Navegar por las tormentosas aguas de nuestro tiempo es un reto para las empresas manufactureras

A primera vista, la navegación y el tratamiento moderno de la chapa tienen poco en común. Y, sin embargo, existen paralelismos: en ambos campos, la velocidad está en el límite de lo técnicamente posible, y las tripulaciones dependen de la información en tiempo real. La solución de gestión de fabricación en red de Bystronic permite incluso a las pequeñas empresas de chapa metálica competir en la vanguardia de la competencia por los pedidos.

La vela está experimentando actualmente una revolución. En lugar de deslizarse por el agua sobre sus cascos, los modernos veleros de competición se elevan sobre las olas gracias a sus hidroplanos. Después de que los hidroplanos ajustables ya hicieran volar a los catamaranes, la nueva tecnología se utilizó por primera vez en los monocascos durante la Copa América de 2021 en la costa de Nueva Zelanda. Como resultado, la velocidad de los barcos se ha triplicado. Los foils permiten alcanzar velocidades de hasta 50 nudos, casi 100 kilómetros por hora. Paradójicamente, la aerodinámica es ahora más importante para estos barcos que la hidrodinámica.

Pero hay otra revolución tecnológica en la vela que no es tan evidente. Las tripulaciones que compiten en la Copa América cuentan con una gran cantidad de información en tiempo real: informes sobre el viento y la meteorología, el estado del mar, las posiciones de sus oponentes y los datos de control inteligente del rumbo, por nombrar sólo algunos. Unos 1.000 sensores en el barco proporcionan continuamente información a los patrones, los timoneles, los tripulantes, los entrenadores y los ingenieros. Al igual que en la Fórmula 1, la acción de la carrera se supervisa desde boxes, un centro de control donde toda la información fluye. Sin duda alguna, hoy en día, la clave del éxito son los datos, también en la vela.

Con el láser de fibra, la industria de la chapa ha sido testigo de una revolución en los últimos años provocada por una nueva tecnología comparable a los hidroplanos en la navegación. La velocidad de corte de una máquina de corte por láser de fibra supera hasta cuatro veces la de una máquina de láser de CO₂. El factor de eficiencia se ha triplicado y la eficiencia energética es casi el doble. El rápido progreso de las soluciones de automatización para la carga y descarga de las máquinas de corte está permitiendo a las empresas de procesamiento de chapa metálica aprovechar las ganancias de eficiencia adicionales.

Y nosotros también estamos viviendo una segunda revolución de datos paralela en nuestra industria: la fábrica inteligente (Smart Factory) también se controla desde una especie de foso. Y aquí también fluyen innumerables fuentes de información, tanto del propio proceso de producción como de todo el entorno de la fábrica. Al igual que en la navegación, la utilización inteligente de los datos también mejorará la toma de decisiones en la industria de transformación de la chapa, permitiéndonos alcanzar nuestros objetivos. de la chapa metálica, lo que nos permitirá alcanzar nuestros objetivos con mayor rapidez. La inteligencia artificial y el aprendizaje automático desempeñarán probablemente un papel importante en esta tendencia.

El puerto base de las operaciones de producción solían ser sistemas de planificación de necesidades de material (MRP) autónomos y rígidos, que apenas incorporaban datos externos. Esto está cambiando actualmente: nos dirigimos hacia un nuevo mundo de conectividad en tiempo real y de plena integración de sistemas antes separados. La tecnología de la información (IT) y la tecnología operativa (OT) convergen cada vez más.

En el futuro, los ecosistemas digitales garantizarán el flujo de datos de toda la cadena de suministro hacia los sistemas de almacenamiento y fabricación de la fábrica inteligente, de forma similar a las herramientas de navegación inteligente utilizadas en la navegación moderna. En ambos campos se trata de la coordinación óptima del software y el hardware: al igual que los yates voladores están conectados en red con los sistemas de información en el agua y en tierra, nuestras máquinas-herramienta inteligentes tienen que interactuar con los sistemas de software de la fábrica inteligente y su entorno.

Bystronic se ha propuesto que los trabajadores de la chapa puedan repetir esto en un futuro próximo. Nuestra visión es una orquestación de los procesos de producción que permite una sólida previsibilidad de lo que se puede producir y para cuándo, al tiempo que ofrece la flexibilidad necesaria para responder rápidamente a los cambios en la cadena de suministro. Para cubrir todos los posibles escenarios de producción, la modularidad, la escalabilidad y la agilidad son requisitos clave para un sistema de este tipo.

Nuestra Plataforma Operativa Digital (DOP) basada en la nube cumple todos estos requisitos. Durante su desarrollo, nos hemos centrado principalmente en las pequeñas empresas de transformación de chapa. En el futuro, queremos ayudarles a aprovechar las oportunidades que antes sólo estaban al alcance de las grandes empresas. Les permitiremos planificar, controlar y evaluar sus procesos de producción con la misma precisión que sus grandes competidores. Y como los barcos pequeños son intrínsecamente más ágiles que los grandes, en el futuro las pequeñas y medianas empresas de producción ganarán ventaja en la competencia por los trabajos.

Navegar por las tormentosas aguas de nuestro tiempo es un reto para las empresas manufactureras. La situación incierta en cuanto a la evolución de la pandemia complica la planificación y, al mismo tiempo, la presión competitiva en nuestro mundo globalizado es mayor que nunca. En este entorno dinámico, responder con flexibilidad a los cambios y tomar siempre las decisiones correctas para ser los primeros en alcanzar el objetivo es un reto enorme.

En Bystronic, queremos ayudar a nuestros clientes a volar sobre el agua en lugar de navegar laboriosamente a través de las olas. Nuestras soluciones permiten a las empresas de fabricación dar el paso decisivo hacia la fábrica inteligente, en la que las máquinas eficientes y el software de última generación se conectan en red para crear un entorno de producción inteligente. Los usuarios se benefician de altas capacidades de computación en la nube, una lógica empresarial enriquecida, una plataforma de gestión clara y, por último, pero no menos importante, una toma de decisiones mejorada gracias a la inteligencia artificial y el aprendizaje automático.