La excavadora de demolición E485B de New Holland ya está trabajando
Una nueva excavadora para demolición, la primera entregada en Italia, está demostrando en la obra sus mejores cualidades: estabilidad y consumo mínimo. Ha sido el bautismo de fuego para la nueva New Holland E485B, que nada más llegar a la empresa romana Trulli Demoliciones Especiales, se puso a prueba en una enorme obra de demolición por implosión. El escenario de la demolición fue la vía Selva Candida, un complejo situado al noroeste de Roma. El edificio, destinado inicialmente a convertirse en centro administrativo de la compañía aérea nacional italiana Alitalia, y cuya construcción costó varios miles de millones de liras hace cuarenta años, nunca se terminó y, por lo tanto, nunca llegó a ocuparse.
La demolición, en la que se emplearon potentes explosivos, tuvo lugar el 21 de junio de 2010; los residentes de la zona captaron el espectáculo, muchos de ellos con las cámaras de sus teléfonos móviles. Con 35 metros de altura, el edificio era el más elevado del complejo romano, y tenía un volumen total de 40.000 m3. En la demolición se utilizaron 800 cargas explosivas que proyectaron una nube de humo de más de 47 m de altura. Los demás edificios se derribarán por medios mecánicos, con excavadoras sobre cadenas equipadas con pinzas y cizallas. La operación se inició en junio de 2008, fecha en la que se derribaron más de 150.000 m3 de edificios, y se reanudó en junio de 2010.
Trulli Special Demolitions, especializada en demoliciones mecánicas, dispone de un parque de 13 excavadoras (con pesos en orden de trabajo comprendidos entre 0,2 y 90 toneladas), 3 camiones de servicio y una trituradora móvil de hormigón. La empresa Saig de Parma, que también desempeñó un importante papel en el proyecto Selva Candida Complex, es un asociado fundamental en demoliciones con explosivos. Trulli añadió recientemente a este nutrido parque una E485B Demolition New Holland que entró en servicio en la obra de Roma. Equipada con una pluma de 24 m y una pinza de 14 toneladas, ha ayudado a la empresa romana a retirar los 320.000 m3 de materiales de construcción, en su mayor parte hormigón armado.
Facilitó la elección de New Holland el concesionario Romana Diesel, que distribuye toda la gama de productos del grupo Fiat desde 2008. “Empezamos a trabajar con Romana Diesel hace ya muchos años, cuando mi padre Vincenzino creó su propia empresa y acudió a Mario Artusi, entonces jefe de Romana Diesel, para adquirir algunos de los primeros camiones. En 2008, Romana Diesel se convirtió en concesionario de New Holland por lo que, cuando hace poco necesitamos comprar una nueva excavadora de demolición, nos pusimos en contacto con ellos y nos recomendaron la E 485B Demolition. Debo decir que, una vez más, Romana Diesel ha respondido muy bien a la confianza que hemos depositado en ellos".
Trulli quedó impresionado por la calidad general de la excavadora, especialmente por su potencia, estabilidad y consumo extremadamente bajo. La E485B Demolition está equipada con un motor de Common Rail de bajo consumo que es a la vez potente y económico; con 6 cilindros y 10,5 litros, desarrolla 258 kW a 1.850 rpm. Tiene un peso en orden de trabajo de 50,3 toneladas y un sistema hidráulico avanzado con ciclos de muy alta velocidad, a la medida de una cuchara para trabajo pesado (de 1,66 a 2,60 m³) que facilita su altísima productividad a la vez que le permite vanagloriarse del menor consumo de combustible de su categoría.
En el caso de aplicaciones especialmente exigentes, el sistema Continuous Power Boost —una característica exclusiva de New Holland Construction— eleva la presión hidráulica hasta 34,3 MPa sin límite de tiempo. La cabina dispone de un asiento ergonómico y ajustable, y de unos mandos que garantizan un confort total para el operario quien, con la cabina abatible, disfruta de la máxima visibilidad durante el trabajo.
El motor es silencioso y los movimientos son rápidos, precisos y fluidos gracias a la presión del líquido hidráulico. El mantenimiento y el control de los niveles resultan sencillos con la ayuda del ordenador de a bordo.