El Foro Internacional de Confedem marca el camino para un futuro de las materias primas minerales que pase por Europa

La Confederación Nacional de Empresarios de la Minería y Metalurgia, Confedem, ha organizado con la colaboración de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas y Energía de Madrid, el Foro Internacional Confedem. Moderado por el presidente de Confedem, Vicente Gutiérrez Peinador, el encuentro ha sido, dada la situación actual, en formato webinar.

La primera mesa “El camino hacia una energía baja en carbono en Europa” ha contado con la presencia de Javier Tarhgetta, CEO de Atlantic Copper y presidente de Primigea; Yolanda Fernández, directoria de medio ambiente, sostenibilidad y calidad de EDP; Luis Martins, presidente del Cluster Portugal Mineral Resources; y, por último, Corina Hebstreit, directora general de Euromines.

Javier Targhetta comenzaba su ponencia contando las proyecciones a futuro sobre el potencial futuro de tendencias globales que podrían influir en el uso de metales. Targhetta ha mencionado el gran tirón de metales que estas tendencias van a necesitar, la contribución positiva que hacen los metales con la lucha contra el cambio climático y que, por esta misma razón, merece la pena que se fabriquen en Europa, así como la exploración y explotación de los mismos.

¿Hacia dónde se dirige el mundo? Todas las mejoras de la humanidad son reflejos de una situación en la que la concienciación sobre el planeta, la reducción de la pobreza en el planeta o el crecimiento del PBI per cápita han ido mejorando.
La sostenibilidad ya se preocupa no solo por el ser humano si no por su entorno. En este sentido Javier ha afirmado que “todo el mundo tiene derecho a ser negacionista pero de lo que no se tiene derecho es a ser irresponsable” ya que “no hay más planetas de recambio”.

En cuanto a las principales tendencias globales en la actualidad se ha referido a tres muy concretas: la urbanización y la electrificación doméstica en donde miles de millones de personas progresan en economías en desarrollo, contribuyendo al crecimiento económico y al consumo; la transición energética donde las energías limpias van a tener un papel muy importante en un modelo económico donde la sostenibilidad va a ser el pilar fundamental; y el vehículo eléctrico es necesario para la transición hacia un mundo sin carbono.

En lo que respecta al fenómeno demográfico y urbano, el 55% de la población mundial vive en áreas urbanas hoy. En 2040 el 64% de la población mundial será urbana, donde aproximadamente el 90% del crecimiento tendrá lugar en Asia y África.

Targhetta ha explicado que la evolución de generación de energía eléctrica va a presentar un crecimiento espectacular a partir de fuentes renovables y un estancamiento de las fuentes tradicionales, de los combustibles fósiles y más concretamente del carbón. Así, el porcentaje de renovables en el total de generación de energía global se incrementará a 26% en 2040 del 9% del año 2017. Los renovables son la fuente de energía con mayor crecimiento: “El futuro de la movilidad se llama vehículo eléctrico”, ha afirmado Javier. “Todavía creo que no se ha reconocido en forma de precios que reflejen la demanda lo que va a ser este tirón. Y esto lo están subestimando los mercados, tendrá una repercusión que no sé cuál será, pero tampoco sería atrevido decir que habrá tensiones fuertes entre oferta y demanda de algunos metales”, ha continuado.

Sobre la industria y cómo esta debe actuar con respecto a la reducción de la huella de carbono, Targhetta ha dicho que el CO2 no conoce fronteras por lo que no basta con una Europa baja en carbono, sino que “hay que apuntar a un mundo bajo en carbono”. En este sentido, la industria europea es frecuentemente la más energéticamente eficiente del mundo. La Unión Europea también es la región industrial del mundo con mayor porcentaje de fuentes renovables en su mix de generación. Por tanto, de entre las grandes regiones industriales del mundo, probablemente es la de menor contribución unitaria de CO2.

Por último, el presidente de Primigea ha insistido en la necesidad de que el abastecimiento de metales se haga desde Europa: “Merece la pena desde luego preocuparse por el abastecimiento de metales y merece la pena extraerlos en Europa y transformarlos ahí también, ya que Europa es pionera en el cuidado por el cambio climático y por una aportación menor de dióxido de carbono a la atmosfera”.

