Entrevista a Ione Astondoa, directora de operaciones de Astilleros Astondoa
Una experiencia de más de 100 años y cuatro generaciones a píe del cañón avalan la trayectoria de Astondoa. Un astillero que, sin olvidar su característica esencia artesanal, ha sabido adaptarse a los tiempos, apostando por la tecnología, el diseño y la innovación en la fabricación de sus barcos. Ione Astondoa, directora de operaciones de Astilleros Astondoa, cuenta para Náutica Profesional cómo ha sido la evolución del astillero que, hoy en día, se centra en ofrecer a sus clientes embarcaciones singulares, exclusivas y de calidad.
Ione Astondoa, directora de operaciones de Astilleros Astondoa.
¿Cuál es la historia y la filosofía que se encuentran detrás de Astondoa?
La historia es la de un astillero que se fundó hace más de 108 años y que generación tras generación, actualmente gestionado por la tercera que representa su CEO, Jesús Astondoa, y la cuarta entre la que nos encontramos algunos de mis primos y yo, ha sabido adaptarse a los cambios de mercado, a las nuevas tendencias de la náutica y a los nuevos perfiles de los navegantes que buscan exclusividad y calidad en un segmento de embarcaciones de alta gama y de lujo.
Detrás de nuestra filosofía está la preservación del trabajo artesano en la fabricación de embarcaciones de lujo que distingue a nuestra marca, coexistiendo con la incorporación de las tecnologías más avanzadas y con la pasión por nuestro trabajo y nuestro astillero, legado de nuestro aitite, Jesús Astondoa Santamaría.
Astondoa Planta Santa Pola.
¿Cuáles son los principios fundamentales que guían la fabricación de sus embarcaciones?
Los altos estándares de calidad en todos los materiales que utilizamos para nuestros barcos, la fabricación in house siguiendo un modelo de producción donde desde la carpintería, mecánica, poliéster hasta la confección de las tapicerías se realiza en nuestras instalaciones por nuestro personal, y la alta personalización de nuestros yates, involucrando a nuestros clientes en el proceso de construcción desde el minuto 1, “no hay dos Astondoas iguales porque no hay dos clientes iguales”.
¿Cómo incorpora su astillero la innovación y la tecnología en el diseño y construcción de embarcaciones?
Gracias al trabajo de un equipo de profesionales altamente cualificados que conocen las tendencias de la industria náutica en todos sus ámbitos y que proyectan de forma conjunta cada embarcación que sale de nuestro astillero. Es un trabajo constante de sintonizar conocimientos y aplicarlos a la creatividad de cada modelo.
¿Cómo se enfoca en la artesanía y la atención al detalle en la construcción de cada embarcación?
El proceso in house nos permite ser mucho más exigentes en los acabados de nuestros barcos. Al no depender de terceros en la mayoría de los procesos de producción, podemos elegir los materiales y hacer un seguimiento mucho más exhaustivo en la fabricación, porque tenemos los talleres en nuestras propias instalaciones. Y por la elección que hemos hecho en apostar por el capital humano, como he dicho anteriormente, coexistiendo con las nuevas tecnologías, pero donde el input fundamental son las manos del personal cualificado que trabaja con nosotros.
Astondoa AS8.
¿Qué medidas toma para abordar la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental en su actividad?
En lo que respecta a nuestra empresa, hace tres años incorporamos en nuestra sede central, en Santa Pola, una instalación fotovoltaica de autoconsumo con la que estamos consiguiendo en el astillero un autoconsumo de más del ochenta por ciento, entre otras acciones que hemos llevado a cabo como los procesos exhaustivos de reciclaje tanto internos como externos, sustitución de diversos materiales por materiales sintéticos, incorporación de placas solares en algunas embarcaciones o la implantación de vehículos de empresa híbridos.
Nuestros barcos utilizan propulsión con motores diésel y cada uno pasa por estudios y pruebas para que sean cada vez más eficientes. Somos conscientes de que poco a poco todos los fabricantes de barcos tendremos que adaptarnos e incorporar formas de propulsión sostenibles, pero la industria náutica no ha encontrado aún cuál será la energía más sostenible para las embarcaciones de recreo.
