La planta de recubrimientos en polvo de AkzoNobel apuesta por la transformación digital
A partir de ahora, los clientes de Taiwán de AkzoNobel tendrán a su disposición soluciones de recubrimientos en polvo más avanzadas gracias a la planta de última generación y sostenible que la compañía está construyendo en Chungli.
La planta, totalmente automatizada, representa una inversión de 20 millones de euros y tendrá una mayor capacidad de producción para satisfacer la creciente demanda de los mercados de arquitectura, accesorios para automóviles, telecomunicaciones, componentes electrónicos, muebles, electrodomésticos, equipos deportivos y máquinas herramientas.
Una vez en funcionamiento, la nueva planta acercará a la empresa a sus ambiciones de sostenibilidad energética e hídrica en general. Se espera que reduzca el consumo de energía en un 30%, que aumente la tasa de reutilización del agua hasta el 60% y que logre cero emisiones de COV, además de crear un entorno de trabajo más seguro y saludable.
“La pandemia de COVID-19 ha traído muchas incertidumbres a los mercados mundiales”, asegura Fred Moreux, director de Fabricación para Asia de AkzoNobel. “Invertir en una nueva planta en Taiwán en este momento crítico nos ayudará a racionalizar nuestra cadena de suministro y a establecer un nuevo punto de referencia en la industria local de pinturas y revestimientos”.
La planta multifuncional de AkzoNobel en Chungli cuenta ya con diversas áreas de fabricación de recubrimientos en polvo, pinturas decorativas, recubrimientos de embalaje y recubrimientos especiales.