico sostenible y a la competitividad de las empresas con las que colaboramos solucionando problemas prácticos a los que se enfrentan.

Previsiones de futuro

Algunos de los desafíos globales que se nos plantean, como la neutralidad climática, el agotamiento de recursos naturales, el aumento y envejecimiento de la población o el riesgo de nuevas enfermedades y pandemias tienen una vertiente tecnológica en la que la industria química jugará un papel fundamental. A pesar de la incertidumbre que nos rodea actualmente y de la ralentización fruto de las crisis sucesivas que venimos viviendo, a medio plazo habrá avances importantes en las tecnologías y líneas de I+D indicadas más arriba, con proyectos demostradores a escalas crecientes, desde el laboratorio a la planta piloto, que acabarán desembocando en mejoras no sólo para el sector, sino para toda la sociedad.