Entrevista a Luis Emilio Fernández, director comercial de Paredes Seguridad
Fundada en 1954, Calzados Paredes es uno de los grandes fabricantes españoles del calzado deportivo y de tiempo libre, que cuenta con cuatro grandes líneas de negocio: deportivos y casual, caza, montaña y laboral, y aborda actualmente un plan de expansión internacional. La línea de Seguridad de Paredes completa la oferta de la compañía en materia de seguridad laboral y equipamiento individual en el trabajo. Con unas importantes inversiones en I+D+i y en nuevos equipamientos, los productos fabricados por Calzados Paredes destacan por su calidad, diseño avanzado, ergonomía y comodidad. Luis Emilio Fernández, director comercial de Paredes Seguridad, opina sobre el sector para nuestro especial número 100.
Según su experiencia, cómo gestionan actualmente sus clientes la protección laboral de sus trabajadores
Lo primero hay que tener en cuenta que Paredes vende al distribuidor, sea en el Canal especialista o el del suministro y ferretería. En realidad, son ellos los que tienen acceso al cliente final y pueden percibir esta gestión. No obstante, por nuestra experiencia, sí vemos que queda mucho camino por recorrer. Si bien hay un conocimiento ya claro de la obligatoriedad, se sigue contemplando como un gasto en lugar de como una inversión. El calzado, eso sí, está en lo más alto de la pirámide, es el EPI que posiblemente más se consuma.
¿Cómo ha evolucionado esta gestión en los últimos años?
El cambio de mentalidad reparadora a preventiva es lento y estamos a mucha distancia de otros países europeos. La prueba de fuego está al echar la mirada al suelo. En un polígono industrial es muy raro ver a un empleado de una fábrica sin calzado de seguridad. Otra cosa es el estado de ese calzado. Un zapato o bota de seguridad es una herramienta de trabajo y como cualquier otra, se rompe y hay que reponerla. Llevar el mismo calzado 2 años, con roturas por todos lados, no es estar protegido. El trabajador debe de exigir estar debidamente protegido en todo momento. Vamos dando pasos firmes, pero queda camino, mucho camino.
¿Qué hace falta para mejorar la gestión de los riesgos laborales?
La legislación es clara. Concienciación. Como todo en la vida es cuestión de educación. Es un tema tan importante que debería de tratarse con más profundidad ya desde el colegio. No sólo el empresario debe de conocer sus obligaciones. El trabajador debe de conocer sus obligaciones y los riesgos a los que se enfrenta permanentemente. La formación continua es clave.
En su opinión ¿cómo evolucionará el sector?
El sector evoluciona en cuanto a ‘prestaciones’ y ‘tecnología’ pero no al ritmo de la concienciación. Dese usted una vuelta por las cocinas de los hoteles y mire a los pies. ¡Queda mucho trabajo!
Fabricar calzado atractivo, con diseño, acerca su uso al trabajador. Hoy día hay tantos tipos de calzados de seguridad como tipos de trabajo. ¡Ojo! No todos valen para todos. Este es un gran error que observamos cada día.
El futuro debería de trabajarse en la prescripción adecuada por parte del distribuidor al cliente final. Explicarle qué necesita en cada momento.