Kleemann: conceptos de accionamiento sostenibles para cada requisito
Kleemann se basa en tres conceptos de accionamiento diferentes, que ofrecen la mejor solución posible en función de la tarea que se realice. Mientras que los accionamientos eléctricos ofrecen buenos resultados en cuanto al balance de CO2, en algunas situaciones, una transmisión directa de bajo consumo es la mejor opción. E-Drive, D-Drive y H-Drive están disponibles para las variantes diésel-eléctrico, diésel-directo y diésel-hidráulico.
E-Drive: sin emisiones gracias al accionamiento eléctrico
El concepto de accionamiento E-Drive ofrece dos opciones: combustible diésel o totalmente eléctrico. El funcionamiento totalmente eléctrico es respetuoso con el medioambiente, ya que no hay emisiones de CO2 in situ. El requisito previo para ello es una buena infraestructura eléctrica, como suele ocurrir en las canteras o en las grandes plantas de reciclaje. Si no se dispone de alimentación de tensión o es insuficiente, existe la opción de trabajar con el sistema diésel-eléctrico, por ejemplo, si toda la instalación debe desplazarse a lo largo de la pared en la cantera. Esto se debe a que la alimentación de tensión a través de largos cables con frecuencia es demasiado cara o ya no es posible. En ese caso, entra en juego la potencia del motor diésel de bajo consumo. La trituradora y todas las cintas transportadoras siguen accionándose eléctricamente mediante un generador. De esta forma, según la situación in situ, el accionamiento E-DRIVE garantiza una gran flexibilidad.
D-Drive: la solución directa y potente
El accionamiento diésel-directo D-Drive suministra fuerza desde el motor directamente a la trituradora. El consumo se ha optimizado en los últimos años, por ejemplo mediante el accionamiento del ventilador en función de la carga de la nueva generación EVO2. En términos de eficiencia y eficacia, el accionamiento diésel directo presenta una ventaja energética, con un consumo de combustible significativamente menor. Gracias a su tamaño compacto y a sus estudiadas opciones de transporte, las máquinas pueden colocarse en cualquier lugar de la obra. Si no existe la posibilidad permanente de utilizar el accionamiento totalmente eléctrico, D-Drive es la opción mejor y la más sostenible, siempre que se requiera flexibilidad. Este es el caso de los trabajos de demolición y procesamiento en el interior de los núcleos urbanos, pero también en la construcción de carreteras, cuando las máquinas se mueven con el avance de la obra.
H-Drive: para instalaciones de cribado móviles
Accionamiento ecológico: una cuestión de concepto global
En el ámbito de la sostenibilidad entran en juego muchos factores. La energía para la fabricación, el transporte, el almacenamiento, la venta y la eliminación también se incluyen en la huella ecológica de la producción. En términos de emisiones de CO2 durante el funcionamiento, una instalación totalmente eléctrica es sin duda la primera opción. En otros casos, tiene sentido sopesar si un suministro a través de una línea eléctrica externa y unos costes elevados de equipos y materiales sería más eficaz que una tecnología de bajo consumo. La ecología también puede significar optar por un menor uso de materiales y una larga durabilidad.