Bajo el título «Materias primas minerales para el almacenamiento de energía, las energías renovables y la movilidad», Yolanda Fernández ha afirmado que “tenemos un problema con el cambio climático y las emisiones de CO2 y requiere una solución global” ya que afecta a todo el mundo. Tal como vamos, explicaba Yolanda, “si no hacemos nada más, los incrementos de temperaturas estarían subiendo y no se puede prever porque se encuentra fuera de las situaciones que ya hemos vivido hasta ahora”.
El cambio climático también tiene que ver con el modelo energético que tenemos en la actualidad y este, no es sostenible.
El cese de la actividad económica, el menor uso del carbón…son algunos de los aspectos que se han visto reducidos de manera notable este principio de año.

Según Yolanda Fernández, “es necesario trabajar en todos los sectores ya que, para llegar a donde tenemos que llegar en 2050, todos los sectores se van a ver involucrados”.

La Unión Europea ha fijado unos ambiciosos objetivos a 2020 y 2030 con el fin de alcanzar la descarbonización en 2050. Sin embargo, Yolanda ha advertido de que en lo que tiene que ver con la reducción de emisiones sí que vamos bien y se cumplirá en 2030 pero si seguimos en la vía en la que estamos no vamos a llegar en la eficiencia energética y que ha afirmado que “todavía nos queda un largo camino por recorrer”.

España sin embargo es aún más ambiciosa que la UE en los objeticos de energía y clima a 2030 haciendo referencia al Pacto Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).

Además, ha explicado que el camino hacia una economía baja en carbono pasa por la electrificación del consumo. Electrificar el consumo con más renovables y mejorando la eficiencia energética. Es la única solución para que haya más presencia de las renovables en el consumo de energía eléctrica.

En cuanto a los minerales críticos, existen muchas iniciativas desde la CE y EGS para homogeneizar y actualizar las bases de datos de la Unión sobre indicios de materias primas minerales. Por ejemplo, el Proyecto Minerals4EU y el Proyecto ProMine han alimentado la plataforma EGDI que proporciona una base sólida de información. Asimismo, en la actualidad la denominada GeoERA desarrolla estudios de mayor detalle e incluye el potencial de los fondos marinos.

El Pacto Verde Europeo y la digitalización, estrategias de crecimiento para la UE

Según Yolanda, la digitalización también va a suponer un antes y un después en la forma en la que producimos las cosas como las transformamos y como las utilizamos: “En este escenario vamos a contribuir en una forma muy efectiva al cambio climático por la interacción de las energías renovables”.

La transición energética requiere inversiones en renovables. La electrificación se duplicará en 2030 y triplicará en 2050 en que toda la electricidad será producida con renovables. Para ello, vamos a necesita muchos materiales para esta fase.

El importante incremento de las renovables presenta para Yolanda Fernández algunas incertidumbres en la seguridad de suministro. Esto quiere decir que supondrá una potencia de suministro, del sistema, para responder cuando las renovables no estén presentes: “Tendremos que requerir del bombeo o de las baterías para el confinamiento de energía. Otro aspecto que ha mencionado la directora de medio ambiente, energía y clima del EDP ha sido el tema de la flexibilidad: “En todo momento tiene que casar la energía con la demanda. El aumento de la intermitencia, por mayor proporción de eólica y solar, requerirá una mayor flexibilidad del sistema eléctrico”.

Por último, ha explicado la visión de EDP a 2030 en la que basa su estrategia en tres pilares fundamentales: la carbonización, la digitalización y la descentralización. “Para 2030 ya no habrá centrales de carbón y vamos a instalar más de 4m de paneles solares descentralizados. Y por supuesto hay que trabajar mucho en las redes para que sean más inteligentes y para que siempre estén funcionando en las mejores condiciones”, ha finalizado.

Asegurar un suministro de materias para Europa. Este es un punto en el que todos los ponentes han coincidido. “Tenemos un consumo interno de materias primas que nos dice que no necesitamos al exterior”, ha asegurado Luis Martins. En lo que respecta a la crisis sanitaria por el Covid-19, ha mencionado que este periodo nos ha mostrado la importancia de valor establecidas en Europa que nos permitan reducir la dependencia y para incrementar el valor añadido de esa cadena de valor. “No hay que olvidar que la cadena de valor tarda tiempo y esto es algo de lo que fácilmente se olvida”, ha afirmado.

