Con motivo del ‘Día Mundial de la Carretera’
La AEC advierte sobre la necesidad de adaptar las carreteras al cambio climático
Estos episodios de calor extremo, a los que acompañan sequía e incendios, influyen en buena medida en las consecuencias de los eventos de grandes precipitaciones, aumentando su impacto. Así se ha puesto de manifiesto en las recientes lluvias torrenciales registradas este mes de septiembre en la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha, las inundaciones en Aragón en julio o sucesos similares en Baleares, Andalucía, Cantabria y otras regiones, los cuales, según los expertos, lejos de ser excepcionales, tenderán a repetirse cada vez con mayor frecuencia.
Diez puntos para el compromiso
En el Día Mundial de la Carretera, que se conmemora el 11 de octubre, la Asociación Española de la Carretera (AEC) ha querido llamar la atención sobre la urgencia de tomar conciencia del creciente impacto de estos sucesos meteorológicos sobre las infraestructuras, especialmente las de transporte, y plantear medidas para su adaptación al impacto del cambio climático, según apuntaron fuentes de la entidad sin ánimo de lucro en una nota de prensa.
Desde la AEC señalaron que “estamos ante un fenómeno global de graves consecuencias, que exige de un compromiso político y sectorial que no puede seguir eludiéndose. Consideramos prioritario tener en cuenta una decena de aspectos ante la situación descrita”:
- Realizar una valoración de la vulnerabilidad de toda la red de carreteras (del Estado, autonómica, local y municipal).
- Cuantificar la amenaza real, teniendo en cuenta proyecciones climáticas actualizadas.
- Llevar a cabo una valoración del riesgo ante el que se encuentran las carreteras, considerando vulnerabilidad y amenazas.
- Incorporar el concepto de redundancia en la red viaria, entendida como la disponibilidad de alternativas de emergencias en el caso de que un itinerario clave se vea afectado.
- Desarrollar un plan de adaptación de las carreteras al cambio climático, identificando prioridades de actuación e inversiones necesarias.
- Considerar la adaptación al cambio climático en la planificación de carreteras, tanto de nuevos itinerarios como en los procesos de adecuación de los existentes.
- Adaptar las normativas de diseño a las nuevas amenazas que puedan identificarse (taludes, estructuras, drenaje, pavimentos…).
- Fomentar la investigación en materia de resiliencia.
- Aprovechar las oportunidades de la digitalización para mejorar la resiliencia de las redes viarias (datos del vehículo conectado, imágenes por satélite, optimización de las operaciones de vigilancia y control…).
- Asegurar la colaboración entre todos los implicados (administraciones de carreteras, servicios de emergencia, comunidad científica, empresas, asociaciones…).
Recientes estudios realizados por el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) han concluido que es preciso actuar de forma prioritaria en materia de adaptación al cambio climático sobre 800 kilómetros de carreteras de la Red del Estado, en su mayor parte autovías y autopistas, dado que presentan una situación de especial vulnerabilidad.
Congreso Nacional de Medio Ambiente y Carreteras
Los próximos 28 al 30 de noviembre la ciudad de Gijón acogerá la cuarta edición del Congreso Nacional de Medio Ambiente y Carreteras, organizado por la Asociación Española de la Carretera con el apoyo de la Dirección General de Infraestructuras Viarias y Portuarias del Principado.
“Esta cita, que reunirá a técnicos y profesionales expertos en ingeniería viaria, ingeniería ambiental y climatología —entre otros ámbitos—, se presenta como una ocasión de oro para abordar las claves de la adaptación de las infraestructuras a la variabilidad climática y al proceso de cambio climático, sin dejar de lado los asuntos relacionados con la descarbonización de la movilidad”.
Se han identificado 800 kilómetros de la Red del Estado especialmente vulnerables, en su mayoría autovías y autopistas