Con especial hincapié en tecnologías como la Inteligencia Artificial, aplicaciones integradas en las cámaras y la nube

Este nuevo panorama también ha creado nuevos tipos de retos de seguridad. Los empleados, clientes y socios trabajan cada vez más desde ubicaciones remotas, compartiendo y colaborando a través de distintas redes en línea, lo que puede hacer que los datos sean vulnerables al robo. Puesto que los sitios se controlan de forma remota, las nuevas pautas de seguridad y salud pública rigen el funcionamiento de las empresas.

Estas son algunas de las principales tendencias y una valoración del impacto que tendrán en la industria a lo largo de 2022

Las soluciones de vigilancia y seguridad integran cada vez más el análisis en la propia cámara para entregar datos que pueden impulsar la protección y supervisión inteligentes. La función que desempeña el análisis integrado en la cámara continuará expandiéndose significativamente en 2022 y los próximos años, a medida que los clientes combinen las aplicaciones integradas y la Inteligencia Artificial para lograr una mejor supervisión y eficiencia de búsqueda.

Un informe de la industria pronostica que la infraestructura informática integrada global total tendrá un valor de más de 800 mil millones de dólares en 2028. El uso de la IA (Inteligencia Artificial) integrada en la cámara, especialmente con análisis basados en algoritmos Deep Learning, formará un elemento clave en una variedad de aplicaciones de ‘vigilancia inteligente’. Estas aplicaciones incluyen la detección y clasificación de objetos, así como la recopilación de atributos en forma de metadatos, todo mientras se reduce la latencia y los requisitos de ancho de banda del sistema y se permite la recopilación de datos en tiempo real y la supervisión de la situación.

La Inteligencia Artificial y las aplicaciones integradas continuarán mejorando la eficiencia y efectividad de los sistemas de videovigilancia en red, aplicando el análisis (objetos, merodeo, cruce de línea y áreas virtuales, detección, por mencionar solo algunos) para supervisar cada tipo de área o situación. Con la Inteligencia Artificial y las aplicaciones integradas que se utilizan en los sectores verticales, los usuarios pueden realizar una ‘detección preventiva’ y depender menos de la supervisión reactiva, lo que mejora la seguridad y la eficiencia.

Los sistemas de videovigilancia en red están pasando de ser simples dispositivos de supervisión a formar soluciones integrales que se pueden aplicar en todas las industrias verticales y sectores del mercado. Lo que impulsa todo esto es la tecnología de Inteligencia Artificial integrada con sistemas a todos los niveles, una tendencia que se espera que experimente un crecimiento sin precedentes. De hecho, los analistas de la industria calculan que el mercado global de vigilancia y seguridad basada en inteligencia artificial llegará a los 4.460 millones de dólares en 2023.

Los datos generados por las soluciones que utilizan cámaras dotadas con Inteligencia Artificial como sensores de visión crean una inteligencia empresarial significativa para ayudar a las organizaciones a comprender mejor a sus clientes y sus operaciones. Las cámaras térmicas y de detección de temperatura corporal instaladas en las entradas de espacios públicos y vestíbulos utilizan algoritmos de Inteligencia Artificial en la propia cámara para evitar las fuentes de calor no humanas y reducir la frecuencia de las falsas alarmas. Las soluciones basadas en la nube utilizan algoritmos de conteo de personas para ayudar a los propietarios de las tiendas a evaluar las ventas o las estrategias de diseño de planta o los mapas de calor para medir y evitar largas colas de pago y aumentar así la satisfacción del cliente. Se pueden emplear aplicaciones y beneficios similares a la gestión del tráfico o los sistemas de aparcamiento inteligentes, la logística y la distribución, o la atención médica para la supervisión de zonas críticas. Las empresas pueden automatizar sus tácticas de seguridad, con la respuesta adecuada ya planificada y lista para implementar.

La ‘Videovigilancia como servicio’, el ‘Control de acceso como servicio’: estos son términos que se oyen cada vez con más frecuencia en la industria de la seguridad. Pero, ¿qué significan en realidad y cuáles son los beneficios de un modelo de negocio ‘Como servicio’?

Con la evolución y mayor madurez de los servicios basados en la nube, los fabricantes de sistemas de videovigilancia pueden ahora transformarse en proveedores de 'Soluciones como servicios'. Los instaladores e integradores de sistemas de videovigilancia ahora pueden ofrecer soluciones a sus clientes a través de plataformas basadas en la nube y luego extender este modelo a todas las áreas de su negocio.

