Máxima versatilidad en la obra gracias al equipo móvil de demolición 825 E-Series de Sennebogen

Una cosa es segura: ahorrar costos operativos y actuar de manera flexible en las obras es uno de los mayores desafíos al que se enfrentan las empresas de demolición. En este sentido, Sennebogen, representada en España por Mycsa, ofrece en sus equipos de la Serie E las características de sus exitosos manipuladores combinadas con la capacidad de intercambiar un gran número de implementos fundamentales en las obras de demolición. Todo ello sumado a una gran movilidad de un punto a otro de la obra y la capacidad de trabajar en las áreas urbanas más congestionadas.

Las máquinas de demolición deben hacer su trabajo de manera fiable: derribar, aplastar, transportar y cargar. Los criterios importantes en la búsqueda de la máquina adecuada para el trabajo son si la máquina y el sistema hidráulico tienen la potencia necesaria para la operación, que el radio trasero sea lo más pequeño posible y la selección de los accesorios necesarios.

Estos últimos deben intercambiarse de la forma más flexible, ya que los intervalos entre las actividades de demolición y clasificación pueden variar de un momento a otro, dependiendo de la capacidad de almacenamiento en la obra de construcción.

Sennebogen 825 E-Series en trabajos de demolición.

Al mismo tiempo, debe crearse un entorno de trabajo cómodo y seguro para los operadores de las máquinas de demolición, en el que se sientan cómodos durante todo el día. La serie 825 Mobile E-Series de Sennebogen cumple con todos estos factores, pero puede hacer aún más: el manipulador de material móvil utilizado en proyectos de demolición con un potente y económico motor diésel Stage V de 129 kW se convierte en un todoterreno multifuncional en sitios de demolición y trabaja con precisión, especialmente en espacios estrechos.

Los días en que se podían ver muchas máquinas de construcción diferentes en los sitios de demolición ahora son cosa del pasado. De hecho, existe una clara tendencia hacia una planificación optimizada del parque de máquinas para minimizar los tiempos de inactividad, con el fin de hacer el mejor uso posible de la mano de obra de los operadores y así reducir los costos. Además, el espacio disponible en ciudades densamente pobladas generalmente no es suficiente para restringir aún más el área de trabajo con máquinas no utilizadas.

La cabina elevable permite tener una óptima visibilidad a la hora de cargar los residuos de la demolición en los camiones.

Al igual que una navaja suiza, las soluciones de demolición de Sennebogen en máquinas de tamaños 817 a 825 ofrecen una amplia gama de usos posibles: desde el desmantelamiento selectivo, es decir, la deconstrucción selectiva y la posterior clasificación de los componentes de la construcción, la trituración con pulverizadores de hormigón, la demolición con cizallas, la carga de residuos de demolición en camiones o contenedores de almacenamiento… En el caso de la Serie 825 E, esto es particularmente fácil de lograr en la práctica gracias al cambio rápido de implementos hidráulicos en el extremo del brazo, lo que permite al operador pasar de la cuchara o la cizalla al uso del pulpo de clasificación en solo unos minutos. Además, el potente circuito hidráulico garantiza un funcionamiento fiable y preciso, incluidas las aplicaciones de corte hasta 2.5 t a una altura de hasta 14 m.

Dos factores determinan el éxito de las obras: si el tiempo planificado con anticipación fue suficiente y si los recursos disponibles se utilizaron de manera eficiente. Aquí también las soluciones de demolición móviles ofrecen una ventaja competitiva decisiva: no importa dónde exista demanda en la obra, estas máquinas pueden cambiar de lugar sin complicaciones y proceder inmediatamente con la siguiente tarea.

Cuando se utilizan para trabajos de demolición en altura, las máquinas también destacan por su cabina inclinable opcional de 30°, que ofrece al operador una mejor vista sobre su área de trabajo. Lo mismo se aplica a la carga de camiones, ya que la cabina del operador basculante también se puede elevar suavemente. A una altura de visualización de 5,7 m, los operadores pueden mirar el interior de un camión con mayor facilidad y así distribuir la carga de manera más segura.

Al comprar equipos de demolición, además de la versatilidad en el sitio de construcción, se debe prestar atención a cómo se pueden manejar en el uso diario. Los transportes pesados ​​especialmente costosos pueden tener un fuerte impacto a largo plazo: una cifra que debe mantenerse lo más baja posible. Por lo tanto, Sennebogen ha desarrollado una cinemática de transporte especial para la Serie 825 E, mediante la cual la máquina se transporta en su totalidad sin quitar el contrapeso. Gracias a que se trata de una versión móvil, la máquina está lista para arrancar en solo un par de minutos tan pronto como se haya retirado de la plataforma.

Para proteger tanto al operador como a la máquina, existen numerosas características adicionales que resultan útiles en la obra. La Maxcab, por ejemplo, puede equiparse con un paquete de seguridad bajo pedido. Esto incluye rejillas protectoras en el techo y el parabrisas delantero, así como acristalamiento a prueba de impactos en todas las ventanas para mantener los peligros potenciales lejos del conductor y la máquina. Las placas protectoras opcionales para los cilindros aseguran que el vástago del pistón permanezca intacto.

La posibilidad de intercambiar numerosos implementos dota a la Sennebogen de una gran versatilidad en obra.

La inclinación de 30° de la cabina no solo contribuye a una buena visión general por parte del conductor de toda su área de trabajo, sino que también las dos cámaras de seguridad a la derecha y en la parte trasera brindan ayuda adicional. Transmiten su señal a una pantalla en la cabina, lo cual es particularmente importante cuando se realizan maniobras de giro en sitios de demolición estrechos para garantizar un monitoreo óptimo del área trasera de la máquina de 2,8 m. Se pueden instalar cámaras adicionales en la máquina en cualquier momento si se desea.

Gracias a una amplia gama de tecnologías, todas representadas por el término 'eficiencia ecológica', las máquinas Sennebogen con motor diesel funcionan con emisiones particularmente bajas, bajo desgaste y ahorran energía.

La bomba hidráulica usa el aceite necesario de acuerdo con la tarea de elevación o demolición que se llevará a cabo. Todo el circuito hidráulico se alivia por medio de una presión más baja del sistema, lo que resulta en una reducción comprobada del desgaste de los componentes sensibles a la presión. Los elementos auxiliares que absorben mucha energía, como el ventilador, también se controlan termostáticamente en las máquinas diesel Sennebogen y, por lo tanto, solo se activan cuando es necesario.

EcoMode, el ralentí automático y la parada automática reducen el consumo de diésel al mínimo, cuando se manejan de manera óptima hasta en un 25%: estos sistemas inteligentes de control de velocidad del motor instalados de fábrica ayudan a los profesionales de la demolición a reducir los costos operativos de manera sostenible, sin la necesidad de formación adicional del operador.