markilux destaca por el diseño de sus productos, de formas claras y modernas

En su origen, los toldos eran un producto puramente técnico, destinado a cumplir un objetivo específico: proteger de forma efectiva frente al sol. Pero, a lo largo del tiempo, la estética, la calidad y la identificación con la forma y los colores también han ganado cada vez más importancia en los toldos. Por ello, en markilux los toldos tienen que cumplir con la estética de una arquitectura moderna, siendo un factor embellecedor de la fachada.

Han sido necesarios 50 años de camino para llegar hasta donde markilux, el especialista en toldos, se encuentra hoy en día. Desde el principio, la empresa otorgó gran importancia a la simbiosis entre la calidad y la estética. “La calidad es una forma de diferenciarse en el mercado. Esta tiene que ir más allá de la función, mostrándose también en su diseño exterior”, explica Michael Gerling, director gerente técnico y de producción.

A lo largo del tiempo cada vez se ha perfeccionado más la interrelación de sofisticación técnica y un bello aspecto, con el objetivo de darle a la marca una visualización estética. Este objetivo es una parte fundamental del proceso creativo, desde la primera idea hasta el producto finalizado. Para ello, markilux se orienta en una arquitectura moderna, un diseño actual de productos y las últimas tendencias de colores. “Tras muchos años desarrollando productos, hoy nos consideramos el especialista en toldos de diseño”, afirma Gerling.

En especial, el markilux 970, pero también todos los modelos de la serie MX, como el MX-1 compact, el MX-3 y el nuevo MX-2, representan hoy en día el típico aspecto markilux. Éste está formado por la combinación de formas redondas con líneas rectas y claras de aspecto cubista, con detalles especiales de color o acabados especiales del material. Esto está destinado a mostrar la gran calidad y destacar que se trata de productos exclusivos e individualizados. Gerling opina que el éxito de la marca viene dado especialmente por esto: “El cliente final valora especialmente el aspecto de un producto y también la opción de adaptarlo de alguna manera a los deseos específicos de uno mismo. Y esto es justo lo que ofrecemos”, explica.

El desarrollo de un diseño identificable como propio, que forma parte del mensaje de marca, es un proceso que lleva su tiempo. Un proceso compuesto por la observación continua del mercado, un equipo creativo de desarrollo y el placer de experimentar con materiales y acabados novedosos. Además, se comprueban las opciones técnicas y se potencia la motivación de reinterpretar continuamente la forma de los toldos.

Este estilo de diseño también se define por modernas lonas para toldos que, con su superficie textil de color, tienen un gran efecto en el aspecto global del toldo. La empresa apuesta para ello por diseños de lona tanto atemporales como de última tendencia. “El aspecto de nuestros toldos muestra una concordancia perfecta. Está adaptado al mobiliario, a los jardines y a los diferentes estilos de casa. Porque esto es lo que desean los clientes finales”, comenta Michael Gerling. El diseño tiene que satisfacer, darle a cada casa ese toque especial. Y hacerlo durante muchos años, gracias a una tecnología inteligente y segura.