Numerosos edificios emblemáticos están literalmente “pegados”

¿Sabía usted que las torres del edificio más alto del mundo, con sus 828 metros de altura, se sostienen gracias a adhesivos con base de silicona y sellantes? El edificio Burj Khalifa de Dubai, resultó toda una sucesión de retos para los arquitectos e ingenieros implicados en el proyecto. El primero fue enfrentarse al diseño del edificio que debía soportar fuertes vientos y las inclemencias climatológicas. A esto, hay que sumar la pesadilla logística que supuso el transporte de toneladas de material y la contratación de cientos de trabajadores.

Y fueron los adhesivos y sellantes los que permitieron alcanzar uno de los objetivos principales, la espectacular altura del edificio. El cerramiento exterior utiliza vidrios reflectantes con aluminio y paneles con textura de acero inoxidable y acero inoxidable vertical. Se utilizaron cerca de 26.000 paneles de vidrio, cada uno cortado a mano de forma individual. La estructura completa tiene un área de superficie de cerca de 17 campos de fútbol.

Para compensar las fuerzas que actúan sobre el edificio, se ha utilizado el sellante de silicona para aislar vidrio. Además, el sellante de silicona estructural para acristalamientos proporciona una estabilidad adicional entre los vidrios y la estructura de aluminio. Dentro, los ingenieros emplearon diferentes sellantes de silicona en los baños de los lujosos pisos. Este sellante ofrece una gran flexibilidad, combinada con una adhesión segura tanto en las superficies porosas como no porosas.

Para la construcción del edificio, los expertos probaron una diferente gama de materiales. Tenían que cumplir los requerimientos demandados en términos de flexibilidad, calor y resistencia a los terremotos, lo cual lograron gracias al empleo de formulaciones de silicona muy especializadas.

El pegamento, una técnica ancestral

Puede parecer algo actual, sin embargo el pegamento ya lo utilizaban los sumerios, babilonios y egipcios, creando una sustancia a partir de pieles y huesos de animal hervidos.

En 1972, cinco asociaciones de adhesivos de Bélgica, Alemania, Francia y Países Bajos, fundaron la Asociación Europea de Fabricantes de Adhesivos en Roma. Fue la precursora de Feica, Fédération Europaene dels Industries de Colles et Adhésifs, la Asociación Europea de Adhesivos y Sellantes.

Entre 1972 y 2006 la sede de Feica se ubicaba en la ciudad alemana de Düsseldorf. Allí, en estrecha colaboración con la Asociación Alemana de Adhesivos (IVK- Industrieverband Klebstoffe), evolucionó a una organización profesional capaz de dar respuestas a las necesidades de la industria europea.

En 2006, Feica se trasladó a Bruselas y actualmente funciona como una asociación europea independiente. Los miembros de Feica han crecido hasta las 14 asociaciones y un número de miembros directos y empresas asociadas.

Como representante europeo de la industria de adhesivos y sellantes, Feica informa, coordina, representa y defiende el interés común de la industria en Europa junto a sus asociados.

El volumen de ventas total de la industria europea de adhesivos y sellantes fue de aproximadamente 10.500 millones de euros en 2009, pero ésta es solo una parte de la historia.

O para ser más precisos, ¿cómo mantiene el balón su forma redondeada? Tampoco es algo que se conozca, pero los adhesivos desempeñan un importante papel en ello. ¿Por qué las botas de los jugadores son mucho más ligeras que las que usaban en la época de Stanley Matthews? La respuesta en sencilla: por los adhesivos. Las botas están fabricadas a partir de composites avanzados y pegados con adhesivos de alto rendimiento. Gracias a estas tecnologías, las botas de fútbol actuales son mucho más robustas, ligeras y seguras.

El balón no se queda atrás. Los balones de fútbol que se utilizan en mundiales, por ejemplo, están fabricados con plásticos especiales que están pegados y no cosidos. La superficie ofrece la máxima resistencia a la abrasión, absorbe agua y tiene propiedades adecuadas en el vuelo, sin perder su forma tras el uso continuado.

Modernos elementos decorativos en las paredes que se pueden retirar fácilmente en cualquier momento. Imagen de Feica.

Los adhesivos también desempeñan un papel muy importante en la industria de la automoción. Gracias a ellos, los vehículos son más seguros y más económicos. Sustituyen a los procesos de soldadura convencional. Por ejemplo, si en 2001, se utilizaron cerca de diez metros de líneas de adhesivos en el cuerpo del modelo BMW 7, en la actualidad se utiliza 15 veces esa misma cantidad. Hoy cerca del 9% del total de la producción anual de adhesivos se utiliza en esta industria.

Actualmente, un vehículo contiene hasta 18 kilos de adhesivos y por una buena razón: los ensayos de choque han demostrado que los vehículos unidos por adhesivos funcionan mejor que los diseños soldados. Un factor importante es que los adhesivos no afectan los sustratos utilizados en el ensamblaje, mientras que otras técnicas de fijaciones mecánicas, incluyendo la soldadura o remachado pueden afectar la rigidez de los materiales ensamblados, apuntan desde la organización europea.

Los coches modernos utilizan una amplia gama e materiales como chapa, vidrios, caucho y plásticos. Los adhesivos son la solución ideal para unir estos materiales.

Los adhesivos se utilizan en casi todas las industrias, desde un pequeño Post it, para crear miniaturas o para decorar las paredes del hogar. En todas ellas, incluyen sofisticadas tecnologías que no dejan de evolucionar. Y para ello, como en muchos otros casos, los ingenieros y científicos observan una de las mayores fuentes de inspiración, la naturaleza.