Apex Tool Group confía en la rectificadora cilíndrica S31 de Studer

En la empresa Apex Tool Group GmbH (ATG) de Westhausen, Alemania, la rectificadora cilíndrica S31 de Studer demuestra ser realmente universal. Desde componentes individuales hasta series medianas, rectifica ejes de engranajes y de control para herramientas de montaje eléctricas y neumáticas de Cleco de forma rentable y flexible. Cleco es una de las seis marcas mundiales de ATG Power & Hand Tools.

La sala de exposiciones de Apex Tool Group —antes Cooper Power Tools— en Westhausen, Alemania, cuenta con una impresionante gama de diferentes herramientas de montaje de la marca Cleco. Entre ellas se encuentran atornilladores neumáticos y eléctricos, con cable o con baterías recargables, en diseño recto, acodado y de pistola. Además, también hay estaciones de montaje completas con un sistema de control integrado que muestra las instrucciones de montaje del atornillado en una pantalla, proporcionando los parámetros necesarios para el atornillado, y el seguimiento y la documentación de los mismos. Los atornilladores se utilizan, por ejemplo, en el montaje de motores de combustión y eléctricos, carrocerías, transmisiones y unidades hidráulicas en la fabricación de vehículos y en la aviación, así como para el montaje automatizado de ruedas en vehículos. Para cumplir con los requisitos actuales de alta fiabilidad del proceso y procesos documentados, el fabricante equipa las herramientas de montaje con sensores para la medición del par de torsión, así como la transmisión digital de datos por cable o inalámbrica (WLAN). Como explica Niko Schindelarz, supervisor de mecanizado, muchos fabricantes de la industria mundial consideran que las herramientas de montaje de Cleco son de muy alta calidad, robustas, duraderas y fiables. Una contribución importante a esto, dice Niko Schindelarz, es sin duda la amplia integración vertical en Apex. La empresa fabrica en Westhausen casi todos los componentes esenciales de los atornilladores. Esto se aplica, en particular, a los ejes de motores y engranajes, palancas, válvulas, levas y carcasas.

“Debido al gran número de variantes y a la creciente demanda de características individuales, tenemos que producir componentes en pequeñas series e incluso como piezas individuales a muy corto plazo”, explica Johannes Mäule, ingeniero de producción en Westhausen. Esto se aplica a todos los pasos y procesos de producción, desde el torneado, el taladrado y el fresado hasta el rectificado. “En particular, tenemos que rectificar nuestros ejes de motor y de engranaje con una precisión de unas pocas µm. Esto es esencial para garantizar el funcionamiento extremadamente silencioso y la larga vida útil de nuestros atornilladores”, añade Niko Schindelarz. Pero esto era todavía muy complejo hasta hace pocos meses. Sólo se disponía de una rectificadora probada, adquirida a principios de los años 80, para el rectificado cilíndrico. Para rectificar el gran número de ejes de 30 a 650 mm de longitud con diámetros entre 3 y 65 mm, era necesario reajustar la máquina manualmente, una y otra vez. Esto era contrario a un proceso de producción flexible y basado en las necesidades. “Sobre todo, era cada vez más antieconómico. Los tiempos de preparación solían ser el doble o el triple de los tiempos de mecanizado”, explica Johannes Mäule. También resultaba difícil alcanzar las precisiones necesarias en cuanto a diámetros y cilindricidad, especialmente en el caso de los ejes largos y finos, como señala Niko Schindelarz. Como añade, esto sólo era posible para expertos experimentados que llevaban muchos años rectificando. “Estos expertos se están jubilando o lo harán en los próximos años. Esto significa que sus conocimientos ya no estarán a nuestra disposición. Sin embargo, la formación de los jóvenes talentos se centra ahora en aspectos diferentes a los de hace unos años. Las intervenciones manuales en las máquinas son más indeseables, y se hace hincapié en la programación y la parametrización óptima de los procesos”, explica Niko Schindelarz.

En esta situación, los responsables de Apex decidieron invertir en una nueva tecnología para el rectificado, al igual que con otros procesos de mecanizado. Esto se debe a que el cambiante entorno técnico plantea muchas exigencias adicionales a las máquinas y los sistemas de producción. Además de una gran flexibilidad, éstas incluyen, por ejemplo, opciones para la supervisión automatizada del proceso y para la transferencia de datos de proceso y producción a una red digital: una fábrica inteligente. “Además, necesitamos la última tecnología orientada al futuro para ser un empleador atractivo e inspirar a los nuevos talentos que tanto necesitamos para que vengan a trabajar a nuestra empresa”, añade Niko Schindelarz. Tras comparar exhaustivamente diferentes conceptos de máquinas, él y Johannes Mäule decidieron invertir en una rectificadora cilíndrica universal Studer S31.

