La sostenibilidad en el sector de la puericultura

La sostenibilidad, el cuidado por el medioambiente, el reciclaje, el uso de materiales reutilizables…son aspectos que el consumidor actual tiene cada vez más presentes a la hora de comprar. Asimismo, este consumidor también se fija cada vez más en las actuaciones de las empresas y sus iniciativas ecológicas, convirtiéndose en un factor de peso a la hora de decantarse por una marca u otra. Esta tendencia, que nos acompaña desde hace tiempo, está ganando mucha relevancia últimamente, y se traslada también al sector de la puericultura, donde cada vez más empresas apuestan por procesos, materiales y productos respetuosos con el medioambiente, aunque los profesionales reconocen que todavía queda camino por recorrer. Para analizar cómo el sector de la puericultura se está adaptando a las estrategias e iniciativas más sostenibles, conversamos con Josep M. Vallès, gerente de Smart Group, y Rosa Mayans, propietaria de Carussa Ciutadella, que comparten con nosotros sus respectivos puntos de vista en materia de sostenibilidad, así como las principales iniciativas que llevan a cabo sus empresas para cuidar del medioambiente.

SMART GROUP: “Desde nuestro punto de vista, la sostenibilidad es una actitud que debe imponerse el fabricante. La sostenibilidad de los productos es todavía muy incipiente, y las familias raramente pagan más por un producto sostenible. Es un argumento que puede acabar de decidir la compra, pero diseño, funcionalidad, seguridad y confort pasan por delante de la sostenibilidad”.

CARUSSA: “Por ahora no hemos detectado un aumento sustancial de la demanda de lo ecológico, más allá de las tendencias o modas en el mercado: vajillas de fibras (bambú, maíz, etc.). De hecho, artículos eco siempre ha habido, pero ha sido curioso ver que la demanda ha caído en picado. El ejemplo más significativo son los pañales de tela. Hace unos años hubo un interés creciente, algunas de nuestras clientas lo probaron, pero pocas (por no decir ninguna) continuaron hasta el final. El motivo es simple: es más cómodo usar y tirar que tener que lavar pañales y pañales”.

SMART GROUP: “Joie es, sin duda, un modelo a seguir. En sus fábricas lleva muchos años utilizando energías renovables (especialmente energía solar, con la que se ha conseguido reducir 1.500 toneladas de emisiones de gas), reciclando el 80% del agua que se utiliza en la producción y utilizando más de 1.000 toneladas de desechos de plástico para confeccionar, entre otros productos, las cajas en las que se almacenan las materias primas y los productos semielaborados. Los vehículos para el transporte de personas en las fábricas son también eléctricos y el ahorro de energía en general es una de las obsesiones de la dirección”.

CARUSSA: “En nuestro caso cumplíamos la normativa autonómica antes de que fuera obligatoria. Y el claro ejemplo es que nunca hemos tenido bolsas de plástico, siempre han sido de papel. Ahora es obligatorio en los comercios de Baleares no usar plásticos en las bolsas. En nuestro caso preguntamos si quieren bolsa, y en muchos casos descubrimos que no les hace falta. Además, estamos pensando cobrarlas en caso de compras inferiores a 20 euros. Primero por el tema económico, porque cada vez es más caro comprar bolsas, y segundo por la parte ecológica: para qué quieres una bolsa que cuando llegues a casa la vas a tirar o almacenar sin darle otro uso”.

SMART GROUP: En general se debería trabajar en un doble aspecto: por un lado, la economía circular, es decir, reciclar los productos que ya no se van a utilizar. Los chasis de las sillas de paseo son de aluminio y tienen un fácil reciclado, y los plásticos se pueden también reaprovechar siempre y cuando los consumidores los lleven a un punto verde para deshacerse de ellos.

La otra vertiente es producir de forma ecológica y sostenible, especialmente aprovechando al máximo las energías renovables, reciclando los residuos y reduciendo al máximo los desechos.

Asimismo, existe una tercera vertiente que es producir con materiales reciclados siempre que sea posible, porque hay algunos productos de seguridad que presentan peor comportamiento si se elaboran con materiales reciclados. Y desde nuestro punto de vista la seguridad debe primar siempre.

CARUSSA: “Nosotros, como tienda, creemos que más bien poco. Ya nos obligan a apagar las luces a las 10 de la noche y tener el aire a 27 grados en verano. Una medida, por cierto, con la que no hemos visto resultados en la factura de la luz. El problema que detectamos es cuando recibimos paquetes. El cartón no es problema, se recicla. Pero, ¿y todo el plástico en el que viene envuelto el articulo dentro de su caja? Es increíble la cantidad de bolsas de plástico en las que vienen muchos de los artículos. Nosotros las reciclamos como bolsas de basura, pero generamos tantas que al final muchas se van a reciclaje. ¿Es necesario poner un artículo dentro de una bolsa de plástico si ya viene con su caja de cartón?”

SMART GROUP: “Joie acaba de presentar su colección Cycle, en la que los tejidos provienen del reciclado de botellas de plástico. Las botellas usadas se recogen, se trituran y se funden para convertirlas en hilo que posteriormente se usa para tejer las telas con las que se confeccionan los diferentes productos.

La nueva colección Cycle de Joie incorpora tanto sillas de automóvil como sillas de paseo y tuvo una excelente acogida en Expoaventura, tanto por lo acertado del color como por la sostenibilidad de sus tejidos”.

CARUSSA: “Como hemos comentado antes, no es que apliquemos políticas activas, más allá de las que ya veníamos aplicando desde siempre”.

SMART GROUP: “En nuestro país no es clave. Por delante de la sostenibilidad pasan diseño, funcionalidad y confort. Son pocos los clientes que compran un producto porque la empresa aplique políticas de sostenibilidad (o de igualdad o de conciliación familiar, por poner otros ejemplos) o porque los productos incluyan materiales reciclados o reciclables. En nuestro país se practica muy poco la compra sostenible, entendida como que se garantiza un impacto ambiental negativo bajo, se promueven iniciativas sostenibles y se garantizan los principios de responsabilidad social corporativa”.

CARUSSA: “No, por ahora no. Es cierto que hay alguna pregunta tipo si tenemos biberones de cristal, pero es muy minoritaria. Al final lo ecológico es un punto más en la venta, pero en ningún caso, al menos para nosotros, ha sido el factor decisivo”.