Comenzó reciclando y amplió con los años su actividad

Aplast combina el reciclado con la producción de bobinas de film y bolsas

Redaccion PU01/12/2008

Aplast se constituyó en abril de 1985 como compañía dedicada exclusivamente a la recuperación de desperdicios o desechos de polietileno limpio procedentes del sector de film de polietileno. Como consecuencia del desarrollo de sus actividades obtuvo en el año 2002 la concesión por parte de la Diputación General de Aragón de Gestor de Residuos no Peligrosos.

Desde sus comienzos esta empresa ubicada en Zaragoza se dedica a la compra y transformación de los residuos en granza, así como a la recogida de los desechos industriales de empresas del sector para devolverles la granza obtenida. Los materiales de reciclado inicialmente eran polipropilenos y polietileno de alta y baja densidad, pero actualmente su actividad se ciñe a los polietilenos de alta y baja densidad.

Durante el año 1989 se realizaron diversas inversiones con el fin de ampliar las posibilidades de Aplast. Desde esa fecha, la empresa fabrica bobinas de film y ha entrado en el mercado del ‘mat’ virgen de alta y baja densidad, además de seguir como elemento principal en el mercado del reciclado, para el suministro a manipuladores de film de polietileno.

Posteriormente en el año 1990 y durante los siguientes años, Aplast ha integrado en su proceso productivo la fabricación de bolsas de plástico impresas, tras haber adquirido diversa maquinaria para el corte, confección e impresión de las bolsas. Su producción se dirige principalmente a bolsas de basura de cualquier tamaño y color, sacos industriales e impresión de cualquier tipo de bobina o bolsa y siguiendo con la faceta de venta de bobinas y producción a maquila de alta y baja densidad.

En 2003 incorporó a su parque de maquinaria otra línea de recuperación de granza. En la actualidad, su capacidad de producción total se cifra en las siguientes cantidades totales:

• 4.800 toneladas de granza recuperada anual.

• 1.500 toneladas de bobinas de film de polietileno.

• 1.800 toneladas de bolsas de polietileno.

Su actividad comprende los siguientes pasos: recepción y compra de desechos limpios, clasificación de la materia prima, fabricación de granza propia y a maquila, extrusión de bobinas de film, impresión de film y fabricación y confección de bolsas y sacos.

“Para el adecuado funcionamiento y desarrollo de nuestro trabajo -explica J. Javier Candial, Director de Aplast- disponemos de 7.000 metros cuadrados de naves industriales y terrenos dentro del Polígono Industrial Malpica de Zaragoza, 15 personas en plantilla perfectamente cualificadas por su antigüedad y experiencia, así como las necesarias instalaciones de energía, piscina, prevención contra incendios, seguridad etc.”

Cuenta además con un parque de maquinaria completo, que incluye dos líneas de recuperación, seis extrusoras, cinco confeccionadoras de bolsas y una impresora. Este amplio parque de máquinas abre un rango muy amplio de trabajo, por lo que en los último años y motivado por un lado por la concienciación hacia el reciclado y por otro, por el menor precio de estos productos, Aplast ha evolucionado aún más dentro del mercado de los manipuladores de bolsas. “Evidentemente -señala J. Javier Candial- a este mercado no se puede hacer frente sin unos estándares de calidad, pero Aplast está capacitada para ello, ya que desde un primer momento comercializar productos de gran calidad, partiendo de retal y cerrando todo el proceso ha sido una de las metas.”

Esta empresa zaragozana no cuenta con lavadero, “ya que nuestra gama de productos no lo permiten, pero tenemos tanto instalaciones como el espacio necesario para proceder a su instalación. Por este motivo no generamos ningún tipo de residuo.

El plástico que no supera nuestros mínimos de calidad o es rechazado, o vendido a empresas que lo deriven hacia lavadero, por lo que la normativa respecto a este campo, no nos afecta”.

Sobre cómo afecta la actual situación económica a un reciclador como Aplast, J. Javier Candial dice que “evidentemente, no somos una excepción a la bajada de ventas en nuestros productos estándares, pero venimos desarrollando desde hace un año un plan de diversificación de productos, así como la entrada en mercados que anteriormente no nos eran afines, y de esta manera estamos consiguiendo un mantenimiento de rentabilidades que nos ayuda a plantearnos, como anteriormente he indicado, nuevos proyectos de ampliación.”