¿Ofrecen programas de mantenimiento y actualización para las embarcaciones?
Sí. En Astondoa disponemos de nuestro exclusivo programa ‘Astondoa Service’, que proporciona a nuestros clientes el mantenimiento periódico, que puede llevarse a cabo en nuestras instalaciones o en las instalaciones de los distribuidores y servicios Astondoa autorizados. Nuestros barcos tienen una garantía regulada por la actual ley de garantías de la Unión Europea. Además, ofrecemos a nuestros clientes, servicio de refit, en el caso de que quieran reacondicionar sus barcos.
Recientemente, ha tenido lugar el estreno de Astondoa Ax8, ¿Qué rasgos distintivos definen y resaltan esta embarcación?
El Ax8 es el modelo crossover pionero de nuestra nueva gama Ax. Es un yate adelantado a su tiempo y a su segmento. Un yate que prioriza la habitabilidad en todos sus espacios y de manera atemporal, en el que encuentras amplios espacios en el interior y donde reside el protagonismo en los espacios exteriores, resaltando la amplia bañera de popa y acondicionado con todo lujo de detalles y la luminosidad en los interiores que se consigue con ventanas de dimensiones XXL.
La decoración interior del Ax8, con la colaboración del estudio Cristiano Gatto Design, es otro de los rasgos que más impactan de este modelo.
Astondoa Ax8.
¿Tiene planes de expansión, nuevos modelos o proyectos ya planteados para el futuro?
Astondoa está en permanente evolución. Continuamos abriendo mercados y consolidando nuestra presencia en aquellos en los que nuestra marca es un referente en la náutica de lujo. Y, por supuesto, Astondoa sigue reinventándose con su gama de modelos. Así lo venimos mostrando desde 2019 y hasta el momento, que hemos ido lanzando un modelo nuevo al año.
¿Cuáles han sido los mayores desafíos que ha enfrentado su astillero y cómo los han superado?
En más de 108 años de historia han sido muchos los desafíos a los que se ha enfrentado la empresa y mi familia. Primero mi bisabuelo, después mi abuelo y mi padre desde que está al frente del astillero.
Mi abuelo fue capaz de ver de alguna manera el futuro anticipándose al boom de la náutica de recreo en el Mediterráneo, cambiando el foco del astillero, pasando de ser un astillero que fabricaba traineras y botes de remo a ser un referente en la fabricación de embarcaciones de recreo.
La crisis de 2008 que tan duramente golpeó a la industria náutica fue otro de los momentos más críticos en la que mi padre y mi tío tuvieron que tomar decisiones duras para mantener el astillero, ante una caída brutal de la producción, mirando al exterior.
Ahora nos encontramos en otro tipo de reto, como es el cambio de la tendencia del consumo, el nuevo perfil de cliente más joven o las nuevas formas de comunicar. Todo se está revisando.
¿Puede compartir algunos logros que haya alcanzado Astondoa en los últimos años?
En lo que respecta a nuestros barcos, destacaría uno de los más recientes que ha sido el premio concedido en los Boat Builders Awards for Business Achievement por nuestra campaña de marketing online desarrollada para el lanzamiento del último modelo de la gama COUPE, el 677 /// Coupe. Hemos sido el primer astillero en involucrar a nuestros fans en redes sociales en el diseño interior de este modelo.
Como empresa, la Asociación Española del Lujo-Luxury Spain, de la que Astondoa es miembro, nos ha otorgado en su última edición, el premio Diamante de la Excelencia por ser el astillero de embarcaciones de lujo de referencia mundial español, tras cuatro generaciones y 108 años de historia.
¿Cómo anticipa que evolucionará el mercado en los próximos años?
Lo comentábamos en la cuestión sobre la sostenibilidad, toda la industria náutica tendrá que adaptarse para ser más sostenible y respetuosa con el medioambiente, pasando obviamente, por una adaptación en todos los aspectos de las embarcaciones, desde los costes de producción hasta adaptaciones estructurales de las mismas, que inevitablemente vendrá de la mano de las nuevas energías de propulsión.