La esencial contribución de la bioenergía al sistema energético renovable

La biomasa genera el 60% de la producción actual de energía renovable en la Unión Europea y en 2050 estará suministrando el 50% de toda la energía que consumiremos los europeos. En nuestro país, rico en recursos biomásicos valorizables de orígenes diversos, aún tenemos camino que recorrer pues la bioenergía aporta alrededor del 9% de la energía que consumimos los españoles, incluyendo la generación eléctrica, térmica y para transporte. Es destacable el papel de la biomasa para producir energía térmica, ya que genera el 82% del calor renovable, cubriendo el 14% de las necesidades térmicas del país.

Uno de los sistemas de generación y aprovechamiento colectivo de la energía por el que España debería apostar con mayor empeño es el de las redes de calor con biomasa, la solución renovable más competitiva en coste y en ahorro de emisiones para calefacción urbana, capaz de sustituir a combustibles fósiles como gasóleo o gas natural a gran escala sin causar grandes molestias a los ciudadanos y alternativa a la electrificación cuando esta es técnicamente complicada.

La biomasa es la tecnología preferida en las redes de calor, siendo utilizada por el 60% de todas las instalaciones de este tipo que funcionan en España, como expuso ADHAC durante la pasada edición de Expobiomasa (mayo 2023).

Según el último censo realizado por Avebiom en 2022 y con los datos recogidos en 2023, aún sin consolidar, nos acercamos a las 500 redes y a los 500 MW instalados con biomasa sólida.

El número de redes y la potencia unitaria, actualmente de alrededor de 1 MW por instalación, pueden aumentar de forma significativa en el futuro gracias al enorme potencial de recurso biomásico del que disponemos.

Para acelerar su implantación las empresas y promotores más importantes de España coinciden en la necesidad de definir un marco normativo específico; que las redes se consideren infraestructuras de utilidad pública de interés general para agilizar la adjudicación de licencias; que se reduzca el IVA al calor generado en redes de biomasa o el IBI a aquellos inmuebles que deciden conectarse a una red. Y, desde luego, necesitaremos más empresas capaces de gestionar redes de calor para posibilitar su expansión a gran escala y también aumentar el conocimiento de sus ventajas entre los potenciales usuarios

Durante la mesa redonda dedicada a redes de calor celebrada en Expobiomasa 2023, conocimos de primera mano las experiencias de promotores que ya están explorando e implantando la hibridación de la biomasa con otras tecnologías renovables y con la inyección de calor residual industrial para aumentar la eficiencia y reducir el consumo de energía primaria en las redes existentes y de nueva construcción.

A partir de 2026 entrará en vigor un impuesto al CO₂ que también afectará a la calefacción doméstica, otro paso que complicará el uso de combustibles fósiles e inclinará aún más la balanza hacia el lado de las energías renovables, entre ellas la biomasa.

La biomasa es la tecnología preferida en las redes de calor, siendo utilizada por el 60% de todas las instalaciones.

Señalar además que algunas redes de calor que utilizan gas natural de origen fósil e importado podrían utilizar a medio y largo plazo biometano, renovable y nacional.

En cuanto a los equipos de calefacción individuales -estufas y calderas para uso doméstico de hasta 50 kW-, la crisis de los precios de los biocombustibles en 2022 y el aumento de la inflación, circunstancias comunes en toda Europa, tuvieron una manifiesta repercusión.

Una de las consecuencias fue el descenso del 13 % de las ventas e instalación de estufas de pellet en la segunda mitad de 2022 en comparación con el año anterior, cuando se batieron récords de ventas, y un aumento de la instalación de equipos modernos de leña.

A la espera de recopilar y analizar los datos para el año 2023, la importante participación de fabricantes y suministradores de equipos en Expobiomasa, con más de 460 firmas de las primeras marcas españolas y europeas mostrando sus nuevos productos más eficientes y con menores emisiones, indica que las perspectivas son buenas para este segmento.

