La gestión y el tratamiento de los residuos en España, a debate
En el marco del 6º Foro Greencities & Sostenibilidad, tercer Foro Tikal, el Foro TIC & Sostenibilidad y el Congreso Conama Local, celebrado los pasados días 7 y 8 de octubre en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (Fycma), tuvo lugar un debate sobre la gestión y el tratamiento de la fracción orgánica. Diferentes expertos ofrecieron sus opiniones acerca de la situación actual del tratamiento y la gestión de residuos en nuestro país para buscar soluciones a los principales problemas.
Javier Puig de la Bellacasa, del Comité de Residuos de Conama; Josep María Tost, director de la Agencia de Residuos de Cataluña; Julián Laguna García, jefe del Servicio Técnico de Limpieza del Ayuntamiento de Málaga; Vicente Galván, de Aselip; y Belén Ramos, responsable del Área de Medio Ambiente de la OCU, fueron los encargados de debatir sobre la gestión y el tratamiento de la fracción orgánica.
Javier Puig dio inicio a este debate afirmando que en el tema de los residuos, en la economía circular, hay que agotar todos los recursos ya que “la gestión de residuos contribuye a la gestión eficiente de los recursos”. Para ello, aseguró, tiene que haber una participación continuada y “hay que buscar un material de calidad –recogida separada- puesto que hay que gestionar un material que luego va a salir al mercado y por ello, se deben cumplir una serie de especificaciones”.
Los expertos durante el debate sobre la gestión y el tratamiento de la fracción orgánica.
Pago por generación
El director de la Agencia de Residuos de Cataluña, Josep María Tost, reivindicó también la necesidad de hacer una recogida separada para no contaminar y aseguró que es posible llevarla a cabo pero el problema reside en los costes. “En Cataluña llevamos tiempo haciéndolo: hay 130 municipios en los que hacemos recogida puerta por puerta”, indicó Tost y aseguró que para financiarlo “es imprescindible un pacto. Hay que implicar a los gobiernos autónomos y locales para que metan dinero, ya que sin voluntad política no hay consenso, y también es necesario implicar al ciudadano”. En este sentido, Tost habló del pago por generación: quien contamina, paga, y quien recicla, pagará menos. “Para un ciudadano normal, los residuos no son un problema. ¿Por qué no corremos a 170 km/h si todos tenemos coche? Por las sanciones. Pues con esto ocurre lo mismo. En Europa no se andan con tonterías y, si un ciudadano de París hace recogida separada de residuos, es posible hacerlo. La gestión orgánica es clave para llegar a los objetivos de Europa”, advirtió.
Por su parte, el jefe del Servicio Técnico de Limpieza del Ayuntamiento de Málaga, Julián Laguna García, aseguró que el problema de la recogida separada de residuos es cómo se puede financiar pero que “es necesario hacerlo porque si no seremos objeto de sanciones por parte de la UE”. Laguna considera que el tema de las tasas que comentó anteriormente Tost, es fundamental. “Hay que establecer tasas. El primer paso de cara a la fracción orgánica tiene que ser un planteamiento coherente de forma que el pago del ciudadano esté gestionado por la Administración”, sostuvo Laguna y reiteró la evidencia de que “no queda más remedio que hacerlo”.
La importancia de ajustarse a cada situación provincial
Vicente Galván, de Aselip, insistió en la necesidad de abordar un nuevo modelo de gestión de residuos sin dejar pasar por alto la situación de heterogeneidad frente a la que nos encontramos ya que, dentro de cada CC AA o de cada provincia, hay soluciones diferentes. “Hay que tener en cuenta que hay muchas provincias que tienen sistemas de recogida muy antiguos con lo que hay que aplicar nuevas soluciones a este modelo”, advirtió Galván.
Asistentes al debate sobre la gestión y el tratamiento de la fracción orgánica.
Asimismo señaló que hay muchos modelos de recogida en base a dos parámetros -cuántos contenedores se colocan y cada cuánto se recoge- de los que sale un tercero: ¿Cuánto me cuesta? Siguiendo esta línea, Galván manifestó que el mundo se divide en tres partes:
- Países que hacen gestión integral de residuos. Cada fracción se recoge de forma separada. En este grupo se encuentran países como Francia, Inglaterra, Dinamarca, Noruega o Alemania.
- Tres países que se encuentran “entre medias”: España, Portugal e Italia.
- El resto del mundo.
A parte de los costes, Galván se preguntó quién lleva los sistemas de recogida (empresas privadas, entes públicos…). “Primero hay que empezar por ver cuánto cuesta y, luego, quién lo hace”, sentenció.
Transparencia para concienciar
Belén Ramos, responsable del Área de Medio Ambiente de la OCU, se mostró contundente respecto a la importancia de la transparencia en el tema de los costes de los residuos como modo de concienciar a la ciudadanía. “La sociedad española tiene un desafío, no sólo porque sea un requerimiento legal”-como se ha hablado anteriormente- “sino por un tema de coherencia: hay que abordarlo de una manera coherente y transparente y no porque lo hayan empezado a hacer los nórdicos”.
En este sentido, Ramos puso en entredicho la opinión de Tost sobre la indiferencia de los ciudadanos frente a los residuos ya que “la OCU desarrolló una APP en el año 2008 que aún a día de hoy recibe 1.500 visitas diarias, con lo que la gente si se preocupa por la basura”. Lo que ocurre, según Belén Ramos, es que la gente desconoce lo que paga por la basura. “¿Cómo queremos que la gente se conciencie si no le decimos lo que nos cuesta? Vamos a contarle a la gente lo que hacemos con los residuos. El ciudadano tiene que saber lo que está pagando por los residuos y no por otros servicios, por tanto, transparencia. Tenemos que asegurar un tratamiento que de garantías a un producto”, reivindicó.