Como explica Niko Schindelarz, en primer lugar fue necesario preparar cuidadosamente el análisis de las necesidades, para obtener la aprobación del presupuesto necesario por parte del director comercial del grupo estadounidense. Sin embargo, pudimos demostrar claramente, basándonos en las ventajas operativas, que la mayor inversión inicial -en comparación con los productos de la competencia- resultaría rápidamente rentable”, coinciden Johannes Mäule y Niko Schindelarz. Los ingenieros de producción de Westhausen pueden ahora rectificar toda la gama de ejes en una sola máquina. La rectificadora cilíndrica S31 es fácilmente accesible para la preparación de la pieza y de la muela, a pesar de estar completamente cerrada. Al igual que los operarios de la máquina, Niko Schindelarz alaba especialmente la excelente ergonomía de trabajo. Los ingenieros de producción de Westhausen se benefician de tiempos de preparación mucho más cortos en comparación con las rectificadoras anteriores. La función especial Quick-Set, sólo disponible en las rectificadoras Studer, contribuye de forma esencial a ello. Cornelius Wecht, responsable de ventas de Studer en el sur de Alemania, informa: “Gracias a Quick-Set, el control almacena las dimensiones precisas de todas las muelas utilizadas en la rectificadora. De este modo, también se pueden ajustar rápidamente las muelas usadas con frecuencia y reavivadas y volver a utilizarlas inmediatamente. El control conoce las dimensiones precisas tras el montaje de la muela y no es necesario volver a medir o incluso reavivar en la máquina”. Los rectificadores de Westhausen consideran otra ventaja la posibilidad de reavivar las muelas de perfil directamente en la rectificadora cilíndrica. El software StuderDress proporciona los ciclos correspondientes. Con estos ciclos, sólo se reavivan las geometrías requeridas en el perfil de la muela. Como confirma Niko Schindelarz, esto reduce, por un lado, los tiempos de preparación y de no producción. Por otro lado, también garantiza una mayor precisión y mejores superficies en los componentes rectificados.

Para Niko Schindelarz, el concepto de control de la rectificadora cilíndrica S31 también ofrece ventajas excepcionales. Como subraya, la interfaz de usuario es muy fácil de entender. Los gráficos y diálogos guían claramente a los operarios y programadores a través de los campos de entrada. El control también dispone de una base de datos con todos los parámetros de rectificado necesarios. “A esto lo llamamos StuderTechnology Integrated”, explica Cornelius Wecht. El operario de la máquina selecciona los parámetros que el software sugiere, basándose en las geometrías de las piezas, así como en las precisiones y la calidad de la superficie requeridas. De este modo, la rectificadora cilíndrica consigue siempre un buen resultado de rectificado de forma fiable. El rectificador experimentado puede adaptar los parámetros sugeridos en cualquier momento para optimizar aún más el proceso de rectificado. “La S31 es, por tanto, ideal para su uso en el taller. Cualquiera de nuestros trabajadores cualificados con formación en mecanizado puede trabajar también de forma flexible en la rectificadora cilíndrica. No necesitan ningún conocimiento especializado en rectificado. Esto nos proporciona la máxima flexibilidad”, afirma Niko Schindelarz.

La rectificadora cilíndrica S31 del Grupo Apex Tool de Westhausen tiene un cabezal de rueda con eje B. El cabezal de la rueda puede girar en pasos de 1°. Dispone de dos accionamientos de husillo, uno de ellos equipado con una muela abrasiva para el picado recto y el otro para el picado angular. Esto también contribuye a acortar los tiempos de preparación y a lograr la máxima flexibilidad. “Podemos realizar el rectificado por inmersión de una pieza en recto y en ángulo en un solo ciclo sin ningún trabajo de preparación. Esto significa que podemos mecanizar completamente casi todos los componentes en una sola sujeción”, explica Niko Schindelarz sobre las ventajas del eje B y las tensiones: “Con el equipamiento que hemos elegido, la rectificadora cilíndrica S31 merece plenamente el atributo de “universal”. Si hay una rectificadora cilíndrica que merezca ese nombre, esa es la S31 de Studer”. Después de casi cinco meses, la rectificadora cilíndrica S31 de Westhausen ha demostrado que cumple completamente los amplios requisitos de los fabricantes de herramientas.

Johannes Mäule cita otro aspecto importante a la hora de invertir en sistemas de producción: “En el caso de una tecnología especial como el rectificado, los ingenieros de producción suelen tener sólo conocimientos generales. Esto se aplica sobre todo a las características innovadoras del equipamiento de las máquinas y a sus ventajas específicas en relación con los requisitos individuales”. Como añade Niko Schindelarz, investigar la tecnología de rectificado actual no fue tan fácil al principio. “Pero los especialistas de Studer nos asesoraron con gran profundidad y, sobre todo, de forma abierta y honesta. Pudimos desarrollar juntos la configuración óptima de nuestra rectificadora cilíndrica en pocos pasos”, continúa. Esto generó la confianza necesaria para invertir con seguridad en la costosa rectificadora cilíndrica S31. “También era importante para nosotros que el servicio y los asesores técnicos estuvieran presentes a nivel regional y pudieran asesorarnos y apoyarnos directamente en la producción en un corto periodo de tiempo. Esto es esencial para garantizar que nuestra inversión actual y de futuro en la S31 resulte rentable a largo plazo”, subraya Niko Schindelarz. Como concluye, Studer ha cumplido completamente todos los criterios relevantes con sus especialistas y la rectificadora cilíndrica universal S31.