Entrevista a Luis Noguera, presidente de la Coordinadora Española de Polígonos Empresariales
21 de marzo de 2012
Ante todo, aclárenos algo: polígonos, áreas industriales, parques empresariales… ¿estamos hablando de lo mismo?
No existen definiciones ‘normalizadas’, en diferentes trabajos realizados por CEPE hemos querido poner un poco de orden en esta terminología, pero personalmente creo que polígono y parque industrial es lo mismo.
La denominación ‘polígono’ para algunas personas puede tener un carácter peyorativo consecuencia de las deficiencias de muchos de ellos, por lo que, cuando se ha pretendido aportar un plus de calidad y marketing a los nuevos polígonos construidos, les han denominado ‘parques empresariales’. En realidad todos ellos son áreas industriales y me gusta llamarlas ‘polígonos’ y no huir de una realidad que debe ser mejorada. Si queremos medir su calidad debemos emplear métodos más objetivos y no quedarnos en una terminología bastante confusa.
Otra cuestión distinta son los parques científicos y tecnológicos, cuya denominación debería obedecer a su actividad mayoritariamente enfocada hacia el I+D+i. Pero éstos representan menos del 2% de los polígonos españoles.
Usted preside una asociación de asociaciones y federaciones. ¿Hasta qué punto es valioso el asociacionismo en el ámbito de las áreas industriales?
Nuestra sociedad necesita desarrollar su tejido asociativo, especialmente en el ámbito de las áreas industriales donde las carencias son muy importantes y la sensibilidad política y empresarial es muy escasa. Por ejemplo, en el borrador del ‘Programa Nacional de Reformas 2011 de España’ dirigido a la Comunidad Europea, en el que participó la CEOE no se hace ninguna referencia a los polígonos industriales.
Las empresas con domicilio social en polígonos representan el 52% de la facturación total de las empresas en España; a pesar de ello, no se están aportando soluciones a las carencias que estos espacios tienen y que lastran la competitividad de las empresas asentadas. El reto es establecer cauces de colaboración público-privada para mejorar el sistema de gestión de los polígonos y, paralelamente, regenerar los polígonos obsoletos; se hace imprescindible promover una ‘Ley para la mejora de la competitividad de las empresas en los polígonos’. En este proceso es en donde nuestra labor asociativa adquiere un valor fundamental.
¿Qué ventajas aporta CEPE a sus asociados?
Aportamos conocimiento, representatividad, un foro donde intercambiar experiencias, desarrollo de proyectos conjuntos y servicios especializados para los polígonos.
Grosso modo, ¿cuáles son los objetivos de su organización? Y ¿qué actividades realizan para llevarlos a cabo?
Nuestros objetivos, bien sea directamente o a través de las asociaciones a quienes representamos, van dirigidos a las empresas situadas en el ámbito de los polígonos.
Desde ese punto de vista, aportamos representatividad (ante las Administraciones públicas, Universidades, Organismos, Instituciones, medios de comunicación…), servicios (jurídico, organización y formación para la gestión de polígonos, calidad de polígonos, cooperación entre empresas, competitividad y consolidación de pymes, etc.) y comunicación (congresos, jornadas, publicaciones, web, etc.).
¿Qué carencias fundamentales se detectan actualmente en las áreas industriales?
Hay sólo un 5% de polígonos que tienen servicios de formación propios. Banda ancha únicamente la tiene un 30%. Por desgracia, hay carencias en infraestructuras y servicios básicos como por ejemplo: un 9% de polígonos que no tienen señalización vial, un 35% no tienen red contra incendios, un 66% no tienen transporte público etc.
Bajo mi punto de vista, la carencia fundamental es la falta de gestión de estas áreas ya que trae como consecuencia otras muchas carencias: el 81% de los polígonos en España no tiene ningún tipo de gestión.
El mercado inmobiliario terciario español está muy estancado. ¿Tienen en marcha alguna iniciativa para captar inversión extranjera?
La mejor visibilidad del suelo disponible y la puesta en marcha de mecanismos que faciliten la implantación de las empresas, tanto nuevas iniciativas como extranjeras, sin duda facilitará el desarrollo económico de España.
Nosotros estamos trabajando en un proyecto que llamamos CEPE-Si, con el objetivo de mejorar la visibilidad de los polígonos y del suelo y techo disponible. Estamos creando un Sistema de Información de las áreas empresariales donde consultar la información y ubicación de los polígonos y del suelo/techo industrial disponible a nivel nacional y georreferenciado. Un proyecto con el que queremos potenciar decisivamente la competitividad de nuestro suelo industrial a nivel nacional e internacional y la de las empresas implantadas en las áreas industriales españolas.
Este proyecto busca la puesta en valor de la Infraestructura Nacional de Datos Espaciales, haciendo uso de servicios geográficos estándar de las Administraciones Públicas.
¿Existen todavía muchos metros cuadrados de suelo industrial obsoleto en España?
