Diverfarming está financiado por el Programa Horizonte 2020 dentro del reto de ‘Seguridad alimentaria, agricultura y silvicultura sostenibles, investigación marina, marítima y de aguas interiores y bioeconomía’
Un modelo matemático facilita la gestión de inventarios en la cadena de suministro de alimentos
Una investigación del proyecto Diverfarming, en el que participa la Universidad de Córdoba, integra los recursos de transporte y la gestión de inventarios en un modelo que busca la eficiencia económica y evitar el desabastecimiento.
Entre el alimento que se cosecha en campo y el plato ya cocinado que se coloca en la mesa hay un largo camino. La cadena de suministro de alimentos comprende a todos aquellos procesos y actores involucrados en la satisfacción de las necesidades del consumidor. Para que la cadena sea un éxito se necesita una correcta administración de los productos en el almacén, inventariado, gestión del transporte y coordinación entre almacenes, transporte y destinatario.
En este sentido, el grupo investigador del proyecto Diverfarming, enmarcado dentro del paquete de trabajo 6 del proyecto, encargado del diseño y análisis de las cadenas de valor, y dirigido por el Dr. Francisco Campuzano-Bolarín (Universidad Politécnica de Cartagena) ha desarrollado un modelo matemático que facilita la toma de decisiones a la hora de planear las capacidades de distribución y conseguir un equilibrio entre el rendimiento de los inventarios y el transporte en una red de suministro, teniendo en cuenta diferentes escenarios que varían en función de la disponibilidad de vehículos.
El modelo desarrollado se basa en la metodología de la dinámica de sistemas, una forma reconocida para enfrentar problemas relacionados con procesos dinámicos, como es la cadena de suministro. Este conjunto de ecuaciones, datos de entrada y relaciones entre variables se puso a prueba en una cadena de suministro a nivel nacional de productos congelados. Esto permitió determinar la mejor configuración de parámetros para obtener la mejor alternativa de decisión en términos de costos y niveles de inventarios, optimizando el procedimiento en cuanto a costes y niveles de abastecimiento.
Este modelo se puede aplicar a cadenas de suministro relacionadas con sistemas de cultivo diversificados, que es el objetivo del proyecto Diverfarming que, financiado por la Comisión Europea, busca implantar la diversificación de cultivos en la agricultura europea para obtener beneficios medioambientales y económicos. Para ello, se trabaja también en el diseño y análisis de cadenas de valor, con el objetivo de facilitar la adopción y difusión de agroecosistemas diversificados. Con este nuevo modelo se da un paso más hacia ese objetivo.
En el contexto de la cuarta revolución industrial o Industria 4.0, entendida como la tendencia actual de automatización e intercambio de datos en la que se incluyen el Internet de las cosas y los servicios en la nube, se prevé un crecimiento de la industrialización que puede perturbar los sistemas industriales actuales.
El mayor consumo de recursos, calentamiento global y cambio climático que puede derivarse de esta situación pone de manifiesto la necesidad de adoptar prácticas de gestión de la cadena de producción y suministros que tengan en cuenta la sostenibilidad (económica, social y medioambiental) como estrategia de hacer frente a los efectos negativos derivados de la Industria 4.0.
En esta línea, el grupo investigador del proyecto Diverfarming, enmarcado dentro del paquete de trabajo 6 del proyecto, encargado del diseño y análisis de las cadenas de valor, y dirigido por el Dr Francisco Campuzano-Bolarín (Universidad Politécnica de Cartagena) acaba de publicar en la revista Sustainability una revisión de las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora sobre la cadena de suministro sostenible en la Industria 4.0. En esta revisión se concluye que sólo unos pocos trabajos se ocupan del enfoque social de sostenibilidad en la Industria 4.0., dado que la mayoría se enfocan principalmente en habilitar tecnologías para reducir costes y monitoreo. Aún así, este trabajo identifica diferentes proyectos que han adoptado la sostenibilidad como parte de sus objetivos, como es el caso de la convocatoria H2020 de la Comisión Europea.
Con este trabajo, encuadrado también dentro del proyecto Diverfarming, se anima a que las líneas de investigación futuras se centren en referenciar en una cadena de suministro sostenible desde las tres perspectivas: económica, ambiental y social, de manera integrada.