Moldear micropiezas con ultrasonidos
El centro tecnológico Ascamm se halla inmerso en numerosos proyectos relacionados con la industria del plástico. “El plástico y sus procesos de transformación es el ADN de Ascamm”, subraya Xavier Plantà, subdirector general de Operaciones y Tecnología del centro. De entre todos ellos, hoy quizás el más destacable es USM (UltraSonic Molding), una nueva tecnología que pretende “marcar un punto y aparte”.
Según explica a Plásticos Universales Xavier Plantà, el proceso rompe en su concepto —y en sus bases— la plastificación del material y aparece un nuevo narrador de fondo que define unos límites distintos de los que ya existen. Combina de forma eficiente un proceso de calentamiento por ultrasonidos —tecnología madura y muy usada en la soldadura de polímeros— con una prensa de moldeo y tecnología de molde.
El desafío para el diseño y desarrollo de la máquina que incorpora esta nueva tecnología, bautizada con el nombre de Sonorus 1G, está en las manos de Ultrasion S.L., una spin-off de la Fundación Ascamm que se creó para desarrollar y comercializar tecnologías innovadoras que se basan en los ultrasonidos.
El calentamiento de la materia
Por primera vez, se eliminan los sistemas tradicionales de calentamiento térmico para sustituirlos por la aplicación de ultrasonidos, ondas mecánicas de alta frecuencia que agitan las moléculas del polímero de manera más rápida que su propio tiempo de relajación, lo cual se traduce en un calentamiento de la materia.
Este calentamiento permite disminuir la viscosidad del material hasta tal punto que el material puede fluir hacia las cavidades de un molde con presiones muy bajas y en tiempos muy reducidos.
Este concepto, que ya se trabajó durante años por los investigadores del Centro Tecnológico Ascamm, se concretó con el desarrollo de una tecnología que se patentó con el nombre de USM (UltraSonic Molding).
Cuestión de precisión
“Esta tecnología permite crear nuevas aplicaciones y previene algunas de las limitaciones que presentan las tecnologías de moldeo tradicionales, como el sobremoldeo de componentes sensibles a la presión, la degradación de materiales debido a altos tiempos de residencia o el desperdicio de material por purga de husillo, cambio de color o parada de máquina”, explica Plantà. Entre las numerosas ventajas que ofrece esta nueva tecnología respecto a las convencionales, destaca la precisión en la replicación de micro cavidades con paredes delgadas y con detalles de alta precisión, un consumo energético muy reducido y la prevención a de la degradación de materiales sensibles a través de un control muy preciso de la ventana de proceso. “La tecnología se traduce en una máquina industrial de prensa vertical totalmente eléctrica y silenciosa con un tamaño apto para la industria”, añade.