No tenemos catalogados los metros cuadrados de suelo industrial obsoleto, pero el nivel de carencias en los polígonos que comentaba antes, da una idea de que ese deterioro es importante. Las causas pueden deberse en parte al incumplimiento de las obligaciones de mantenimiento del suelo público por parte del municipio y también por la falta de sensibilidad empresarial permitiendo que el entorno más cercano a su actividad esté degradado.
Debemos buscar una solución desde el punto de vista legislativo y económico, de forma urgente ya que la falta de mantenimiento de estas infraestructuras, con el paso del tiempo, incrementa de forma exponencial los costos de regeneración.
También es cierto que algunas Administraciones locales y autonómicas están llevando a cabo acciones de rehabilitación y acondicionamiento de los polígonos antiguos, pero todavía queda mucho trabajo por hacer.
Recientemente usted y la directora general de CEPE, Rosa María Martínez, presentaron ante Sepes una propuesta de creación de una misma marca de garantía y calidad. Cuéntenos un poco más sobre esta iniciativa.
CEPE, respaldada por su experiencia, está desarrollando una Marca que avale el nivel de calidad de los polígonos en cuanto a sus infraestructuras y servicios, de manera independiente, con el fin de promover la mejora de estos espacios.
En la reunión con la directora general de Sepes, Lucía Molares Pérez, le propusimos la participación de Sepes en esta iniciativa, ya que consideramos que deben estar las entidades más representativas a nivel nacional.
Vamos a constituir una Comité Técnico, cuya responsabilidad se centrarían en el desarrollo de la versión definitiva de la Marca, de forma que ésta se adapte a la realidad de las áreas industriales españolas. También sería responsable de la mejora continua de la Marca, velando por la adaptación de ésta a los objetivos de mejora continua de los polígonos.
Otro proyecto que expusieron a la responsable de Sepes Lucía Molares fue el del Techo Industrial Protegido. ¿De qué se trata?
Es un proyecto que promueve la puesta en el mercado de naves de entre 150-250 metros cuadrados para emprendedores, pymes y autónomos a precios inferiores a los de mercado y bajo diferentes fórmulas: alquiler, alquiler con opción de compra o venta.
Está basado en la existencia de demanda y en la colaboración publico privada. La parte privada aporta la inversión y la parte pública aporta reducciones de costos en el suelo e impuestos.
Para el Ayuntamiento supone la implantación de nuevas empresas sin tener que invertir; para el pequeño empresario supone la disponibilidad de naves adecuadas a sus necesidades y a costos reducidos; y para el promotor supone la apertura de una nueva alternativa de negocio.
Hemos desarrollado en colaboración con Sodebur, tres pilotos en Valle del Mena, Valle de Tobalina y Madrigal del Monte. También lo está desarrollando Asima en Palma de Mallorca para hacer un vivero para emprendedores.
¿Cómo acogió Sepes sus iniciativas?
Estamos muy satisfechos por el interés demostrado por la directora general y estamos convencidos de que pronto se traducirá en colaboraciones y proyectos comunes.
En general, ¿reciben el apoyo suficiente por parte de las Administraciones?
Mantenemos una relación de colaboración muy estrecha con varias Administraciones, pero desde el punto de vista económico, dependemos de nuestros asociados.
Hemos dado cabida dentro de nuestra asociación a las Entidades Colaboradoras, que estén interesadas en nuestras actividades. En estos momentos hay ocho entidades: Diputación de Barcelona, Diputación de Badajoz, Sodebur (Sociedad para el desarrollo de Burgos), Sican (Suelo industrial de Cantabria), Ader Infraestructuras industriales de la Rioja, el Ayuntamiento de Collado-Villalba, Expacio Mérida-Navalmoral y Sprilur (Sociedad para la promoción y gestión del suelo industrial del País Vasco).
¿Tienen algún proyecto más entre manos que nos pueda contar?
Durante tres años hemos desarrollado diferentes actuaciones en el marco del programa Copit, cuyo objetivo es la cooperación entre empresas de parques industriales y tecnológicos, y que cuenta con el apoyo del Ministerio de Industria y la colaboración de APTE, EOI y Enisa.
También estamos promoviendo una propuesta para la gestión de las áreas empresariales mediante colaboración público-privada y tomando como referencia el modelo anglosajón de los BID.
Recientemente nos hemos reunido con el director general de Industria y pyme, Manuel Valle Muñoz, para promover en el Ministerio de Industria un proyecto de Ley de Competitividad de las Áreas Empresariales. La idea es plasmar en el proyecto de Ley un conjunto de medidas que, a su vez, dé lugar a la formulación de un Plan Nacional de Competitividad de las Áreas Empresariales con la participación de las Comunidades Autónomas. Estamos satisfechos de la reunión ya que Manuel Valle Muñoz se comprometió a estudiar las propuestas de CEPE y a trabajar coordinadamente para adaptar las áreas industriales a las necesidades actuales.