Bruguer sugiere el blanco y el beige, combinados con colores suaves y elementos como plantas, madera natural o estampado
Bruguer presenta colores y estilos para combatir el calor veraniego
Redacción Interempresas14/06/2019
El verano está a la vuelta de la esquina. Ante la llegada de las altas temperaturas y los días de intensa luminosidad, el color cobra un papel protagonista como excelente herramienta para hacerles frente. Su capacidad para suavizar el entorno y generar ambientes agradables, combinada con el estilo adecuado, se convierte en el mejor antídoto para afrontar la temporada de calor.
Un año más, el blanco aparece como una de las mejores opciones para ser el protagonista del hogar. Sin embargo, en interiores, se huye del tradicional blanco puro o marfil, puesto que en contraste con la luz puede llegar a resultar molesto. A cambio, se busca un blanco más grisáceo o natural, sirviéndonos de colores como el negro o el marrón para oscurecerlo y obtener así un blanco ‘roto’, que además combina a la perfección con colores de mayor intensidad como el azul cielo, el amarillo o el naranja. No sucede igual en los exteriores, donde la intensidad del blanco puro aporta mucha frescura y viveza.
El blanco ‘roto’ combina con colores de mayor intensidad como el azul cielo, el amarillo o el naranja.
Tampoco pasa de moda el beige, otras de las principales tendencias de la temporada veraniega. Tanto éste como el blanco ‘roto’ son ideales a la hora de buscar combinaciones con plantas, madera natural o estampados geométricos y tropicales.
A partir de estas pequeñas recomendaciones, se pueden evocar varios espacios y ambientes. Aires diferentes para disfrutar del verano de la manera que más guste.
Aires nórdicos
Utilizando el protagonismo del blanco y el beige, se puede crear un apacible y relajado clima nórdico, siempre jugando con muebles de madera natural, así como el mimbre y el lino. Es una combinación que se adapta muy bien a cualquier espacio de la casa. Absorbe la luminosidad y la distribuye de manera uniforme.
Aires nórdicos con blanco y beige combinados con la madera natural.
Aires del mar
No podía faltar la presencia del verde que, a diferencia de otros veranos, acoge esta vez una dimensión algo más turquesa. Una manera genial para evocar el dinamismo y la frescura que nos ofrece el mar. Contrasta a la perfección con colores como el amarillo, así como con estampados, elementos multicolor y alguna que otra forma geométrica, siempre que no se abuse.
El verde combina con el amarillo, elementos multicolor y formas geométricas.
Aires tropicales
También están los rosados y amarillos, capaces de convivir entre sí para llenar las habitaciones de alegría y movimiento. Mantienen una excepcional relación con telas de motivos tropicales, plantas y cualquier otro elemento que sea capaz de trasladar a esta zona del planeta, como pueden ser los estampados o las formas geométricas curvas.
Los rosados y amarillos combinan con los motivos tropicales y los estampados.
Para poner en práctica estas tendencias, los usuarios pueden acudir a la gama Colores del Mundo, diseñada para inspirar y facilitar la elección del color; o también puede optar por Ultra Resist - Adiós a las manchas, que repele las manchas y consigue además un acabado mate perfecto.