Tecnología y sostenibilidad, motores del cambio en el sector náutico

La tecnología y la sostenibilidad “son los pilares que marcan el presente en la construcción de embarcaciones”, asegura Ione Astondoa, directora de operaciones de Astilleros Astondoa, al referirse al impacto de la tecnología y la sostenibilidad en el sector náutico. “En Astondoa tratamos de estar atentos a los procesos que aporten innovación tecnológica en nuestros barcos, nuestro departamento de ingeniería e I+D y nuestro equipo de diseño trabajan de la mano para encontrar el equilibrio entre tecnología, la selección e incorporación de materiales y componentes cada vez más sostenibles y el carácter artesanal que distingue a nuestra marca”, afirma. Asimismo, Carlos Mahillo, director de desarrollo de negocio de Garau Ingenieros, considera que “la innovación tecnológica y la sostenibilidad están desempeñando un papel central en el desarrollo de nuevos productos y servicios en el sector náutico, impulsadas tanto por la creciente demanda de los clientes como por la necesidad de cumplir con normativas ambientales más estrictas”. Aunque señala también que “sin embargo, innovar no deja de ser un gran desafío para muchas empresas del sector, que deben afrontar riesgos financieros significativos en un entorno económico donde las regulaciones y cargas administrativas tienden a aumentar. En este contexto, las ayudas y subvenciones públicas son fundamentales para apoyar a las empresas, permitiéndoles asumir estos riesgos con mayor confianza y fomentar el desarrollo de tecnologías innovadoras”.

INNOVACIÓN TECNOLÓGICA

“La innovación tecnológica avanza a una velocidad vertiginosa, especialmente para los más veteranos en la náutica. Es evidente que estamos en una nueva era”, destaca Pedro Egea, director técnico comercial de Catamaran Center. Aun así, recuerda que “es positivo avanzar en nuevas tecnologías, pero también es necesario que las marcas de motores y astilleros piensen en nuevas formaciones para sus redes de ventas y servicios. Un mecánico convencional no está preparado para estos cambios. Las formaciones de grados medios o superiores para jóvenes que se están formando en náutica también deben adaptarse a estas nuevas tendencias. Como se dice, no podemos perder el tren… o en este caso, el barco”. Sobre el impacto de la innovación tecnológica en los servicios y productos del sector náutico, Javier Rodrigo, director general de Catamarans Barcelona, asegura que “la industria está avanzando en sistemas de navegación inteligentes, automatización y conectividad a bordo. La digitalización y los servicios conectados son cada vez más relevantes para los propietarios”, y Oriol Mas, director de negocio de Motyvel Yachts, considera que “la innovación tecnológica es clave en todos los sectores, en la náutica cada vez existen más mecanismos y programas para facilitar el uso de las embarcaciones. Hay empresas especializadas que desarrollan softwares como mandos a distancia que controlan el barco y ayudan a amarrar y desamarrar o sistemas de estabilización y fijación de la embarcación en un punto concreto en el momento que el capitán lo desee. Otro punto importante en cuanto a innovación son las mejoras en la seguridad y el confort. La integración de sensores y la domótica también facilitan la navegación a clientes con menos experiencia”.

También Pascual Román, category manager - Digital Systems de Navico Group, comparte que “la innovación es crucial para aprovechar al máximo las nuevas tecnologías, como los nuevos procesadores y la inteligencia artificial”, y Christina Gödelmann-Godde, independent PR management de Sea You!, y con más de 20 años de experiencia en el sector, comenta que “las innovaciones técnicas son importantes, ya que ayudan a ahorrar dinero y tiempo, y a proteger el medio ambiente. Además, a algunos propietarios les gusta estar conectados a su barco, incluso cuando no están a bordo, con aplicaciones que permiten consultar su estado o incluso cargar sus baterías o encender el frigorífico antes de embarcar. Como en otros sectores, la tecnología está llegando a la náutica, y será cada vez más relevante”, mientras que Maitane Arana, managing director Spain and regional sales manager Southern Europe de Wescom Group, señala que “las innovaciones tecnológicas, como los sistemas de navegación inteligentes y la inteligencia artificial que automatiza los sistemas de a bordo, desempeñan un papel crucial en la mejora de la seguridad. Es importante para nuestros clientes que sigamos integrando estos avances en los productos que ofrecemos”.

