Baltic Yachts lanza oficialmente el velero ‘Raven’ de 111 pies

Baltic Yachts ha lanzado oficialmente el velero Raven de 111 pies, asistido por foils, en preparación para las próximas pruebas de navegación frente a Jakobstad en septiembre, esta vez utilizando sus foils.

Este innovador velero se sumergió por primera vez en el agua a mediados de julio, utilizando su sistema de izado de un solo punto, sin sus brazos laterales y sus hidrofoils en forma de T, para que todos sus sistemas pudieran ser probados antes de comenzar a utilizar los foils.

Esto aseguró que todo, desde sus sistemas hidráulicos, eléctricos y electrónicos, incluida su propulsión diésel eléctrica, estuviera funcionando. Se izó el mástil Southern Spars, se instalaron las velas North 3Di y se activaron sus tanques de lastre de agua para que pudiera ser evaluada bajo vela sin sus foils. Aunque Raven está equipada con una quilla fija, sin sus foils necesita la ayuda de lastre de agua para mantener la estabilidad durante la navegación."

Con esta fase de puesta en marcha completada, recientemente se levantó a Raven de nuevo en tierra firme en Jakobstad para que se le pudieran instalar los brazos laterales y los foils, y así prepararle para más pruebas que revelarán su capacidad como superyate ultraligero asistido por foils.

A principios de septiembre, su equipo de navegación especializado se unirá al yate en Finlandia para que Raven pueda ser gradualmente llevado a un nivel que le permita ser trasladado a un lugar donde las condiciones le permitan alcanzar su máximo potencial de navegación.

El equipo de navegación está siendo dirigido por Klabbe Nylöf y constará de una tripulación central de cinco personas, incluyendo al patrón, Damien Durchon, un experimentado navegante en alta mar. También hay un equipo técnico en tierra que está continuamente desarrollando a Raven para ayudarla a alcanzar su máximo potencial, y durante la fase de entrenamiento y pruebas, se sumarán tripulantes adicionales de un grupo de 20 navegantes con experiencia probada en navegación de alto rendimiento.

El Raven de 111 pies es el velero más extremo que Baltic Yachts ha construido, superando incluso a embarcaciones como la Visione de 147 pies y la Hetairos de 197 pies. Es el primer superyate en el mundo en utilizar la tecnología de foiling de esta manera, ha pasado por uno de los ejercicios de ahorro de peso más intensos que jamás haya realizado su constructor, y al mismo tiempo está equipado con un impresionante interior que expone la estructura del yate para crear una estética única.

El concepto general, incluyendo el diseño interior y exterior, fue desarrollado por Finn Jarkko Jämsén, cuyo renombrado enfoque disruptivo en el diseño de superyates encajó con el deseo del propietario de tener un superyate elegante y rápido, adecuado para la navegación diurna y con la capacidad de realizar pasajes de alta velocidad en alta mar.

La arquitectura naval es obra de Botin Partners y la ingeniería estructural la realizó PURE Design en Nueva Zelanda, ambos líderes en los últimos diseños de foiling de la America's Cup.

El proyecto Raven está siendo liderado por el experimentado Garth Brewer de A2B Marine Projects, quien desempeñó un papel similar en el proyecto Visione y cuyo equipo ha trabajado con gran éxito junto a Baltic Yachts para llevar el proyecto a buen término según lo previsto.

La capacidad de Baltic Yachts para profundizar en el proceso de ahorro de peso y permitir la construcción de un yate con un diseño interior completamente equipado hizo posible que se pudiera realizar la parte asistida por foils de la ecuación. Los brazos laterales del yate, operados hidráulicamente, están equipados con hidrofoils en forma de T con aletas de ajuste en el borde posterior para soportar aproximadamente el 60% del desplazamiento del yate a alta velocidad. La popa del yate permanecerá en el agua, pero está equipada con aletas verticales interceptoras que pueden ajustar el equilibrio del yate en sentido longitudinal.

A medida que comienza el proceso gradual de comprender el rendimiento de navegación de Raven, la atención se ha dirigido por igual a la apariencia exterior del yate y al concepto y diseño interior, creado por Jarkko Jämsén y su equipo.

