Alfa Laval y Moeve se unen para producir combustible de aviación sostenible
Alfa Laval ha firmado un contrato con Moeve (antigua Cepsa) por el que suministrará tecnología para satisfacer la creciente demanda de combustible de aviación sostenible procedente de materia prima no fósil.
A través de este acuerdo, la compañía sueca suministrará soluciones para el pretratamiento, una fase esencial para la producción de cientos de miles de toneladas de combustible de aviación sostenible (SAF) cada año en la planta de biocombustibles que Moeve está construyendo en Huelva.
La construcción de la nueva planta de Moeve en Huelva comenzó en febrero de este año y con el propósito de entrar en funcionamiento en 2026. “Esta planta representa un avance significativo para aumentar la producción de biocombustibles y satisfacer la creciente demanda global de SAF”, señalaron fuentes de Alfa Laval a través de un comunicado. Este proyecto es una colaboración entre Cepsa Bioenergía San Roque (CBSR), una empresa conjunta de Moeve y Bio-Oils Energy, parte del Grupo Apical.
Alfa Laval ha suministrado dos unidades de pretratamiento diferentes para este proyecto de Moeve, valorado en 1.200 millones de euros. “La construcción de la planta es un paso crucial hacia la descarbonización del sector del transporte global de manera sostenible, creando más de 2.000 empleos directos e indirectos”, añadieron desde la empresa.
Bent Sarup, vicepresidente de Sistemas para Grasas y Aceites de Alfa Laval, comentó que “esta alianza entre Alfa Laval y Moeve es muy significativa puesto que las soluciones que proporciona son clave en este gran proyecto. Este pedido es muy importante para nosotros y refuerza nuestra reputación como líderes y expertos en esta área vital”.
Alfa Laval mantiene desde 2022 un acuerdo con Moeve para suministrar, durante tres años, servicios de optimización de procesos e intercambiadores de calor a los dos Energy Parks que esta compañía tiene en España. Además, forma parte de la estrategia Positive Motion de Moeve.
Producción y sostenibilidad
La nueva planta en Palos de la Frontera producirá 500.000 toneladas de SAF y diésel renovable anualmente a partir de materias primas avanzadas, como residuos agrícolas, grasas, aceites y grasas usadas, de acuerdo con las estimaciones de Moeve.
Alfa Laval suministra dos unidades de pretratamiento para dos líneas independientes con capacidades similares en CBSR, una que procesa múltiples materias primas y otra que se centra en aceites de cocina usados y aceites de desecho de palma.
Andrew Logan, director regional de Grasas y Aceites de Alfa Laval, explicó que “los dos sistemas ofrecen una solución flexible, ya que pueden manejar pretratamientos complejos o simplificados, dependiendo de la materia prima involucrada. Mirando hacia el futuro, nadie sabe qué materias primas estarán disponibles, por lo que la versatilidad es absolutamente clave”.
Capacidad de producción
La nueva planta permitirá que Moeve y Bio-Oils Energy dupliquen su capacidad total de producción de combustibles renovables en la instalación a un millón de toneladas al año.
Según Pratheepan Karunagaran, director ejecutivo de la empresa matriz Apical, “nuestra planta de biocombustibles de segunda generación con Moeve, que será la mayor instalación de procesamiento de combustible de aviación en el sur de Europa, es un excelente ejemplo de cómo los actores de la industria pueden unirse para desbloquear el potencial del SAF y aumentar su adopción de manera asequible”.
Por su parte, Maarten Wetselaar, director ejecutivo de Moeve, destacó que “estamos iniciando la construcción de nuestra planta de biocombustibles de segunda generación, marcando el primer gran hito de nuestra estrategia Positive Motion. Este proyecto estratégico para España y Andalucía nos convertirá en un referente europeo en el campo de las moléculas verdes y facilitará la descarbonización inmediata de sectores que no pueden funcionar con electricidad, como la aviación. Este es el comienzo de un nuevo capítulo para Moeve y esta región, que generará empleo de calidad y una nueva era de industrialización”.
Además de suministrar este biocombustible, la nueva instalación emitirá un 75% menos de CO2 que una planta de biocombustibles tradicional y está diseñada para lograr emisiones netas cero a medio plazo, según apuntaron fuentes de la energética. Utilizará electricidad 100% renovable y diferentes sistemas de recuperación de calor y eficiencia energética. Solo usará agua reciclada, y sus emisiones de agua tendrán un impacto mínimo en el ecosistema gracias a una potente planta de tratamiento de agua.
Importancia de los biocombustibles
Los biocombustibles se presentan como un elemento destacado para la descarbonización de aquellos sectores de difícil electrificación en el corto y medio plazo, proporcionando una solución de bajo carbono para las tecnologías existentes. “Se espera que la producción global de SAF se triplique en 2024, en comparación con los niveles de 2023, alcanzando 1,5 millones de toneladas”, apuntaron desde Alfa Laval. Según la Agencia Internacional de Energía (IEA), el uso de materias primas avanzadas en la producción de este combustible debe aumentar al 40% para 2030, frente al nueve por ciento en 2021, para ayudar a satisfacer esta demanda mientras se minimizan los impactos en el suministro global de alimentos y el uso de la tierra.
En este escenario, más del diez por ciento del consumo de combustible en la aviación debe ser SAF para 2030 para mantenerse en el camino hacia cero emisiones netas de CO2 para 2050. En 2022, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo estimó que la producción global de SAF representaba solo alrededor del 0,1% al 0,15% de la demanda total de combustible para aviones.