Genesal Energy ofrece las claves para poner fin a la pobreza energética
Uno de los principales problemas a nivel mundial es la pobreza energética y la creciente necesidad de completar la transición hacia energías más limpias y sostenibles aportando soluciones contra el cambio climático y la degradación ambiental.
Es por este motivo, que desde Genesal Energy se está investigando y trabajando para contribuir en este cambio del sector energético promoviendo el equilibrio entre la seguridad del suministro, el acceso a los servicios de forma equitativa y, por supuesto, la sostenibilidad ambiental.
El compromiso de Genesal Energy con su entorno, con las personas y la sostenibilidad ha impulsado diferentes proyectos durante los últimos años con el objetivo de contribuir a mejorar el sector y toda la sociedad, poniendo en marcha diferentes políticas energéticas.
De este modo, la compañía ha ido potenciando la transición del diésel hacia el gas y combustibles sostenibles, se ha mejorado la eficiencia energética de las instalaciones y productos, y se ha impulsado la hibridación con energías renovables y almacenamiento energético como la fachada fotovoltaica de la sede central.
“Apostamos por la innovación y la digitalización de la energía por eso no dejamos de crear y mejorar los procesos de diseño, fabricación y puesta en punto de los grupos electrógenos” explican desde Genesal Energy ya que las consecuencias de la pobreza energética pueden afectar el bienestar de las personas, su salud y su participación efectiva en la sociedad.
Claves para una energía más justa
1. El acceso universal a la energía, garantizando que todas las personas tengan acceso a fuentes de energía asequibles y sostenibles. Actualmente, más de 700 millones de personas viven sin acceso a energía eléctrica, lo que limita su capacidad de alcanzar un nivel de vida digno. El proceso de la transición energética debe ir más allá de la simple sustitución de fósiles por energías renovables; el cambio debe realizarse abordando las desigualdades estructurales que perpetúan la falta de acceso a la energía.
2. Eliminación de barreras económicas, para que todas las personas puedan asumir los costes energéticos. Es crucial desarrollar mecanismos de financiación y programas de incentivos innovadores para hacer que las energías relacionadas con la transición sean más accesibles para todos.
3. Medidas de reconversión laboral en ciertos sectores que pueden verse comprometidos en los próximos años como puede ser el del carbón y potenciando los empleos emergentes en las energías limpias. Apostar por la reestructuración económica de cara a las con el fin de disminuir la dependencia de los combustibles fósiles.
4. Dar voz a las comunidades afectadas por la pobreza energética y los impactos negativos de los sistemas energéticos convencionales. De este modo, crear espacios de diálogo entre diferentes actores como miembros de comunicades afectadas, sociedad civil, expertos, políticos o empresarios puedan tomar decisiones y encontrar soluciones conjuntas.