EDSNA suministra un sistema sostenible de gestión de residuos en Ática (Grecia)

Ática es una región de Grecia formada por ocho unidades periféricas: Atenas Septentrional, Atenas Occidental, Atenas Central, Atenas Meridional, Ática Oriental, El Pireo, Islas y Ática Occidental. Concretamente, la capital del país, Atenas, tiene una población de 3,8 millones de habitantes, lo que supone que el sistema de gestión de residuos sea una actividad realmente importante en la ciudad, ya que hay que operar, de una forma sostenible, cerca de 2,1 millones de toneladas de residuos municipales al año.

La estación de transferencia de residuos de Schistou, construida en 1991 y ubicada cerca de El Pireo, procesa 900 toneladas de residuos municipales al día, trabajando durante las 24 horas. Los municipios de los alrededores, incluida la isla de Salamina que suministra el material a través del ferry y después en camiones, transportan hasta esta estación los residuos en vehículos convencionales de recogida.

Cuando llegan a las instalaciones, los camiones son pesados y pasan por un sistema de detección de radiaciones. Posteriormente descargan todo el material en una de las dos plataformas de vertido y, una vez vaciados, vuelven a pesarse para establecer su tara.

Atenas genera anualmente cerca de 2,1 millones de toneladas de residuos municipales, por lo que una gestión sostenible de todo este material resulta una actividad fundamental para la ciudad.

Los residuos que se han introducido en los silos son transferidos mediante dos grandes cucharas de acero a las bocas de cuatro compactadores estáticos Marrel, cada uno de los cuales alimenta contenedores de 30 m³ de capacidad.

Cuando estos contenedores están llenos son transportados por un vehículo de gancho Mercedes SK 8x4 Kaoussis Multilift HL32.56 hasta la zona de almacenamiento, a la espera de que otro vehículo Scania 8x4 Kaoussis Multilift LHT320.56 se lo lleve al vertedero sanitario de Fyli.

Estos camiones Scania, que también montan equipos de gancho, son pesados antes de abandonar la estación de transferencia para registrar la cantidad de residuos que transportan.

La estación de transferencia cumple con todas las normativas medioambientales. Tiene un sistema de aspersión de agua para reducir el volumen de polvo generado en las zonas de descarga. Un sistema de drenaje extrae cualquier lixiviado producido en los compactadores estáticos cuando se comprimen los residuos. Y estos lixiviados son posteriormente recogidos en un tanque y tratados en la misma instalación para reducir sus niveles de nitrógeno amoniacal, entre otras emisiones. El agua depurada se descarga finalmente al sistema de alcantarillado.

El vertedero sanitario de Fyli, ubicado en Ano Liosia, gestiona al día 6.000 toneladas de residuos (1,8 millones de toneladas al año), procedentes de la región de Ática. Fyli no es solo el mayor vertedero sanitario de Grecia sino también el mayor de Europa.

Está abierto desde las 6 de la mañana hasta las 7 de la tarde. A su llegada, los camiones son también pesados en básculas y pasan por detectores de radiaciones. El vertedero recibe todo tipo de residuos municipales contemplados en el código 20 del Listado Europeo de Residuos, como por ejemplo los 20 03 01, 20 03 02 y 20 03 03, así como los englobados en el código 19 (Residuos de las instalaciones para el tratamiento de residuos, de las plantas externas de tratamiento de aguas residuales y de la preparación de agua para consumo humano y de agua para uso industrial), como por ejemplo los 19 12 10 y 19 12 12.

EDSNA está trabajando intensamente para reducir el porcentaje de residuos que acaban en vertederos.

Una vez que los camiones han sido pesados, circulan por las rutas de acceso que llevan hasta el borde del vertedero desde donde descargan todo el material. A continuación vuelven a pesarse en las básculas para calcular el material descargado. Los bulldozers y los compactadores se encargan entonces de comprimir los residuos recién arrojados y posteriormente echan arena para evitar que las alimañas se alimenten de los desechos.

El vertedero sanitario también cumple con la Directiva Europa de Vertederos (1999/31/EC): está delimitado y recoge los lixiviados, los cuales son tratados en una planta desalinizadora usando un sistema de osmosis inversa. Los lixiviados son recogidos en un tanque con decantación, de tal forma que los materiales más pesados caen al fondo y los más ligeros, que se mantienen en la superficie, siguen un proceso de floculación. Los lixiviados también son tratados para reducir el contenido de sustancias como el nitrógeno de amoniaco. El metano se quema en las propias instalaciones.

El vertedero se ha construido en dos fases. La primera es la que ya está operativa y la que está almacenando actualmente todo el material. Y la segunda, está en proceso de desarrollo y comenzará a operar el próximo año.

EDSNA ha construido también una planta de tratamiento mecánico-biológico y de reciclaje en Ano Liosia, muy próxima al vertedero. Estas instalaciones comenzaron a estar operativas en 2010 y procesan 1.200 toneladas de residuos al día, lo que supone 600.000 toneladas de material al año. Es, sin duda, una de las mayores de Europa.

