No reinventemos la rueda, busquemos la solución
3 de junio de 2011
Muchas veces, y hoy en día más, escucho a grandísimos profesionales del sector del mecanizado lamentarse de que “no nos ayudan”. Pero digo yo: tampoco demandamos nosotros tal ayuda.
Escucho con frecuencia (y más en particular en el encuentro de Vigo) que los empresarios ‘somos mecánicos’, no sabemos de gestión, de organización empresarial, de recursos humanos, de economía financiera, etc. y por tanto se demanda formación.
La formación que se solicita se aprovecha el asociacionismo local para reivindicar que se desarrollen programas formativos que ayuden a las empresas a mejorar la gestión.
Personalmente considero que lo que estamos haciendo es autoengañarnos, ya que pocas organizaciones hoy en día tienen recursos propios y menos de las personas clave para liberarlas en desarrollos formativos concretos.
Es obvio que en un mercado tan competitivo como el actual que estamos viviendo o cambias, o te cambian. En consecuencia, no sirve seguir haciendo las cosas como hasta ahora, pero tampoco es útil liarnos la manta a la cabeza y formarnos porque sí. Lo siento mucho, no hay tiempo. Quizás deba potenciarse el outsourcing, lo que dicho en ‘Román Paladino’, la externalización de determinados servicios del conocimiento.
Los empresarios que forman parte del tejido empresarial del metal en España son magníficos trabajadores, excelentes mecánicos y personas tradicionalmente comprometidas con sus propios desafíos del taller que siempre se repiten, esto es: calidad, entregas inmediatas y costes. Ahora que hace falta ser más competitivo, que hace falta desarrollar cooperación entre empresas, que hace falta aportar llave en mano a las empresas tractoras, que hace falta estar en lo máximo de las certificaciones, que además hay que actualizar nuestro parque de maquinaria, etc., etc., considero que más que formación lo que hay que desarrollar es el conocimiento de la información práctica.
¿Qué es la información práctica? Es aquella que de forma resumida y lo suficientemente sesgada me aporte valor para con un asunto concreto y de forma inmediata.
Voy a poner un ejemplo. No tengo formación en gestión económica financiera. Resulta que el banco ahora no me financia determinada operación pero además lo más gordo del tema es que estoy en números negros, tengo pedidos e incluso un proyecto en camino que me resolverá el problema de los gastos fijos al menos durante dos años. ¿Ante este interrogante, cual es la solución? La solución ¿formarme?, ¿en cuánto tiempo? ¿No creen ustedes que la solución es acudir a organizaciones que tienen este conocimiento práctico, con experiencia, que están comprometidos con la competitividad del sector y que pueden aplicar acciones correctoras inmediatas? Esto es lo que yo llamo información práctica.
En Aspromec, que como bien saben ustedes es una Asociación de Profesionales para la Competitividad del Mecanizado, hay personas que al igual que ustedes son empresarios del metal, tienen experiencia en el sector, han sufrido, sufren y sufrirán los vaivenes del mercado, en muchos casos además son empresas familiares como la suya y además colaboran estrechamente con entidades como Aleacción a la cual represento que no tenemos otro objetivo que ayudarles, con nuestro conocimiento y con nuestra experiencia.
Insisto: ya no hay tiempo. No reinventemos la rueda, busquemos la solución. Hagan ustedes una reflexión de cuatro áreas prioritarias de mejora que necesite su taller, llámenos que a buen seguro les escucharemos y les ayudaremos a buscar la mejor solución de forma dinámica y práctica.