Por su parte, Javier Mateos, sales manager leisure de Webasto, apunta que “en la náutica la innovación tecnológica a los sistemas básicos llega un poco más tarde, debido a que no se desea tener averías en medios como el mar. Pero cuando se pierde el miedo y las nuevas tecnologías llegan, llegan de verdad, la integración de sistemas permite hacer barcos más eficientes, motores más optimizados, diseños de cascos que planean más eficientemente, así como sistemas de climatización que consumen menos energía para hacer el mismo trabajo, lo que redunda en un mayor confort y autonomía”. Y Gerard Pardos, CEO de Aurumyachts, considera que “en cuanto a la innovación tecnológica no detectamos nuevas aportaciones, creemos que hace ya tiempo que la tecnología ha modificado muchos de los controles y situaciones que mejoran la navegabilidad, pero también creemos que debemos seguir innovando para mejorar la tecnología existente, rendimiento, fiabilidad y durabilidad”.

IMPACTO DE LA SOSTENIBILDIAD EN EL DESARROLLO DE NUEVOS PRODUCTOS Y SERVICIOS

Ya hemos ido viendo a lo largo del informe la importancia que está cobrando la sostenibilidad, tanto en el desarrollo propio del sector, como desde el punto de vista del consumidor. Y ahora veremos también cómo la sostenibilidad está marcando el desarrollo de productos y servicios dentro del sector de la náutica recreativa, ya sea con motores más eficientes y respetuosos, o con sistemas de gestión más eficientes y respetuosos con el medio ambiente.

Carlos Mahillo, director de desarrollo de negocio de Garau Ingenieros, por ejemplo, señala que “uno de los campos más avanzados en cuanto a innovación se encuentra en la gestión ambiental responsable de las marinas y clubes náuticos. La implementación de sistemas de control de vertidos, la optimización de la gestión de residuos y la transición hacia infraestructuras más eficientes energéticamente están marcando una nueva era en el sector. Estas iniciativas no solo responden a la creciente preocupación por la sostenibilidad, sino que también refuerzan el atractivo de estas instalaciones para una clientela cada vez más consciente del impacto ambiental. La innovación en estas áreas no solo aporta soluciones a los retos actuales, sino que también posiciona a España como un referente en la integración de prácticas responsables en las operaciones portuarias y recreativas”. Asimismo, Agustín Villa, product manager de Mapei Marine Spain, considera que la sostenibilidad “juega un papel clave, tanto en el sector naval como el de la náutica, por eso se están creando tantos clústeres enfocados en la Blue Energies en diferentes puntos y países del mundo, creando materiales más sostenibles y sistemas de tracción basados en energías eléctricas o renovables”. En esta línea, Pascual Román, category manager - Digital Systems de Navico Group, apunta que “la sostenibilidad juega un papel muy importante y empieza en el diseño de los nuevos productos, muchos de los cuales ya incorporan aplicaciones para hacer la navegación más sostenible, por ejemplo, con recomendación de zonas de fondeo, así como la búsqueda del bajo consumo”.

Por su parte, Oriol Mas, director de negocio de Motyvel Yachts, comparte que “es cierto que hay un interés creciente por la sostenibilidad, se puede observar en la gran cantidad de marcas que están optando por innovar en embarcaciones hibridas y eléctricas. El cliente más joven también busca este tipo de tecnología y el gobierno está adoptando nuevas normativas con una consciencia más ecológica. No obstante, la solución eléctrica en los barcos todavía no esta tan madurada como en la automoción. El fregamiento con el agua hace que el consumo sea muy elevado por la poca capacidad que pueden tener unas baterías actualmente. Los puertos tampoco disponen de la infraestructura necesaria para alimentar la cantidad de barcos que la industria en un futuro espera absorber. En definitiva, la solución de barco eléctrico existe, pero a día de hoy está todavía un poco lejos de ser una opción viable para un uso normal en la náutica de recreo”. Mientras que Christina Gödelmann-Godde, independent PR management de Sea You!, considera que “sostenibilidad es una palabra ‘trendy’ en el marketing, y se utiliza para vender un producto más fácilmente, ofreciendo soluciones más respetuosas con el medio ambiente. Cada vez más embarcaciones proponen soluciones híbridas para los motores, lo que fomenta la sostenibilidad, a la vez que reduce la factura del combustible”. Asimismo, Jordi Senties, CEO de Sent-Yacht, reconoce que “el tema de la embarcación eléctrica, de la cual soy defensor para los veleros, llauds y pequeñas embarcaciones, por el momento cuenta con poco apoyo de las administraciones, y los clientes están poco informados. Las pocas empresas del sector que batallamos para la introducción de la embarcación eléctrica esperábamos más apoyo por parte de las administraciones”. Finalmente, José Luis Piñeiro, director general de Nauteka, nos habla de su segmento en particular, el de las cubiertas: “Han salido muchos nuevos productos en los últimos años, nuevos materiales, muchas alternativas y esto confunde bastante al mercado, haciéndole llegar a creer en productos que son justo lo contrario de lo que ofrecen y también a los argumentos de venta. En el caso de las cubiertas de yates, están ofreciendo cubiertas sintéticas, de PVC u otros productos plásticos como más ecológicos que la teca, cuando el principal problema de contaminación que tenemos en los mares es justamente ese material, el plástico. Cada vez que un propietario o la tripulación del yate está limpiando la cubierta sintética, está vertiendo micro plásticos al agua”. Y defiende que “la teca, siempre que sea proveniente de bosques certificados, sostenibles y con toda la documentación en regla, es lo más sostenible que existe para fabricar una cubierta de yate, no hay ninguna alternativa mejor”.

