Entrevista a Xavier Albort, coordinador general de las VII Jornadas de Medio Ambiente de Eurosurfas
26 de septiembre de 2011
Las Jornadas Técnicas de Medio Ambiente de Eurosurfas llegan a su séptima edición, consolidadas como uno de los principales valores añadidos del salón. ¿Cuáles son los objetivos de las jornadas en esta edición?
Dada la situación actual, y en colaboración con el Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña, hemos querido abordar un amplio abanico de temas. Esto implica que no nos centremos sólo en el tratamiento de superficies sino que abarquemos otros vectores como es el marco institucional, la valoración energética de los residuos o las emisiones a la atmósfera. Por tanto, se analizará todo lo que la nueva Ley de Prevención de la Contaminación y Calidad Ambiental (PCCA) implica para las empresas del sector. Las Jornadas son una gran oportunidad para conocer todo el entramado administrativo y para concienciar a todo el mundo de la importancia que tiene el respeto al medio ambiente.
¿Cuáles son las principales preocupaciones del sector del tratamiento de superficies en torno al medio ambiente?
La principal preocupación del sector pasa por la minimización de residuos y su posterior recuperación. Hay que tener en cuenta que se trata de un sector contaminante en grado alto en el que hay una pérdida de producto añadido sin un valor de recuperación. En la actualidad, hay procesos de tratamiento de níquel y de cromo, cuyos subproductos se recuperan en Alemania. Es destacable el proceso de recuperación de los sulfatos de aluminio que se utilizan como aditivo para la fabricación del cemento. El resto de procedimientos se hacen mediante tratamiento físico-químico de depuradora o por el vertido cero.
Por desgracia, en nuestro sector no se puede llevar a cabo un proceso ni biológico ni bacteriológico, ya que tratamos metales que precisan un proceso físico-químico lo que supone un gran gasto de producto en la depuradora y, posteriormente, una gran cantidad de fangos que no pueden repercutirse en el producto final aplicado.
¿Las empresas del sector son eficientes en cuanto a su gestión medioambiental? ¿Cuáles son sus principales recomendaciones para una mejor gestión de sus residuos?
Estamos hablando de un sector que no ha sido valorado técnicamente. Por ejemplo, en el cincado, se están siguiendo los mismos procesos que hace 20 años. Las bases de funcionamiento han cambiado poco o no han cambiado. Además, es un sector muy disgregado.
Desde mi experiencia, adolezco la falta de unión del sector para hacer frente a los retos que se le plantean en cuestiones medioambientales. Hay muchas compañías que se sienten más cerca del sector de la automoción o de la construcción que del que les corresponde. Adolezco la falta de unión en el sector del tratamiento de superficies.
Para intentar lograr este objetivo, hemos abierto el campo de las temáticas a tratar y de las empresas participantes para que los asistentes puedan comprobar cómo sus experiencias son extrapolables.
En un momento como este, en el que la gestión de los recursos hídricos es tan importante, ¿creen que las empresas del sector hacen suficientes esfuerzos en este ámbito de actuación?
Otro de los grandes problemas del sector es que no hay un know how de investigación. No hemos basado en el proveedor que, hasta hace unos años, era el tótem. Las multinacionales nos asesoraban a todos los niveles y ya estaba bien. Las nuevas leyes medioambientales han cambiado este escenario, ya que su cumplimiento es obligatorio para todas las empresas sean de 3 o de 500 trabajadores.
En cuanto a los recursos hídricos, tengo que decir que parece que la sociedad no es consciente de la realidad. La gente gasta agua porque la pagamos barata. El agua que se paga en España es la más barata de Europa. Y eso no es así. Entre todos, Administraciones, industrias y consumidores hemos de lograr ahorrar y gestionar mejor este recurso imprescindible.
Las jornadas prestan especial atención a la problemática de los suelos contaminantes, ¿es posible la descontaminación total de un terreno en el que se ha llevado a cabo una intensa actividad industrial?
Claro que es posible. Pero en esta cuestión, depende de la extensión del terreno, ya que cuanto más grande es, más costosa es su descontaminación y más difícil su tratamiento. De hecho, el Real Decreto de suelos contaminados establece, desde hace tres años, que el banco que concede la hipoteca para comprar una nave o un terreno industrial exija un estudio de catas de subsuelo. Y es algo que casi nadie sabe. Sin embargo, en este ámbito, volvemos a la picaresca mutua, pese a caer en el delito ecológico. La obligación de cada uno es limpiar.
Estamos viviendo una etapa en la que están creciendo nuevas formas de energía, ¿cuál puede ser el papel de los residuos en la generación de energías alternativas?
No hay mejor energía ni más limpia que la energía nuclear. Los accidentes de Chernobil y de Fukushima han sido eso accidentes. Las otras energías como la térmica o la biomasa son más contaminantes. En este último caso, se trata de una energía subvencionada por la Administración y que no tiene suficiente masa crítica. En este sentido, cuando se da un residuo, hay que valorar qué potencial, rendimiento y energía genera.
¿Qué valoración hacen del actual marco legislativo? ¿Es compatible con el desarrollo económico de las empresas del sector?
La actual normativa que nos obliga a tanto causa tanto miedo en el sector porque no se ha hecho nada antes. Si hubiésemos atacado el problema hace 30 años, ahora no estaríamos así. Hemos pasado de verter directamente o de dar un precio ‘a ojímetro’, por ejemplo, ... a una normativa europea que, sinceramente, no es muy estricta sino que es de sentido común, ya que trata de controlar las emisiones contaminantes, llevar unos registros, controlar las aguas, etc. Se trata de algo necesario y que el sector aún parece no entender.
La normativa es una realidad que va cerrando el círculo y que no permite trampas. Creo que los industriales tenían que haberse sentado hace unos años como han hecho todas las empresas importantes para tomar conciencia de la importancia de esta cuestión.
Pienso que no se ha sabido transmitir la trascendencia del cumplimiento del marco normativo. Por ejemplo, las empresas, los directivos, no se implican lo que deberían y cuando han de hacer frente a este tema se ponen en manos de una ingeniería de un amigo o de un conocido. Y ya se desentienden del tema. Jornadas como las que organizamos en Eurosurfas sirven para que todo el mundo conozca cómo funciona el sistema. Porque si no se hacen las cosas bien y se cae en la picaresca y en el engaño, luego vienen las multas, las sanciones y los cierres. Creo que hay que hablar claro.
Por último, ¿qué esperan del desarrollo de estas jornadas?
Espero que el sector pueda entender que el respeto al medio ambiente es fundamental y que llegue a todos los actores. Si hay un contaminante, se ha de eliminar y punto. Hay soluciones para todos y es imprescindible tener toda la información existente. En este sentido, la Administración ha de jugar un papel muy importante en la divulgación de todo este entramado normativo. Porque será en beneficio de todos.