Los metales y el consumo de dichos metales se van a incrementar mucho en los próximos años (litio, cobre, cobalto), por lo que hay que tener presente que en la construcción de la infraestructura necesaria para ese cambio energético vamos a necesitar las tierras raras para la energía solar, por ejemplo. “Es necesario empezar a asegurar esa transición”, ha afirmado con rotundidad.

Otro problema al que ha hecho mención Luis Martins es la demora del gobierno en lo que se refiere a la atribución y licencias de recursos minerales, los cuales, en muchos casos, todavía no hay permisos para trabajar: “La demora en este sector es un punto negativo”.

“Nosotros pensamos que para asegurar un suministro sostenible y sustentable en el tiempo en términos energéticos es necesarios diversificar de esa energía. Esto será el cerebro del suceso del suministro sostenible. Aquí en Portugal tenemos esto claro”.

Todas las personas reconocen la importancia de los recursos minerales, pero asistimos en Europa en numerosas ocasiones a situaciones en las que la contribución social no ayuda. Para Martins, la comunicación es una estrategia muy importante y en este sentido todos los actores deben contribuir a llegar a la solución de este problema: “Comunicar que es la minería es vital”, ha concluido.

Materias primas minerales: Perspectivas Europeas

Por su parte, Corina Hebestreit, directora general de Euromines ha hablado de las perspectivas de Europa y ha expresado que las cadenas de valor industrial y los ecosistemas requieren unas condiciones económicas, administrativas y sociales atractivas, además de una planificación de la seguridad, fiabilidad y coherencia en todo el marco político: Para ello es necesario tener un claro enfoque estratégico para mantener la producción industrial de calor añadido en Europa”.

A pesar de la mayor eficiencia de los recursos en la producción y el uso y la mayor circularidad de las cadenas de valor, los esfuerzos en el futuro previsible, según Corina, se verán compensados por el crecimiento y el envejecimiento parcial de la población mundial, a un mejor nivel de vida y a mayores exigencias de protección del medio ambiente y del clima.

El sector europeo de las materias primas minerales se enfrenta a retos críticos en lo que respecta al apoyo a la transición hacia una Europa sostenible con bajas emisiones de carbono y libre de fósiles y hacia la economía ecológica. Los metales extraídos son fundamentales para construir la infraestructura eléctrica, así como los sistemas de almacenamiento de energía, las centrales eléctricas de energía renovable y los vehículos para uso personal y comercial.

“El suministro sostenible de metales y minerales también será fundamental para construir una futura sociedad sostenible que dependerá en gran medida de la nueva infraestructura de transporte, así como de los nuevos edificios ecológicos”, ha explicado Corina durante su intervención.
A su vez, ha remarcado la importancia del sector de la minería y el sector de procesamiento de minerales para asegurar el suministro de metales extraídos de manera sostenible: “La cadena de valor abarca desde la exploración geológica, la minería y el procesamiento hasta el reciclado de los metales. El sector de los agregados está repartido por toda Europa y proporciona agregados para las industrias de la construcción y la infraestructura”. Así, en la cadena de valor está incorporado un “fuerte compromiso” ambiental tanto durante la explotación como en la recuperación de las tierras utilizadas para la minería.

En lo que respecta a la industria de las materias primas minerales, ésta ha progresado radicalmente en cuanto a la productividad y la eficiencia energética y sigue aplicando nuevas soluciones destinadas a reducir aún más el consumo/unidad de energía y a mejorar las operaciones con uso intensivo de carbono.

Sobre las energías renovables, la directora de Euromines ha asegurado que la nueva infraestructura del sector de la energía alternativa requiere un mayor uso de metales y minerales, en acero particular para las tuberías, equipo de minería, cobre y grafito para los cables de electricidad… Los metales y minerales son esenciales para fabricación y tecnologías de suministro de energía «verde» renovable. En la mayoría de los casos, se prevé que la demanda anual de materias primas utilizadas en ciertas tecnologías de bajo carbono aumentarán significativamente para el 2030.

La nueva estrategia industrial de la UE reconoce las posibilidades del sector europeo de materias primas de suministrar materias primas sostenibles de materias primas críticas y estratégicas para los ecosistemas industriales identificados, como el acero de bajo carbono, la movilidad inteligente, las energías renovables, la economía digital, etc.

Así, explica Corina, utilizando los instrumentos financieros y otros instrumentos para fortalecer el suministro de materias primas de la UE y reconocer al sector de las materias primas como un sector que cumple los criterios del reglamento de financiación sostenible de la UE.