Tecnologías de fabricación y reciclaje de plásticos: envases impresos

Por ello, las empresas están desarrollando nuevas tecnologías y formas de reciclado que les permita, no solo aprovechar los recortes o descartes, sino procesar aquellos plásticos impresos o laminados.

Asimismo, las tintas y adhesivo basados en compuestos orgánicos pueden y suelen descomponerse generando gases y vapores que dan lugar a un material con menores propiedades mecánicas.

Hasta el momento, se han propuesto diversos procesos físico-químicos para reciclar este tipo de materiales, de forma que se puedan eliminar esas tintas, adhesivos y otros contaminantes para ser utilizados en aplicaciones de un mayor valor añadido. Sin embargo, estos procesos tienen varias etapas de trituración, prelavados, extracción, etc., por lo requieren un excesivo consumo de energía, generan residuos contaminantes e implican la utilización de disolventes nocivos. Todo ello reduce la viabilidad económica y frena su implementación a nivel industrial.

Este es un proceso de bajo coste que ya está consiguiendo resultados: se ha obtenido un material plástico reciclado con nivel mucho menor de compuestos orgánicos, con menos olor y menor coloración, al mismo tiempo que conserva las propiedades mecánicas del material virgen.

Extrusión del plástico por soplado

Esta nueva tecnología se sustenta en las formas clásicas de fabricación del plástico film, la extrusión de película soplada, que es uno de los métodos de procesamiento de polímeros más importantes.

El proceso implica la extrusión de un plástico a través de un dado circular, seguido de una expansión similar a una burbuja. La masa fundida de plástico se extruye a través de un dado anular, normalmente vertical, para formar un tubo de pared delgada. El aire es introducido a través de un orificio en el centro del dado para soplar al tubo como un globo. Montado en la parte superior del dado, un anillo de aire de alta velocidad sopla sobre la película caliente para enfriarla. El tubo de película continúa hacia arriba, enfriándose continuamente, hasta que pasa a través de rodillos de presión donde el tubo es aplanado para crear lo que se conoce como un tubo plano de película. Este tubo plano o colapsado es entonces llevado de vuelta por la “torre” de la máquina extrusora de plástico a través de más rodillos.

Este proceso supone un avance razonable en el reciclaje de plásticos manteniendo el valor y las propiedades de éste. Esta es solo una muestra del progreso y la innovación que se va implantando poco a poco en la industria del reciclaje.

Esto, es un gran avance ya que la mayoría de materiales reciclados ya no se volvía a utilizar sobre todo por estética. Unilever, empresa asociada a este proceso, ya se comprometió a que, todos sus materiales fueran 100% reciclados y reutilizables, ha superado su fase de pruebas por lo que, si todo va según lo esperado, pronto se podrá convertir todo el material PET en envases de alta calidad para el envase de alimentos.

Estas empresas asociadas están convencidas de que su sistema de transformación revolucionará el sector ya que será un proceso circular, en el que puede repetirse de forma constante e indefinida. Además, según los responsables de esta nueva tecnología, el proceso podría utilizarse para otros tipos de materiales plásticos y orgánicos. Sin duda, una tecnología que puede hacer del sector una auténtica revolución en su proceso de transformación.

Si bien es cierto que actualmente están realizando sus pruebas con los PET, no es de extrañar que podamos utilizar este proceso en un futuro en cualquier material orgánico ¡Estaremos atentos!