Apuesta por la sostenibilidad en puertos y marinas

Más allá del impacto que puede tener la sostenibilidad en el desarrollo de productos y servicios vinculados a la náutica, esta tendencia ecológica se está asentando también en la gestión y la manera de trabajar de puertos y marinas. Para analizar el impacto de la sostenibilidad en el desarrollo y la mejora de puertos y marinas, hemos hablado con María García, directora del canal marinas de Ocean Ecostructures. “La creciente preocupación por el deterioro de los ecosistemas marinos ha puesto a todos los actores de la industria marítima, entre los que se encuentran puertos y marinas, en el centro del debate sobre sostenibilidad. Estos espacios, que tradicionalmente han sido vistos solo como infraestructuras para la náutica, ahora están asumiendo cada vez más su responsabilidad medioambiental. Esto se traduce en un impulso por regenerar y renovar puertos y marinas, no sólo para reducir su impacto, sino también para contribuir activamente a la restauración de los ecosistemas marinos. Es importante mencionar que, por su propia naturaleza y ubicación, los puertos y marinas tienen una oportunidad única y una situación privilegiada para actuar directamente sobre los océanos, y por ello pueden (y están comenzando a tomar) un rol de liderazgo en la regeneración del medio ambiente. Mediante soluciones basadas en la Naturaleza (SbN), se pueden transformar los puertos y demás infraestructuras marítimas en agentes de regeneración ambiental. Esto facilita no sólo recuperar la biodiversidad, sino también generar bienes y servicios ecosistémicos, creando riqueza y mejorando la calidad de vida de las comunidades”.

Sobre si la apuesta por la sostenibilidad en el sector náutico es real o no, María García afirma que sí: “Creemos que la sostenibilidad se está consolidando como una prioridad en el sector náutico, aunque aún queda camino por recorrer. Esta visión está tomando fuerza principalmente por dos factores clave. En primer lugar, la creciente presión regulatoria sobre las empresas e infraestructuras del sector está acelerando el cambio. La entrada en vigor de la normativa CSRD, por ejemplo, ha marcado un antes y un después al establecer directrices claras sobre sostenibilidad y la necesidad de reportar de manera transparente las acciones medioambientales. Además, las presiones sobre descarbonización, la gestión del agua y la reducción de consumos, entre otros, están impulsando a los puertos y marinas a adoptar prácticas más responsables. Por otro lado, también vemos un cambio en las expectativas de los propietarios de embarcaciones, quienes están cada vez más interesados en operar en marinas y puertos que favorezcan la sostenibilidad. Este interés está llevando a las empresas a ofrecer infraestructuras no solo más eficientes, sino también que respeten el medio ambiente, impulsando aún más la adopción de prácticas sostenibles en todo el sector.

Finalmente, sobre los principales cambios que se están introduciendo en el sector, en su apuesta por la sostenibilidad, la directora del canal marinas de Ocean Ecostructures destaca que “en primer lugar, la innovación tecnológica está desempeñando un papel crucial en la descarbonización del sector. Nuevas tecnologías están permitiendo tanto a las embarcaciones como a las infraestructuras portuarias reducir su huella de carbono, lo que contribuye a un sector más limpio y eficiente. Además, las infraestructuras portuarias están siendo adaptadas para integrar prácticas más sostenibles, como la mejora en la gestión de recursos y la incorporación de soluciones basadas en la naturaleza. Otro cambio importante es el creciente interés de las compañías de dentro y fuera del sector náutico en adoptar prácticas sostenibles. Este enfoque está llevando a que la responsabilidad ambiental no recaiga exclusivamente en los puertos y marinas, sino que sea un esfuerzo colectivo que involucre a toda la cadena de valor y que beneficie, en última instancia, al ecosistema. Finalmente, hay una necesidad creciente de medir los resultados de las acciones de renaturalización y cuantificar su valor económico”.