En un encuentro sectorial que tuvo lugar en Aidimme, el pasado 10 de julio
El sector del mecanizado valenciano, en el Observatorio del Metal
La presentación corrió a cargo de Raquel Aliaga, directora de Innovación de AEI Valmetal, la rama de innovación de Femeval, y Samuel Félix, responsable del Área de Transferencia de Tecnología y Conocimiento de Aidimme. Ambos explicaron su vinculación con el sector del metal valenciano y desgranaron su actividad en favor de las empresas del sector. El escenario elegido, además, resultó ser perfecto, porque tras el debate los asistentes pudieron visitar los espacios vinculados a Cexmetal, Centro de Excelencia en Conocimiento del Metal, proyecto promovido conjuntamente por Aidimme y Femeval, y descubrir los diferentes desarrollos en los que se encuentran inmersos, así como ver sus capacidades para la tranferencia de conocimiento y la realización de proyectos de I+D+i para empresas.
Tras la exposición sobre el sector valenciano y las capacidades de Aidimme, Oriol Caballé, presidente de Aspromec y director de Kromi, remarcó que los protagonistas de la jornada son las empresas y que el papel de Aspromec es colaborar en la competitividad del sector. Aprovechó la presencia de profesionales del mecanizado para resumir las conclusiones de los observatorios anteriores. Así por ejemplo, se refirió a la colaboración de las empresas españolas como fórmula para compensar su falta de tamaño, y los tímidos pasos que se observan ocasionalmente para mejorar esta circunstancia. La confianza y la voluntad personal de las empresas se plantearon como factores determinantes para colaborar y, de hecho, los asistentes citaron ejemplos de colaboración entre ellos. La alta exigencia en las inversiones, la formación y la necesidad de una gestión más profesional fueron otros de los factores que Caballé citó para la mejora de las empresas.
La digitalización, integración de la automatización en la empresa y la necesidad de diversificar también se expusieron como factores que marcan la actualidad del sector.
El sector en Valencia
En el bloque del debate dedicado a la situación del mecanizador en la Comunidad Valenciana los participantes afirmaron que la situación actual es incierta y que la falta de empresas tractoras se está notando en la ralentización del consumo. Aunque con cierta disparidad de opiniones, la inestabilidad y la imposibilidad de llegar a acuerdos a medio plazo fueron factores en los que todos coincidieron: “La sensación es de incertidumbre, los proyectos tardan en llegar y se dificulta mucho la planificación del taller de mecanizado”.
De izq. a dcha.: Núria Atiénzar, consultora; Marcel Cerveró, de Femeval; Domingo Ochoa, de Industrias Ochoa; Paulo Lopes, de Walter Tools; Joaquín Mínguez, de Mecanizados, S.A.; y Alberto Manuel Llopis, de Fábrica SEO, S.L.
También se pusieron sobre la mesa los datos de Afmec, la Asociación Española del Mecanizado y la Transformación Metalmecánica, que señalan un crecimiento del sector y apuntan a un crecimiento de la facturación de este año a pesar de la incertidumbre.
A la pregunta de si se sienten apoyados, los asistentes al debate mostraron también disparidad de opiniones. Se apuntó que tal vez haya que buscar la forma de acceder a ayudas a la innovación y no tanto a la mera compra de maquinaria. El tamaño de las empresas, se afirmó, también condiciona la capacidad de un mecanizador pequeño para acceder a las posibles ayudas de alguna Administración. En este sentido, se puso en valor el papel de entidades como Valmetal para acercar las ayudas a las empresas y para sortear las dificultades de gestionar estos aspectos. En relación con las ayudas se opinó también que la responsabilidad debe estar sobre las empresas y no sobre las administraciones, que deberían enfocar sus esfuerzos hacia asuntos en los que las empresas no pueden hacer nada, como es el problema de la mano de la obra cualificada.
