Cepesca, decepcionado con ICCAT por no lograr un nuevo acuerdo sobre el atún patudo
La Confederación Española de Pesca (Cepesca) ha calificado de fracaso la incapacidad de las partes contratantes de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT), para alcanzar un acuerdo sobre un nuevo Programa Plurianual de Conservación y Ordenación para los túnidos tropicales y, en especial, para la especie patudo. Igualmente, la patronal valora el acuerdo para adoptar un plan de gestión del atún rojo, una vez certificada la recuperación de esta especie y muestra su decepción por el veto de los países asiáticos a la aprobación de un proyecto de recomendación sobre la conservación de tiburones capturados en asociación con pesquerías que son competencia de ICCAT.
Cepesca, que ha realizado estas valoraciones tras finalizar la 21ª Reunión Extraordinaria de ICCAT, celebrada este año en Dubrovnik (Croacia), lamenta, en referencia a los atunes tropicales y específicamente del patudo, las trabas puestas principalmente por las delegaciones asiáticas (China, Corea y Japón) a un acuerdo, básicamente para evitar la aplicación de cualquier tipo de medida de gestión a sus flotas de palangre.
Cepesca también destaca la oposición y la postura de Brasil que, tras superar ampliamente en 2017 el umbral fijado para los países sin cuota, “exigía que el resto de los países se hiciera cargo de la devolución de las mismas”, apunta Javier Garat, secretario general de Cepesca, que ha estado presente en la reunión, también en representación de Europêche, organismo del que es presidente. Según Garat, “estos países solo querían que se incrementasen las medidas para los cerqueros congeladores europeos”. En este punto, cabe recordar que los barcos cerqueros solo capturan el 33% del patudo del Atlántico, frente al 50% de los palangreros.
Ante estas realidades, y según Cepesca, los armadores europeos son conscientes de la sobreexplotación de atún patudo y las flotas comunitarias, incluida la española, están dispuestas a realizar sacrificios, pero siempre y cuando sean asumidos por todos los países y artes de pesca. Así, Europa asumiría disminuciones de TAC, reduciría progresivamente el número de los dispositivos agregadores de peces (FAD), aunque no exista base científica sobre el número adecuado a utilizar en esta pesquería y asumiría que el Comité Permanente de Investigación y Estadísticas de ICCAT (SCRS, por sus siglas en inglés) estudie el impacto de los buques auxiliares en la capacidad de pesca.
Con referencia a los palangreros asiáticos, que capturan el 50% del patudo del Atlántico, Europa apuesta por medidas de control y gestión, y en particular: prohibir los transbordos en alta mar; incrementar el número de observadores a bordo al menos en un 20% (ahora 5%) y prohibir los descartes de juveniles.
Por último, desde Cepesca se aboga por la asunción de medidas efectivas de limitación y gestión de capacidad para todas las artes y países y se hace un llamamiento a todas las partes contratantes para que sean responsables en la gestión de sus respectivas flotas en la pesca de patudo.
Respecto a las decisiones tomadas en ICCAT sobre la pesquería de atún rojo, Cepesca valora que se haya pasado de un plan de recuperación a un plan de gestión de esta especie en el Atlántico y Mediterráneo, ya que la población de atún rojo está completamente recuperada y en niveles de biomasa históricos. A este respecto, Cepesca confía en que las partes contratantes de ICCAT respeten las normas y apuesten por una gestión responsable y sostenible.
Cabe recordar que los TAC (Total de Capturas Admitidas) para esta especie quedaron establecidos ya el pasado año para los tres años sucesivos. En 2019 el TAC será de 32.240 toneladas, de las cuales, 17.623 corresponderán a la UE y a España alrededor de 5.700. En 2020, el TAC será de 36.000 toneladas, de las cuales 19.460 corresponderán a Europa y unas 6.380 a España.
Por último, Cepesca valora que se haya decidido que para los países miembros de ICCAT que tienen barcos costeros de pequeña escala autorizados a pescar atún rojo, se asignen cuotas sectoriales específicas y se indiquen en sus planes de pesca e inspección qué medidas adicionales se establecerán para supervisar estrechamente el consumo de cuota de este segmento de la flota, tal y como ya prevé la legislación española.
Por último, Cepesca también ha mostrado su decepción por el veto, una vez más, de los países asiáticos, a la aprobación de un proyecto de recomendación para la conservación de tiburones capturados en asociación con las pesquerías que son competencia de ICCAT. Este proyecto pretendía mejorar la recopilación de datos científicos y la aplicación de obligación de desembarcar los tiburones con la aleta naturalmente adherida, total o parcialmente, al cuerpo de los peces, práctica realizada por la flota europea desde 2013.
Además de Javier Garat, por parte de Cepesca han participado en ICCAT representantes de FAAPE, Opagac, Anabac, OP Lugo, Anapa, Arpoan, Carbopesca, Asociación de Pesca, Comercio y Consumo Pesponsable del Atún Rojo (APCCR) y la Asociación de Armadores de Pesca de Atún con Artes de Cerco.