Cameron James Wilson, Creador de Shudu, la Supermodelo Digital
¿Por qué creaste Shudu, una modelo virtual?
Realmente no tenía intención de crear una “modelo virtual”, solo pretendía hacer un retrato bonito. Aprendí a usar los programas 3D y como me interesaba la moda creé algo inspirado en las supermodelos. Sin embargo, tras hacerse viral la imagen de Shudu, me di cuenta que tenía un potencial impresionante e incluso ha sido etiquetada como la primera Supermodelo Digital.
¿Qué tecnologías has usado?
Principalmente he usado el Daz3D, un programa 3D que facilita extraordinariamente el diseño de los personajes. Ahora bien, cuando entras en los detalles es bastante complejo.
¿Cuándo te decides por estas tecnologías?
Tiempo atrás empecé a estudiar 3D, pero pensé que era demasiado complejo y lo dejé. Hace dos años decidí probar de nuevo el diseño 3D. Utilicé tutoriales de Youtube y aprendí solo en casa. En 3 meses creé a Shudu.
¿Qué te hace más feliz la fotografía o el 3D?
Durante 10 años fui fotógrafo de moda, pero nunca acabé de sentirme a gusto. Definitivamente ahora he encontrado mi vocación. Soy mucho más feliz, siento que estoy creando algo único.
En alguna entrevista has dicho que “no hay diferencia entre un 3D artístico y una foto”, cuando a las personas reales se les aplica filtros y photoshop.
Al haber trabajado en moda vi que no existe la realidad. Con el 3D eres más honesto ya que todo se hace digitalmente. En fotografía se puede decir que no se ha retocado, pero si tienes artistas del cabello y del maquillaje, una gran iluminación y un fotógrafo profesional…. Eso es un fotograma, la percepción que tiene alguien, no la realidad.
¿Crees que la gente entiende tus creaciones o simplemente las encuentran sorprendentes?
Algunas personas en el sector lo entienden, pero la mayor parte de la gente intenta comprender cómo es posible. Procuro explicar lo mejor que sé mis procesos creativos en los stories del Instagram.
¿Esperabas esta reacción de la gente?
¡¡Jamás!! ¡¡Me quedé en estado de shock!! Realmente no estaba preparado para esto.
¿Cómo puede impactar estos modelos virtuales en los diferentes sectores?
Creo que los modelos virtuales fuera del circuito comercial son una oportunidad para participar en redes sociales de una manera más orgánica. También tienen un impacto muy alto en los procesos de trabajo y en las fases de planificación y diseño de los productos. Habrá más aplicaciones que ya se verán con el tiempo.
En tu opinión, ¿estos modelos virtuales pueden ser importantes en la moda?
Sí. Podría tener el mismo impacto que el 3D en el cine. El CGI está ahora en casi cada película, por lo que podría usarse en moda y en otros sectores.
Así pues, ¿hay posibilidades de tener a esos modelos virtuales en la peluquería y en maquillaje?
El cabello virtual aún debe ser creado, y ya hay especialistas trabajando en ello en exclusiva. Las modelos digitales pueden mostrar diferentes maquillajes y usarse para planificar looks en las sesiones fotográficas o emplearse en publicidad.
¿Tienes alguna experiencia?
Sí, he intentado crear algunos peinados y es complicado. Pienso que se necesitaría gente con conocimientos de peluquería involucrada en el diseño 3D. Por fortuna, sé algo de maquillaje, para mí esa parte fue relativamente fácil y agradable.
¿Qué aplicaciones podría tener esas modelos virtuales en el mundo de la belleza?
En mi opinión, las mismas que algunas modelos reales. Podrían usarse para los tutoriales, para mostrar nuevos looks... Seguro que hay un gran número de aplicaciones que todavía ni hemos pensado...
¿Te sientes como un pionero con estas modelos virtuales?
Sí. Tengo la responsabilidad de representar bien este nuevo sector e inspirar a la gente a usar éticamente estas herramientas.
¿Quiénes son tus clientes?
Tenemos un portfolio muy diverso: editoriales y marcas comerciales. ¡¡Nos encanta!!
¿Nos puedes adelantar tus nuevos proyectos?
Estamos trabajando con nuevos modelos, uno de ellos con los inputs de Shudu. Me gusta retarme a mí mismo y siempre estoy pensando qué será lo siguiente. Ahora estoy viajando mucho participando en charlas y debates.
Por Maite Aldazabal López, Directora Editorial C&C Magazine