Los plásticos contribuyen a un uso más eficiente, inteligente y sostenible de los recursos
Eficiencia y sostenibilidad en construcción
Durante su ponencia, Irene Mora afirmó que los plásticos “son imprescindibles para la reducción del consumo de energía y de las emisiones de CO2 en el sector de la construcción”. El consumo energético de un edificio se puede reducir considerablemente desde la fase de diseño incluyendo soluciones plásticas para el aislamiento térmico. A modo de ejemplo, Irene Mora destacó que “sólo 1,6 cm de espuma de plástico rígido ahorra durante su vida útil más de 200 veces la energía necesaria para su fabricación ofreciendo además un aislamiento térmico equivalente a una pared de hormigón de 1,3 metros”.
Conservación de alimentos y ahorro de recursos
En su ponencia, la representante de PlasticsEurope también habló de la sostenibilidad de los envases plásticos explicando que su fabricación demanda menos energía que la de otro tipo de envases, y que su uso es clave para disminuir las pérdidas de alimentos, uno de los retos clave en Europa: “los envases plásticos con atmósfera modificada pueden alargar la conservación de un alimento de 5 a 10 días, de forma que las pérdidas de alimentos se pueden reducir del 16% al 4%”.
En cuanto al ahorro de recursos, los envases plásticos también destacan puesto que conservan su valor incluso al final de su vida útil. Pueden reciclarse y transformarse en nuevos productos, o recuperarse como energía para reducir el consumo de los combustibles fósiles.
Residuos plásticos, un recurso muy valioso
La industria de los plásticos ha adoptado un papel activo para contribuir a la reducción de la cantidad de residuos plásticos que se desperdician en los vertederos. Así, PlasticsEurope apuesta por un reciclaje de calidad y por la recuperación energética de aquellos residuos plásticos cuyo reciclaje ya no presente beneficios medioambientales ni económicos, siendo ambas opciones complementarias y necesarias para alcanzar el 100% de recuperación de residuos plásticos. La asociación trabaja en la difusión de buenas prácticas y en la puesta en marcha de iniciativas que permitirían mejorar el rendimiento en los diferentes países europeos a través de un claro objetivo estratégico: lograr que para el año 2020 ningún residuo plástico acabe en vertedero y se desaproveche su gran valor.
En 2011, en España, el 26% de los residuos post-consumo de plásticos se recicló mecánicamente, el 20% se recuperó energéticamente y el 54% restante acabó en los vertederos. En Europa, 7 países generan el 77% de los residuos plásticos, siendo Alemania el país con mayor generación (18%). Por su parte, España ocupa el quinto lugar en generación de residuos plásticos (9%). En relación a estos datos, la propia Comisión Europea afirma que entre los Estados miembros “debe facilitarse el intercambio de las mejores prácticas en materia de recogida y tratamiento de residuos, puesto que en algunos Estados miembros ya se recupera más del 80% de los residuos”.
De hecho, según los últimos datos de gestión de residuos plásticos en 2011, si aprovecháramos el valor de todos los que se desperdician en los vertederos, Europa podría ahorrarse 8.750 millones de euros al año en su factura energética y España algo más de 1.000 millones de euros.