Cómo acceder a nuevos sectores fue otro de los temas surgidos en el debate. Los profesionales presentes en el debate citaron la importancia de prepararse para poder acceder a sectores que aporten valor, mediante certificaciones, homologaciones, aspectos puramente técnicos y los recursos humanos necesarios. Las pequeñas empresas, señalaron, no pueden acceder directamente a sectores como el de la aeronáutica o la automoción, aunque sí pueden crecer junto a un Tier 1 o 2.
Se abordó también un asunto que con frecuencia no se tiene en cuenta en empresas de producción: la necesidad de mostrarse al mundo adecuadamente, por ejemplo, a través de webs bien construidas. Fueron varios los que coincidieron en que, pensando que conoces perfectamente las empresas competidoras en tu entorno, una búsqueda en internet lleva a localizar competidores desconocidos. Trabajar con herramientas digitales, campañas de SEO y todo lo relacionado con el marketing digital es clave hoy en día y las empresas de producción posiblemente vayan por detrás de otros sectores.
La producción moderna
El bloque de debate “La máquina-herramienta integrada en la producción moderna” estuvo moderado por Paulo Lopes, director comercial para España y Portugal de Walter Tools, y puso de manifiesto la velocidad a la que avanza todo y cómo las revoluciones industriales ocurren en periodos cada vez más cortos. Se abordaron cuestiones como: ¿Qué entendemos exactamente por producción moderna? ¿Podemos avanzar hacia una producción de series más cortas manteniendo la rentabilidad?
La conversación fue muy interesante y se expusieron situaciones poco habituales y un ejemplo de cómo la robotización también es útil en ocasiones en series cortas y en empresas pequeñas.
Según explicaron los mecanizadores de pequeño tamaño, los proveedores de máquina, herramientas y softwares avanzan hacia la producción moderna con más rapidez que la que una empresa pequeña puede asumir. Todos coincidieron en que las barreras tecnológicas para las empresas ya no existen, gracias a los proveedores. La tecnología más avanzada y el asesoramiento por parte de los proveedores y sus productos facilitan mucho el trabajo a los mecanizadores.
La simulación y los gemelos digitales
Jesús Varea, director gerente de Tebis Iberia, lideró el debate sobre la simulación y los gemelos digitales y su implantación en los talleres de mecanizado. Los participantes explicaron cómo realizan las simulaciones y el papel del postprocesador en estas simulaciones. Se pusieron de manifiesto los beneficios de la simulación, especialmente en piezas de gran valor en las que se pueden evitar colisiones teniendo en la programación todos los movimientos. Según se afirmó, el propio CAM y el archivo de los fabricantes para el postprocesador ya realizan estas funciones y hoy en día el propio control de la máquina incorpora los movimientos de robot y las posibles.
La virtualización de la máquina es un gran salto adelante, que puede incluir todas las particularidades de cada empresa.
De izq., a dcha., Swen Hamann, Zoller Ibérica; Samuel Félix, Aidimme; Raquel Aliaga, Valmetal; Angel Hernández, Aspromec; y Oriol Caballé, Aspromec.
Trazabilidad y mano de obra cualificada
Swen Hamann, director de Zoller Ibérica, fue el encargado de moderar el debate sobre la importancia de la trazabilidad de los procesos. En la producción moderna cada detalle cuenta y la trazabilidad está cada vez más presente en los softwares que los fabricantes utilizan ya que permiten no solo trazar los procesos sino aprender de ellos.
El bloque “La demanda de talento y atracción necesaria del sector”, estuvo moderado por Angel Hernández y a lo largo del mismo se valoró la importancia de acercar el sector a la sociedad, mostrar lo que hace un mecanizador y cómo todo lo que se hace en un taller nos rodea en nuestra vidas privadas. La dificultad de atracción de talento ocupó una buena parte del tiempo del debate. Cómo convencer a la juventud de que la industria es un sector atractivo, es un reto, pero también los salarios que se pueden ofrecer se plantearon como un problema. Para poder ofrecer salarios atractivos hay que ser capaces de hacer piezas de valor y obtener unos resultados que permitan ofrecer salarios superiores a los de empleos sin cualificación alguna. En definitiva, hay que buscar las vías para lograr un valor añadido porque esto también esto redundará en el atractivo del sector.