El proyecto Innopaint concluye con unos resultados muy prometedores
Desarrollar recubrimientos anticorrosivos, inteligentes y multifuncionales basados en pintura era el principal objetivo perseguido por el consorcio encargado de ejecutar el proyecto Innopaint: una investigación cofinanciada por el programa Retos Colaboración 2016 del Ministerio de Economía y Competitividad, a través de los fondos Feder, en la que el Centro Tecnológico CTC ha aportado su experiencia y conocimiento en este ámbito. De hecho, el centro tecnológico ha liderado una de las tres líneas de investigación para diseñar y testear una nueva gama de recubrimientos anticorrosivos e inteligentes, con una alta resistencia a la exigencia de un medio hostil como es el ambiente marino. Además, CTC fue el promotor de esta iniciativa en la que llevó a cabo el trabajo de previo de identificar las necesidades de la industria y localizar a los posibles socios con capacidad para responder a sus demandas. Asimismo, se incentivó la adaptación de un modelo de trabajo colaborativo en red en el que la cartera de colaboradores de CTC resultó un valioso aliado.
El proyecto, coordinado por la empresa pinturas Hempel, especialista en pinturas y recubrimientos para los mercados industrial, naval, contenedores, náutico y decoración, ha contado con un presupuesto cercano al millón de euros. El Grupo Tolsa, el Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgicas (Cenim-CSIC) y el propio CTC completan el consorcio de esta iniciativa. El excelente ambiente de trabajo generado por todos los socios ha facilitado la posibilidad de que se exploren nuevas vías de colaboración en el futuro, así como la posibilidad de generar alguna patente a medio y largo plazo.
Desde hace cinco años, CTC identificó la corrosión marina como un campo de estudio estratégico. A partir de ese momento, el único centro tecnológico de la región ha ido evolucionando, tanto con la incorporación de equipamiento como con la contratación de personas con amplios conocimientos en este campo. Asimismo, una vez más, el uso del laboratorio marino MCTS El Bocal, instalación gestionada conjuntamente por el CTC y el Instituto Español de Oceanografía, ha posibilitado el ensayo en condiciones marinas reales de los desarrollos realizados en el proyecto y ha aportado un gran valor añadido a los resultados generados.
Actualmente, se están investigando nuevas soluciones con el objetivo de alargar la vida de las estructuras que están en el mar. Alcanzar esta meta establecería una manera sencilla de reducir el coste de la energía y habilitaría que entre más energía renovable marina en el pull energético actual.