Jarkko describe el concepto de diseño como 'holístico' en el sentido de que el exterior e interior del yate han sido diseñados para formar una entidad cohesiva. La estructura del barco permanece expuesta en el interior y se convierte en parte del ejercicio de diseño. “Lo que normalmente no es visible ahora se exhibe”, señala Jämsén. “Hay un lado agresivo y brutal en algunos de los diseños, como la propia estructura de fibra de carbono, los sistemas, el cableado y la tubería, con una fina capa de lujo en medio”, continua.

Los arneses de cables de colores, las canalizaciones del aire acondicionado y las tuberías de transferencia de lastre quedan expuestos y se integran en el estilo general. “Incluso bajo las cubiertas, la calidad es perfecta, pero sin adornos”, afirma. “El tratamiento del diseño es bastante puro en el sentido de que utiliza la belleza básica de los sistemas de una manera no convencional”.

La distribución, tanto en el interior como en cubierta, gira en torno al diseño de la cabina en forma de 'nido de pájaro' con su acristalamiento de Perspex y montantes de fibra de carbono pintados con efecto de madera que rinden homenaje al diseño de automóviles de carreras Maserati de la década de 1960, que empleaba una estructura tubular expuesta para el ahorro de peso y la estética.

La estructura de la cabina proporciona una abundancia de luz natural en el alojamiento, que incluye una cabina principal en la popa, con una litera doble abatible en el centro que se guarda contra la pared a través delantera. Delante del 'nido de pájaro', hay amplias zonas de comedor y asientos a babor y estribor, una cocina a babor y un centro de navegación y control que mira hacia popa a estribor.

Todo el mobiliario se construye sobre estructuras de fibra de carbono tubulares ultraligeras con materiales livianos, incluido el ratán utilizado en los techos y las cubiertas para el tapizado. Delante del salón principal, se encuentran los compartimentos de ducha con acceso visual a los grandes cilindros hidráulicos que operan los brazos laterales de hidrofoil. Hay paneles de visualización adicionales en el soporte de mástil de fibra de carbono en forma de A, que exponen los cilindros que operan los deflectores de control de aparejo superior e inferior y el aparejo de 7 metros de largo.

A diferencia del salón y la suite principal, el amplio alojamiento de la tripulación en la proa se termina de manera más convencional y muestra menos de la estructura del yate. En otras palabras, el tratamiento interior de Raven es exactamente lo contrario de la tradición en la que las áreas del propietario tendían a ocultar la estructura y los camarotes de la tripulación quedaban expuestos.

La cabina en forma de 'nido de pájaro' se encuentra estratégicamente ubicada con la necesidad consciente de mantener a los invitados alejados de la zona de trabajo del yate. También está equipada con un ‘bimini’ rígido que se pliega sobre sí mismo, rindiendo homenaje a otro clásico automovilístico, concretamente al techo duro del Ferrari Super America de 2005. El ‘bimini’ ofrece protección contra los elementos, teniendo en cuenta que la velocidad del viento durante la navegación será una consideración importante.

El yate se controla desde una zona de trabajo semicubierta estilo imoca en la popa, con dos timones y todas las winches de control de velas al alcance de la tripulación. La distintiva popa invertida y la proa tipo ‘nariz de gota’ no solo mejoran la visibilidad desde la popa cuando el yate está en su actitud de foiling, sino que también son más eficientes aerodinámica e hidrodinámicamente a altas velocidades.

Quizás de manera contraintuitiva, ambos suelos de la cabina están revestidos con teca sólida, lo cual se tuvo en cuenta meticulosamente en los cálculos de peso. Las cubiertas laterales de Raven tienen una fuerte curvatura cuando están en reposo, pero con el ángulo de escora, la superficie de sotavento se vuelve prácticamente plana, lo que permite que la tripulación se desplace de manera más eficiente y segura.

Cada accesorio de cubierta, ya sea un winch, un ojal o el cierre de escotilla, está provisto de una ‘instrucción’ naranja pintada a mano y antideslizante que indica su función. Incluso los winches de tambor tienen flechas que indican la dirección de desplazamiento y se utiliza un lenguaje coloquial familiar para algunos controles, nacido de la confusión que a veces reina en la cubierta de los yates de regatas.