Por otra parte, la instalación de calderas de biomasa de mayor potencia no se vio reducida, quizás porque el periodo de maduración de la decisión de compra e instalación es mayor, y así observamos un incremento en las ventas del 47% en 2022 respecto a 2021. Una tendencia positiva que esperamos confirmar que se ha mantenido durante 2023.

A pesar de que 2023 comenzó con los precios de los biocombustibles sólidos en niveles aún elevados a causa de la crisis energética del año anterior, desde el mes de abril los precios se mantienen estables en valores similares a los del verano de 2022 (275 €/ton).

Aunque volver a precios precrisis llevará tiempo, la llegada tardía del invierno y la búsqueda de fuentes alternativas de abastecimiento por parte de países como Italia, que compraron pellet a nuestros fabricantes el año pasado tensionando el mercado, parecen indicar que no veremos alzas en el precio al consumidor en España en los próximos meses.

En cualquier caso, la fabricación de biocombustibles sólidos en España está bien asentada con 67 fábricas de pellet, 57 de astilla y 31 de hueso de aceituna en 2023. En relación al pellet, somos uno de los mercados más fiable y de mayor calidad del mundo: estamos en la cuarta posición en número de fábricas y en la quinta en volumen certificado ENplus. El 90% de la producción española de pellets tiene calidad A1 gracias a las 36 fábricas y 37 distribuidores certificados.

En nuestro último informe sobre el mercado del pellet en España volvemos a observar que tanto la fabricación como el consumo de pellets en España siguieron aumentando en 2022, con 716.000 toneladas puestas en el mercado y 850.000 toneladas consumidas.

Una tendencia que se mantiene en 2023, año para que el estimamos que nuestras plantas habrán producido 800.000 toneladas, mientras que los consumidores habrían adquirido cerca de 900.000 toneladas. La diferencia entre fabricación y consumo se compensa con las importaciones desde Portugal.

Según la última encuesta sobre consumo de pellet en la UE elaborada por Bioenergy Europe, realizada a finales de noviembre y en la que hemos colaborado activamente, la mayoría de usuarios europeos y españoles confirma que seguirá utilizando pellets a pesar de que en la última temporada estuvieron preocupados por el incremento de los precios.

La prórroga de la rebaja del IVA del 21% al 5% para los pellets, briquetas y leña durante 2023 fue una buena noticia para los consumidores y para el sector empresarial. El hecho de que se mantenga en el 10% durante la primera mitad de 2024, tres meses más que para el gas natural, es positivo pero insuficiente. En Avebiom, al igual que otras organizaciones que defienden los intereses de la industria de la bioenergía, creemos que la reducción impositiva del 5 % debería haberse instaurado de manera definitiva.

Una rebaja definitiva del IVA a todos los biocombustibles sólidos de origen nacional - pellets, leña y briquetas y otros como hueso de aceituna, astillas y cáscaras de frutos secos-, aceleraría la adopción de una tecnología renovable, sostenible y local para calefacción.

En los próximos seis meses, haremos todo lo posible para convencer al gobierno de la oportunidad que supone para la transición energética de nuestro país mantener una fiscalidad ventajosa para la biomasa frente a los combustibles fósiles.

En 2023, los gases renovables, con el biometano a la cabeza, han tomado un impulso definitivo. En octubre, durante la tercera edición del Salón del Gas Renovable, que organizamos junto con nuestro partner tecnológico AEBIG, conocimos que en España existen alrededor de 200 proyectos de biometano en diferentes etapas de desarrollo. Una perspectiva positiva que se confirma en el último informe de la Asociación Europea del Biogás, donde figura que España aumentó un 38% su producción de biometano en 2023.

El 80% de nuestro potencial se relaciona con residuos y subproductos agroganaderos, requiriendo mejoras logísticas y la participación activa de agricultores y ganaderos. La valorización del digerido es crucial, tanto como la producción de energía renovable.

Avebiom ya está trabajando en la cuarta edición del Salón, que tendrá lugar el 1 y 2 de octubre de 2024, y también estudia como estrechar lazos de colaboración con el sector agrario para involucrar a los agricultores, esenciales en el desarrollo del biometano.