El sistema ofrece unas altas prestaciones térmicas, alcanza la clase AE, clase RE1500 y es Apto (1500 Pa) en los ensayos AEV

Cuarenta años después de su construcción llegaba el momento de rehabilitar por completo este edificio tan representativo de la ciudad catalana, un reto asumido por P+A Arquitectes. Vacío desde 2010 hasta la finalización de este proyecto, el objetivo principal de la obra era recuperar la funcionalidad del edificio según las nuevas exigencias normativas, salvaguardando en todo momento su esencia arquitectónica y su carácter tan personal. El nuevo edificio quedó inaugurado en marzo de 2022.

Tras la rehabilitación, la nueva sede acoge en sus más de 4.828 metros cuadrados y cinco plantas tanto usos administrativos como servicios portuarios. La planta baja ofrece servicios de carácter público a la ciudadanía (centro de información) y cuenta con un salón de actos y un centro de interpretación del Port. Este centro contribuirá a poner en valor el edificio y sus usos pasados y actuales, y servirá para dar a conocer a la sociedad la historia y evolución de esta institución.

Tanto para los promotores del proyecto como para los arquitectos, no cabía duda de que la fachada era un elemento esencial. La empresa barcelonesa Talleres Inox, especialista en fachadas, fue la encargada de trabajar los elementos envolventes, tan importantes para el proyecto.

El sistema de muro cortina escogido fue ECW-50 HL de Exlabesa. Además, la obra requirió también unos perfiles adaptados que contribuyesen a dar forma a la amplia superficie acristalada. Este es, sin duda, uno de los elementos arquitectónicos de mayor protagonismo en la nueva imagen de este edificio, que conserva su origen brutalista pero, además, busca conectar espacios interiores y exteriores con esos grandes huecos que aportan también mucha luminosidad al interior.

Durante el proceso de rehabilitación de un edificio, sobre todo uno tan icónico y representativo como este, se busca no solo recuperar su uso, ya sea público o privado, sino también cumplir nuevas normativas relativas a cuestiones medioambientales, eficiencia y sostenibilidad.

Las altas prestaciones térmicas del muro cortina semi-estructural ECW-50 HL han sido determinantes para que el edificio haya obtenido una certificación energética acreditada con la letra A.

Gracias a estas mejoras constructivas que ponen en valor la sostenibilidad, se ha logrado una certificación energética con la letra A, siendo ésta la más eficiente dentro de la escala de emisiones de CO2, contribuyendo así a la reducción de la Huella de Carbono del Puerto de Tarragona. No solo se trata de cumplir normativas, sino también de pensar en el futuro construyendo y rehabilitando de forma respetuosa con el medio ambiente.

En este sentido, el muro cortina semi-estructural ECW-50 HL ofrece unas altas prestaciones térmicas. Este sistema alcanza la clase AE, clase RE1500 y es Apto (1500 Pa) en los ensayos AEV (Permeabilidad al aire, estanqueidad al agua y resistencia a la carga de viento). Junto con un acristalamiento máximo de 39 mm, estas prestaciones lo convirtieron en la opción ideal para cumplir con las altas exigencias en materia de eficiencia energética que caracterizan al proyecto.

El muro cortina ECW-50 HL añade una dimensión de modernidad y solidez con el aluminio visto de su eje vertical. Las líneas verticales son discretas gracias a la silicona oculta. Los grandes paños de vidrio, limpios y elegantes, aportan una característica distintiva a esta fachada tan estilizada. Además, el sistema de drenaje interno en cascada asegura que la lluvia y la humedad se gestionen de manera eficiente y discreta, manteniendo la integridad de la estructura sin comprometer su estética.

Integrado en el conjunto, este sistema combina ejes vistos y ocultos aportando verticalidad y respetando la geometría de la construcción y dando protagonismo a la amplia superficie acristalada.

Ficha técnica

• Constructora: Comsa, Gicsa

• Estudio de arquitectura: P+A Arquitectes

• Fabricante: Talleres Inox

• Muro cortina: ECW-50 HL, de Exlabesa