Paquetes de bebidas
Los paquetes de bebidas van apartándose de la forma rectangular y sorprenden por su aspecto semejante a los botes. Llaman la atención los paquetes de bebidas que pueden volverse a cerrar. Mediante un cierre roscado y con amplia boca oblicua, es posible echar el líquido con limpieza. Los envases están abombados por delante hacia fuera y por detrás hacia dentro, con lo que es posible alinearlos en estanterías ocupando poco espacio. El cierre va incorporado en el envase y no sobrepuesto como en los envases habituales en bloque o piramidales.