¿Estamos realmente preparados para limpieza técnica en la industria de la automoción?
Cada vez son mayores los requerimientos de limpieza técnica demandadas en la industria, se trata de adecuarse 100% en toda la cadena del proceso. Esto nos lleva a plantear dónde ponemos el foco, qué implicaciones tiene dentro de todo el circuito de proceso del componente. Con estos altos requisitos, ¿la adecuación de la industria está a la altura? ¿Estamos preparados para afrontar esta nueva etapa y desafío, manteniendo los costes, la calidad y el posicionamiento a nivel internacional?
Tengamos claro que a parte de una instalación adecuada a las nuevas necesidades, los factores externos, el entorno de trabajo, la limpieza final en instalaciones adecuadas a los nuevos requerimientos, embalaje, manipulación y transporte, influyen en el coste, la calidad y producción de la pieza.
Sistema de limpieza de alta gama en base acuosa para piezas metálicas, de aplicación en sectores como la automoción, el eólico o el ferroviario.
La formación del personal profesional dentro de la planta es lo que nos hará llegar al objetivo final, la concienciación colectiva del concepto de limpieza de partículas.
Estamos hablando de contaminación que se analiza mediante gravimetría y granulometría (la partícula más larga en µm, o el número de partículas máximas permitidas). Datos evaluados mediante un laboratorio interno o externo, certificado para ensayos que analizan el grado de limpieza de componentes de automoción, que verifiquen el cumplimiento de los requisitos exigidos.
Aparte de soluciones innovadoras y de última generación para la limpieza de superficies, en su fase de pre-limpieza o limpieza final, es vital tener en cuenta toda la cadena del proceso, desde el diseño hasta el montaje final.
El material utilizado también influye, no existe un método de limpieza para todo tipo de materiales. En general siempre se recurre al ultrasonido, pero por ejemplo para materiales sinterizados es un error, o en el caso de materiales blandos, aluminio, etc. Queda un largo camino en el estudio del comportamiento de los materiales.
Un aspecto crucial es la cantidad de contaminación, cuanta menos contaminación aportemos a la pieza en todo su proceso, antes se obtendrán los altos requerimientos exigidos.
Reduciendo los costes, las reclamaciones y garantizando la calidad final
Es importante asegurar un entorno de trabajo adecuado a las nuevas necesidades, cuando hablamos de piezas con requerimientos de limpieza técnica. El método de trabajo en planta se tiene que adecuar a las nuevas exigencias, desde su inicio e implicar a todo el personal.
Otro aspecto a tener en cuenta es el equipamiento adecuado para el personal que manipula la pieza y no perder de vista la importancia de las condiciones de limpieza del entorno que se utilice durante todo su proceso. La suma de partículas, virutas o fibras encarecerá el producto y obstaculizará el objetivo final. Un box limpio evita que las piezas entren en contacto con partículas extra, que dificultarían los procesos de limpieza final.
Cuando llegamos al proceso de limpieza es habitual que muchas instalaciones que, en cuanto a exigencia cumplían los requerimientos exigidos anteriormente, hoy en día no los cumplan. Su capacidad de limpieza ha quedado por debajo de los requerimientos que se solicitan actualmente en la industria.
Es el momento de innovar y adecuarse internamente o buscar soluciones fuera. Empresas que ya se han preparado para este nuevo reto y están capacitadas para garantizar la calidad final exigida.
La mera instalación de una nueva planta no es garantía de calidad. Hay que tener en cuenta tanto la preparación del personal, como el conocimiento de los materiales y su comportamiento, la química, las cestas, etc...y los resultados de la limpieza no son los mismos si no se tienen en cuenta los distintos factores expuestos. No utilizar una cesta adecuada, por ejemplo, puede marcar la diferencia entre una limpieza óptima o no, y lo mismo se aplica también para el envasado, que se correlaciona con el grado de limpieza requerido. Hay que buscar la colaboración de empresas que ayuden a ser competitivos y no perder la posición con estas nuevas demandas. Baster Tratamentuak es una de las primeras en posicionarse en el mercado nacional en este sentido.
Las empresas de automoción también han de adecuarse a este nuevo nivel de exigencia. Implantando una metodología para evaluar no sólo el grado de limpieza de las piezas sino también el entorno de trabajo final, mediante medios de control que garanticen el cumplimiento del grado de limpieza de las piezas y el entorno, a la hora de recepcionar y manipular.
La demanda de los procesos de limpieza técnica cada vez será mayor. En nuestras manos está ser capaces de adaptarnos y educarnos.