El nuevo real decreto de VFU refuerza la posición de liderazgo de España en el reciclaje de automóviles
La publicación del Real Decreto 20/2017 de vehículos al final de su vida útil (VFU) servirá para reforzar la posición de liderazgo de España dentro de la Unión Europea (UE) en el reciclaje de automóviles. El documento fue publicado en el BOE el pasado 21 de enero después de estar cerca de un año paralizado por la situación de gobierno en funciones.
La Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) ha celebrado la puesta en marcha de la normativa al considerar que supone, en palabras de su directora general, Alicia García-Franco, “la consolidación de un sector que ha conseguido que España lidere el reciclaje de automóviles en la UE sin que el ciudadano tenga que pagar por ello”.
Anualmente, se dan de baja en España en torno a 700.000 unidades de los automóviles incluidos en el nuevo real decreto (turismos, todoterrenos y vehículos comerciales ligeros). Los últimos datos aportados por España a Eurostat sobre reciclaje de VFU son de 2014 y ascienden a un 93,5% de recuperación total, muy cerca del 95% que fija Bruselas para 2015. “Si tenemos en cuenta que en 2002 partimos de una cifra de recuperación del 76%, el salto experimentado por el sector es de gigante”, comenta la responsable de FER.
Cambios ambiciosos
García-Franco ha destacado que, aunque los cambios de este real decreto van enfocados a adaptar este flujo de desechos a la ley de residuos y suelos contaminados, “contiene apartados muy ambiciosos que van más allá de la legislación europea, como los objetivos específicos para los Centros Autorizados de Tratamiento (CAT) que fomentan la preparación para la reutilización”. Desde la entrada en vigor de la normativa, los CAT deberán reutilizar piezas y componentes que supongan, al menos, el 5% del peso de los vehículos que hayan tratado anualmente hasta el 1 de enero de 2021, el 10% desde esa fecha hasta el 1 de enero de 2026 y el 15% desde esa fecha en adelante.
“También se potencia la cadena de reciclaje de gestores autorizados y se mejora la trazabilidad de cada vehículo”, ha indicado la directora general de FER, “de tal forma, que hay un seguimiento desde que éste se convierte en residuo hasta su completo tratamiento”, con lo que se evitará, por ejemplo, “el desmantelamiento ilegal de piezas de los VFU. También se incluye de forma clara que es necesario su paso obligatorio por una instalación de fragmentación, pero entendiendo que puede realizarse directamente desde el CAT o a través de un gestor autorizado”. “Este es uno de los puntos en los que FER más ha luchado por conseguir, ya que es esencial que se respete toda la cadena de reciclaje”.
El nuevo texto refuerza cada una de las fases del tratamiento del vehículo y, en particular:
- Extracción de piezas y componentes para su reutilización y comercialización. Únicamente, podrá realizarse en los CAT de vehículos que, previamente, hayan causado baja definitiva en el Registro General de Vehículos de la DGT y hayan sido descontaminados.
- Gestión de los residuos generados en la descontaminación. Los CAT realizarán las operaciones de tratamiento para fomentar el reciclado, y entregarán a un gestor autorizado todos los materiales y componentes procedentes de estas operaciones de tratamiento que no hayan vendido para reutilización, priorizando cuando sea viable desde el punto de vista medioambiental el reciclado frente a otras formas de valorización.
- Gestión del resto de vehículo en el CAT. Los CAT remitirán, directamente o a través de gestor autorizado, el resto del vehículo, que no deberá incluir ningún material o elemento no perteneciente al mismo, a un gestor autorizado para su fragmentación.
Otro de los aspectos que FER ha resaltado del real decreto es, según García-Franco, que aporta “seguridad jurídica en relación a la definición del ámbito de aplicación y su coherencia con los regímenes de otros flujos de residuos como aceites o neumáticos al final de su vida útil (NFU)”.
Aportaciones de FER
FER ha mantenido un contacto directo y permanente con los legisladores para que la problemática y la idiosincrasia del sector quedara recogida en la nueva normativa. De esta forma, en el nuevo real decreto “se mantiene el sistema de reciclaje actual y se pone en valor el duro trabajo realizado por los CAT, fragmentadores y postfragmentadores desde el año 2002 para la adecuación y cumplimiento de la legislación ambiental”, ha indicado García-Franco. Esto se refleja en el documento legal que indica que se trata de un flujo de residuos que ha venido funcionando de manera satisfactoria.
Otro de los aspectos en los que la federación hizo especial hincapié es que la normativa evitara nuevas cargas administrativas y que incluyera los mismos requerimientos técnicos para las instalaciones autorizadas de gestión, ya que no se ha modificado la legislación europea
Por último, García-Franco también ha comentado algunas de las peticiones de FER que no incluye el Real Decreto 20/2017: “Lamentablemente no se ha establecido en los objetivos de preparación para reutilización excepciones para aquellos vehículos cuyas piezas no tienen valor comercial”.