Entrevista a Marc Fuster, administrador de Cervera, Sistemas de Pinturas
6 de junio de 2011
¿Por qué el sector ha llegado a esta situación?
Hay tantos factores —políticos, sociales y financieros— que se nos escapa. Evidentemente, la crisis financiera mundial ha sido uno de ellos.
¿Pero no el único?
No. Ha habido una falsa percepción de lo que valían las cosas. Hemos estado valorando el sector inmobiliario de una forma absolutamente desorbitada. El hecho de que los bancos y las entidades financieras hayan prestado dinero a bajos intereses, sin reparar en el riesgo que ello implicaba, ha agravado la situación. La crisis se está llevando por delante a empresas con menor músculo financiero que no han podido aguantar el bajón en su facturación.
¿Y qué ocurrirá con el resto?
Bueno, yo creo que la crisis actuará como criba, como control de calidad del sector para poner en evidencia la capacidad de adaptación de las empresas. Las que no superen el filtro, cerrarán. Creo que la propia crisis conlleva parte de la solución porque actúa como la poda en un árbol enfermo, y está obligando a las empresas supervivientes a replantear el negocio y optimizar los procesos.
Llegados a este punto, además de ser competitivo, ¿qué soluciones propone?
Una legislación adecuada. Es importante que se mantengan las ayudas fiscales a la rehabilitación. Todas estas leyes que ayudan al mantenimiento de edificios favorecen a este subsector, el único dentro de la construcción que crece en la actualidad.
¿Y están nuestras empresas preparadas para ello? ¿Cuentan nuestras compañías con la tecnología y los conocimientos necesarios?
Es un subsector que exige mucha dedicación y profesionalidad, y nuestro país cuenta con compañías de larga tradición altamente especializadas. El problema es que en estos momentos hay mucho intrusismo.
¿Por parte de quién?
De empresas que antes se dedicaban a nueva construcción y que ahora ven en la rehabilitación su camino de salvación.
Una edición de oportunidades
Pese a reconocer la gran diferencia respecto a la edición de 2009 en cuanto a dimensiones, número de expositores y superficie expositiva, Fuster afirma no apreciar tantas diferencias en cuanto a contenidos. “Ya entonces se vislumbraba la importancia de la construcción sostenible en aspectos como el ahorro energético, el aislamiento térmico y el aprovechamiento de energías renovables. En este Construmat se ha confirmado que es un argumento de venta para un gran número de productos y servicios”.
El administrador de Cervera, Sistemas de Pinturas destaca también la implantación de sistemas y procedimientos técnicos cada vez más avanzados, lo que, a su juicio, “permite reducir de forma importante la incidencia de la mano de obra intensiva, pero, por otro lado, exige una buena preparación y formación del personal que instala estos productos y sistemas, así como una mayor especialización”. Esta situación trae consigo sus propias consecuencias: “Se acaba la mano de obra poco especializada que sirve para todo”.
Fuster también subraya la relevancia en esta edición de Construmat de la conjunción de conceptos como sostenibilidad, innovación y rehabilitación. “El sector de la construcción siempre ha sido bastante tradicional y a mi modo de ver la entrada en juego de estos conceptos representa una forma de avanzar y mejorar”, sostiene.
¿Qué más puede hacerse por reflotar el sector?
Es imprescindible que los líderes patronales y sindicales establezcan como objetivo común y básico el desarrollo empresarial. También le pediría a la administración que fomente más la formación teórica combinada con la práctica a todos los niveles.
Con ello lograríamos una mano de obra cualificada y especializada...
Sí, y mejorarían los parámetros de productividad y calidad del sector. Lo que ocurre es que estas políticas no dan ni frutos inmediatos ni réditos electorales, y tradicionalmente se han descuidado.
Desde esta edición de Construmat se propone la internacionalización como vía para sobrevivir.
Sí, sin duda es otra salida, pero para las pymes internacionalizar su actividad supone un esfuerzo financiero no siempre asumible. Creo que la administración debería promover la interacción y colaboración entre empresas de manera que las más ambiciosas puedan lograr sus objetivos de expansión.
¿Cómo?
Individualmente es difícil, pero con el asesoramiento y la ayuda oportunos muchas pequeñas y medianas empresas podrían crear clústeres para poder, de forma conjunta y aprovechando sinergias, salir al exterior.
¿Cree entonces que nuestras empresas pueden ser competitivas en el extranjero?
Que las grandes corporaciones españolas son competitivas no es ningún secreto. De hecho, desarrollan proyectos por todo el mundo, y no sólo en países en vías de desarrollo. Pero éstas no van a resolver el descomunal índice de paro que sufre el sector de la construcción en España. Las pymes, por su parte, quizá no lo tienen tan fácil, pero yo creo que el producto español a estos niveles es internacionalizable. Los mandos medios técnicos en nuestro país cuentan con una preparación estupenda.
25 años en el sector
Cervera, Sistemas de Pinturas, S.L. es una empresa ubicada en Rubí (Barcelona), con más de 25 años de experiencia en el ámbito de la construcción. Su actividad se centra en la aplicación de pinturas y recubrimientos técnicos formulados a partir de resinas sintéticas para la protección anticorrosiva de estructuras metálicas, la confección de pavimentos continuos, las impermeabilizaciones de cubiertas y un sinfín de aplicaciones específicas. Se considera pionera en la protección del galvanizado mediante sistemas basados en imprimaciones epoxy y acabados de poliuretano. Actualmente, mantiene su carácter innovador con la introducción de recubrimientos de altas prestaciones anticorrosivas basadas en formulaciones en base agua (eco-friendly).
Su actividad se amplió a partir de 2003 con la entrada en el mercado de la rehabilitación y la restauración. Desde entonces también aplica sistemas de aislamiento térmico y presta asesoramiento para optimizar el gasto energético de los inmuebles y hacerlos más sostenibles desde un punto de vista medioambiental.
Desde 2007 dispone de la clasificación (K-7 d) que le permite acometer obras de rehabilitación de edificios singulares y patrimonio histórico, manteniendo las técnicas constructivas tradicionales si procede.