El mercado global de servicios de aplicaciones en la nube pública se convertirá en una industria multimillonaria en 2022. Las empresas pueden obtener muchos beneficios al empaquetar aplicaciones, infraestructura y procesos comerciales en una oferta combinada ‘Como servicio’ (aaS). Pueden reaccionar rápidamente a las condiciones del mercado que cambian rápidamente, salir al mercado más rápido con nuevos productos y servicios, y maximizar los beneficios de la analítica avanzada para mejorar las operaciones gracias a importantes conocimientos, todo lo cual ayuda a crear una ventaja competitiva única.

Con estos modelos, las organizaciones pueden personalizar las soluciones en función de sus necesidades, en lugar de depender de las ofertas ‘Listas para usar’. Un enfoque ‘aaS’ ofrece escalabilidad y rentabilidad, reduciendo el gasto de capital al ofrecer servicios bajo un marco de gastos operativos, con servicios prestados por suscripción.

La aplicación de los principios ‘aaS’ a la videovigilancia, da como resultado el llamado ‘VSaaS’ (Video as a Service), puede permitir a los usuarios adoptar la grabación basada en la nube. Esto elimina la necesidad de utilizar servidores en el sitio y permite a las organizaciones implementar sistemas rápidamente sin necesidad de configuraciones de red complejas y que consumen mucho tiempo. Las cámaras y todos los dispositivos se pueden supervisar de forma centralizada y muchos procesos de red y de sistema se pueden automatizar.

A medida que las organizaciones adoptan la digitalización, la capacidad de gestionar las operaciones de forma remota y obtener una mejor perspectiva a través de los datos que generan los sistemas ofrece un mayor valor. Para muchas empresas esto ha constituido ni más ni menos que una transformación.

Sin embargo, a medida que sus operaciones se realizan cada vez más por Internet, se gestionan de forma remota y dependen de la nube, las organizaciones deben implementar estrategias sólidas de seguridad cibernética para proteger los datos que son tan valiosos para ellas. Así, según Interpol, los casos de ciberataques han aumentado drásticamente durante la pandemia, bien a través de suplantación de identidades, estafas en línea y software malicioso, como denegaciones distribuidas de servicio (DDoS).

Como resultado de ello, las organizaciones son cada vez más conscientes de sus responsabilidades de protección de datos con medidas como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), y buscan proveedores y socios que no solo comprendan las reglas de privacidad de datos relacionadas con la vigilancia, sino que también puedan ayudar a asegurar que sus datos se mantengan seguros en todo momento.

Si bien es una iniciativa que viene de los Estados Unidos, la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA) sigue siendo importante para muchas empresas europeas. También hay preocupación por la seguridad nacional fuera de los EE UU y los gobiernos de Europa están mostrando claros signos de endurecimiento de su postura.

Partiendo de esto, los fabricantes que compiten en ciertos tipos de contratos, especialmente en el sector gubernamental o relacionados con el comercio internacional, deberán cumplir con estas regulaciones en todas sus operaciones y líneas de productos para poder disfrutar de nuevas oportunidades comerciales.

La tecnología de red y el Internet de las Cosas (IoT) ya se han adoptado ampliamente, pero continuarán incursionando en el mercado de cámaras de seguridad, lo que permitirá nuevos avances en la transmisión de vídeo HD, incluso en dispositivos móviles. Estas tecnologías ampliarán las aplicaciones potenciales para análisis de audio y vídeo e Inteligencia Artificial en un mundo cada vez más conectado. A un nivel más amplio, hay un aumento masivo en la transformación digital en general, y tecnologías clave que impulsan este cambio, entre ellas IoT y redes, así como informática en la nube, datos inteligentes e Inteligencia Artificial.

Se espera que IoT disfrute de un impacto positivo de los desarrollos en la tecnología de redes, especialmente en términos de ancho de banda y latencia. Agregar tecnología de red avanzada a las cámaras es compatible con la videovigilancia remota en tiempo real, el uso ampliado de aplicaciones móviles y la gestión de redes heredadas.

El Internet de las Cosas con Inteligencia Artificial (AIoT) ofrece una variedad casi ilimitada de oportunidades potenciales, desde sistemas y plataformas abiertas e integradas hasta una mayor conectividad de dispositivos.

En resumen, 2022 verá el desarrollo continuo de tecnologías como la Inteligencia Artificial para dar un mayor valor a los usuarios, lo que a su vez creará nuevas oportunidades comerciales para instaladores e integradores. A medida que la Inteligencia Artificial se integre cada vez más en las cámaras, sus beneficios llegarán a un público mucho más amplio y está destinada a transformar el mercado de la seguridad.