La planta está abierta las 24 horas del día con la idea de proporcionar a todos los vehículos de recogida de residuos urbanos un horario flexible para la descarga del material, ya sea de día o de noche.

EDSNA ha invertido importantes cantidades de dinero a lo largo de los últimos años para contar con las infraestructuras más avanzadas en materia de gestión de residuos.

En estas instalaciones los camiones también tienen que pasar por una báscula y por un detector de radiaciones. A continuación se sitúan en la plataforma de descarga, desde donde arrojan todo el material dentro de un gran almacén. Posteriormente vuelven a ser pesados y abandonan las instalaciones.

La planta cuenta con varias áreas de trabajo, según el tipo de residuo: residuos municipales en bruto, residuos reciclables procedentes del contenedor azul, el cual ha sido distribuido por la propia EDSNA por toda la región, etc.

El material descargado se lleva posteriormente a cintas transportadoras usando grúas equipadas con pulpos, y todo este material es procesado mediante técnicas manuales y mecánicas. Se extraen los materiales reciclables, como el vidrio, el papel, el cartón, las latas de metal o el plástico, para ser después llevados a las plantas de procesamiento.

Por otra parte, la fracción orgánica se mezcla con residuos ‘verdes’ y material de compostaje usando un proceso aeróbico. Y los residuos restantes no reciclables se convierten en lo que se denomina ‘Secondary Recovered Fuel (SRF)’.

En Ano Liosia, cerca del vertedero sanitario y de la planta de tratamiento mecánico-biológico/reciclaje, también hay una incineradora de residuos hospitalarios con capacidad para quemar hasta 30 toneladas de residuos al día. Esta incineradora está operativa desde el año 2002 y recibe material de la periferia de Ática y del resto de Grecia, incluidas las islas. La combustión se realiza empleando un proceso de incineración basado en hornos giratorios.

La planta cumple con la Directiva de Emisiones Industriales 2010/75/EU. Los materiales resultantes del proceso, entre los que se encuentran las cenizas (IBA), se mandan a otras instalaciones de tratamiento debidamente autorizadas para una gestión segura y responsable de todos estos productos.

EDSNA promociona y fomenta el reciclaje entre los habitantes de Ática, tanto en las escuelas como en otros ámbitos. De hecho, recientemente se distribuyeron en los colegios numerosos contenedores de papel y cartón para aumentar el volumen de material recogido de este tipo.

EDSNA también ha suministrado en zonas comunitarias de las ciudades contenedores azules de 1.100 litros de capacidad para la recogida de plásticos, papel y cartón, así como diferentes iglús para la recogida de envases de vidrio.

Todos ellos están situados cerca de los contenedores verdes, también de 1.100 litros de capacidad, usados para trabajar el material no reciclable.

A través de diferentes instalaciones especializadas, EDSNA puede gestionar los diferentes tipos de residuos.

Los contenedores se vacían empleando vehículos de recogida que son propiedad de los diferentes ayuntamientos, aunque EDSNA también realiza directamente esta labor en algunas zonas de Atenas, para lo que cuenta con su propia flota de camiones.

Además, EDSNA fomenta la recogida de pequeñas baterías así como de residuos ‘verdes’, para lo que dota a los ayuntamientos de plantas de trituración. El material resultante puede ser transformado en compost, para usarse en diferentes aplicaciones, o llevado al vertedero.

Los planes de futuro de EDSNA pasan por tomar medidas que favorezcan la jerarquía de residuos, buscando aprovechar más el material de desecho y disminuir el porcentaje de residuos municipales que acaban en vertedero.

En el futuro, la planta de tratamiento mecánico-biológico y de reciclaje de Ano Liosia se ampliará para aumentar la capacidad de tratamiento de residuos en 350.000 t/año. Además, está previsto construir cinco plantas adicionales, más pequeñas, de tratamiento mecánico-biológico por la periferia de Ática, lo que ayudará a tratar los residuos más cerca de donde son generados, reduciendo así la huella de carbono.

El objetivo de todas estas iniciativas es reconvertir en materiales reciclables todos los residuos que admitan serlo, minimizando la fracción que no puede ser tratada y que acaba en el vertedero. Se van a construir igualmente, en canteras que no están activas, cinco nuevas áreas de vertedero en las que poder depositar materiales no reciclables, con un óptimo tratamiento de todas las emisiones.

Además, la compañía seguirá desarrollando actividades de control medioambiental y de rehabilitación en los vertederos que ya están cerrados, estabilizando y reduciendo los volúmenes de lixiviados y de metano, para posteriormente dar otro uso a estas zonas, bien sea como parque, como reserva natural, etc.

En resumen, EDSNA proporciona un sistema de gestión de residuos altamente sostenible en la periferia de Ática y seguirá con la misma línea de trabajo en el futuro. Para lograr este objetivo la compañía seguirá apostando por educar en materia de reciclaje a la población, ya sea en las escuelas o en otros ámbitos, y por tomar medidas que ayuden a aumentar el porcentaje de la fracción reciclada y a disminuir la cuota de producto que acaba en vertedero. Además, EDSNA tiene previsto implementar métodos alternativos de gestión de residuos que ayuden a mejorar el índice de reciclaje en la región.