Juguetes Picó

Juguetes Picó nace como una empresa familiar desarrollando productos a base de tubo y hojalata. Manuel Picó Gisbert, que comenzó sus pasos como industrial del juguete hacia el año 1922 creando la empresa Picó Sanjuan y Cia, dedicada a la fabricación de juguetes característicos de aquella época. Acabada la Guerra Civil, Manuel Picó Gisbert, decide montar un almacén de juguetes en sociedad, pasando a denominarse Almacenes Ferre y Cia. estableciendo su sede en Córdoba. Al tiempo de ejercer como almacenista, le vuelve a atraer la idea de fabricar juguetes de nuevo, y vuelve a Ibi en el año 1.942, estableciendo en los bajos de su casa una industria, ayudado por su familia, que denomina, la hoy existente, Juguetes Picó.

En los primeros años se fabrican cocinas y utensilios propios del hogar, todo ello fabricado con recortes de hojalata sobrantes de la industria conservera hasta que hacia 1944 inicia la fabricación de los primeros cochecitos de muñeca. Por aquellos años se carecía de chapa en plancha y se tenía que manufacturar con chapa procedente de botes recuperados, de la industria conservera, primordialmente. Esta primera fabricación de sillitas marcaba un principio de lo que se convertiría en el producto o especialidad base de Juguetes Picó.

Desde el 44 hasta 1.950 se fabricaron modelos de coches y aviones de hojalata; las escopetas de madera y cañones de hojalata se iniciaron a fabricar durante el año 1.943 y cubrió toda una larga época, hasta los años 1.960, siendo por tanto el producto más importante durante muchos años. Se fabricó un tren Talgo a resorte de hojalata y en 1.954 se produce la segunda incursión en la fabricación de cochecitos para muñeca que, con el tiempo, sería definitiva.

Con la aparición de nuevas tecnologías, se va invirtiendo en procesos y productos. Se introduce el plástico como un componente básico.

En la actualidad, la tecnología está centralizada en:

• Transformado del tubo de acero.
• Inyección de termoplásticos.
• Trasformado de la tela.

En primer lugar se realiza un estudio en el que participan tanto las ideas de marketing como las de diseño. Una vez que se han aprobado los proyectos correspondientes en base a unos modelos y diseños simulados en ordenador, se pone en funcionamiento el diseño de componentes.

En el departamento técnico, se realiza el diseño y desarrollo no sólo de los artículos; sino que integra además el diseño del proceso.

De aquí nacen el diseño de piezas y componentes, los moldes de inyección y el utillaje necesario.

Se diseñan las piezas y componentes integrantes del artículo. Se ajustan en el producto final y se estudia el resultado. Siempre cumpliendo las más estrictas normas de seguridad para el niño y para la obtención de un artículo de las más altas prestaciones.

Conforme a las necesidades de estos componentes se estudia las necesidades de utillaje, matricería y moldes. Se analiza el proceso de conformado y montaje y se diseña la maquinaria necesaria.

Llegados a este punto, se analizan en el mercado las tendencias de colores y estampados y se genera un producto “a la moda”. Se ofrecen varias combinaciones para que el cliente pueda tener la posibilidad de elegir.

Los juguetes que esta empresa saca al mercado pasan por los rigurosos controles del Instituto Tecnológico de Juguete (AIJU); bajo los siguientes requisitos:

• Cumplimiento de la norma EN71. Esta norma fija los requisitos y describe los métodos de ensayo que hay que tener en cuenta en la fabricación de los juguetes. Tiene por objeto eliminar, en la manera que sea posible los riesgos que no aparecen de una forma evidente para los usuarios. Tiene las siguientes partes:

1) Propiedades mecánicas y físicas. Esta parte de la norma especifica las exigencias y los métodos de ensayo para las propiedades físicas y mecánicas de los juguetes. También especifica los requisitos sobre el embalaje, el marcado y las instrucciones de uso.

2) Inflamabilidad. Esta parte especifica las categorías de los materiales inflamables prohibidos en todos los juguetes, y los requisitos relativos a la inflamabilidad de ciertos juguetes cuando se les somete a una pequeña fuente de inflamación.

3) Migración de ciertos elementos. Esta parte de la norma describe los ensayos que se realizan para garantizar que los juguetes no presentan determinadas sustancias tóxicas. Este apartado es muy importante debido a que los niños tienen tendencia a llevarse elementos a la boca.

• Ensayo de ludoteca. Esta es quizá la prueba más dura. Los juguetes se someten al trato por parte de los niños, en un laboratorio de AIJU y tutelados por un psicólogo. Éste anota el valor pedagógico del artículo, los posibles peligros y aceptación por parte del niño.
• Cuando el artículo cumple estos requisitos, se solicita a TÜV PS el correspondiente análisis, el cual consta de los siguientes requisitos:

* Requisitos documentales en cuanto ensayos, certificados y materiales de los productos.

* Envío y análisis de muestras.

El siguiente gráfico muestra el flujo de producción de Juguetes Picó. Como se observa en la concurrencia de flechas, si se tienen controlados los puntos de inspección en recepción, prácticamente se tiene controlado todo el proceso.