Lorenzo Vidal de la Peña, nuevo presidente de Ganvam
La Junta Directiva electa de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam) eligió por unanimidad en su primera reunión al máximo dirigente del Grupo Vidal de la Peña Automóviles Lorenzo Vidal de la Peña como presidente de la patronal para los próximos cuatro años.
En las elecciones a la Junta Directiva de Ganvam celebradas el martes en la sede de la organización, la candidatura encabezada por el empresario cántabro ha resultado ser la más secundada, imponiéndose a la del vallisoletano José San José. En concreto, Vidal de la Peña ha obtenido un total de 225 a favor y 158 en contra, lo que supone haber cosechado un 42,4% más de apoyos.
Con estos resultados, la candidatura de Lorenzo Vidal de la Peña, respaldada por una veintena de reconocidos empresarios y directivos del sector, ha quedado legitimada para elegir a uno de sus miembros como nuevo presidente de Ganvam; apoyo que ha obtenido el cántabro avalado por una experiencia de más de 30 años en el ámbito del asociacionismo empresarial y del sector automoción.
No en vano -además de presidente desde 2015 de CEOE-Cepyme Cantabria y de la Federación del Metal en la región- es miembro de la Junta Directiva de CEOE, CEPYME y Confemetel. También es miembro fundador y presidente de la Asociación Empresarial Cántabra de Concesionarios de Vehículos (Asecove).
Con este nombramiento, Vidal de la Peña –que se convierte en el séptimo presidente de la historia de la patronal, sucediendo a quien fuera el máximo dirigente de Ganvam en los últimos 20 años, Juan Antonio Sánchez Torres- asume el cargo con el firme propósito de intensificar su papel de lobby para ganar todavía más peso como interlocutor válido frente a las Administraciones Públicas, máxime en un momento de nueva movilidad marcado por factores como el coche autónomo y la conectividad que exigen la adaptación del sector a un nuevo modelo de negocio.
Retos a la vista
El programa de este empresario de tercera generación pasa por llevar adelante una interlocución sólida y de confianza con los socios, promoviendo además las particularidades de los diferentes subsectores que integran la patronal decana del automóvil para definir entre todos la hoja de ruta.
Entre sus máximas, y dado que la Administración debe escuchar al sector antes de legislar, contempla poner en marcha una reforma laboral orientada a conseguir empresas más productivas, así como una activa y estrecha colaboración con las instituciones académicas para formar profesionales que realmente sepan adaptarse y responder a lo que el mercado está imponiendo.
Un modelo real de “economía colaborativa”
Además, en este momento de nueva movilidad, se anticipa a una cuestión que surgirá en el medio plazo: el acceso a los datos que genere un coche conectado. De ahí que aspire a conseguir un modelo real de “economía colaborativa” a través de marco regulatorio flexible y adecuado que garantice la libre circulación de los datos que generan este tipo de vehículos, con el fin de que talleres y concesionarios también puedan utilizarlos para tomar decisiones comerciales dando en la diana.
Su cuaderno de bitácora mira al futuro, pero no olvida asignaturas pendientes, por lo que también recoge medidas dirigidas a lograr demandas históricas como es el caso de una reforma fiscal que contribuya a corregir la desproporcionada presión impositiva que soportan las empresas del sector.
La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) es una organización sin ánimo de lucro e independiente políticamente fundada en 1957 que agrupa a más de 7.000 asociados entre concesionarios oficiales; compraventas independientes; servicios oficiales; agencias concertadas, y talleres independientes, entre otros sectores de la distribución: vehículos nuevos; usados; turismos; industriales; motocicletas y tractores agrícolas. En conjunto, estas empresas comercializan y dan servicio a más del 80% del parque nacional. El principal objetivo de Ganvam es representar los intereses de los distribuidores y reparadores ante el Gobierno, las distintas AA.PP. y la sociedad en general, potenciando el papel socioeconómico que desempeña su sector, con la creación de 250.000 empleos y una facturación de más 95.000 millones, un 9% del PIB.