Decomeeting 2019 asienta las bases del futuro del decoletaje
El lema de este año del XII Congreso del Decoletaje y la Mecanización, ‘Retos de futuro para la fabricación mecánica’, organizado de nuevo por Adecat, la Associació de Decolletadors i Mecanitzadors de Catalunya, daba ya una idea del propósito del encuentro. Exhortar al sector para que avance hacia la producción del futuro, la fábrica inteligente y digital. Y así lo expusieron desde el primer minuto los participantes, en especial Jordi Ferrés, presidente de la Asociación; Joaquim Ferrer, secretario de Empresa i Competitivitat del Departament d’Empresa i Coneixement de la Generalitat de Catalunya; y Xavier Marcet, presidente de Lead to Change, consultoría especializada en innovación estratégica.
Tras la bienvenida formal por parte del presidente de Adecat, Jordi Farrés, quién expuso la necesidad de abordar en sesiones como el Decomeeting los temas que más preocupan a las empresas vinculadas con el sector del mecanizado y con el decoletaje en particular —“cómo hacer frente a los cambios que se están produciendo en el mercado y cómo aprovechar los retos y transformar en oportunidades los avances de sectores como, por ejemplo, el automotriz”.
Jordi Farrés, presidente de Adecat, señaló en el calendario la próxima edición del Congreso Internacional del SID, Syndicate International du Décolletage, del 7 al 11 de junio de 2020 en Barcelona.
Por su parte, Joaquim Ferrer, representante de la Generalitat de Catalunya, hizo especial énfasis en el momento actual: “No es un cambio, es una revolución, la de la Industria 4.0, y además va muy rápida. Ello obliga a reaccionar a las empresas”, admitiendo a la vez que las administraciones “no son lo suficientemente flexibles ni se adaptan tan rápido como deberían”. Por ello, abogó por potenciar aún más la colaboración empresa-administración para aprovechar las ventajas de cada una de las partes. Asimismo, asumió que, si bien los estudios predicen que estos cambios conllevan determinadas amenazas al mercado laboral, aseguró que también suponen nuevas oportunidades: “Se prevé que al término de esta Revolución 4.0 se habrán creado más puestos de trabajo de los que hayan destruido… si bien es cierto que serán empleos diferentes a lo conocemos hoy”.
Por otra parte, y teniendo en cuenta la audiencia, quiso lanzarle un mensaje: “Posiblemente el sector del metal lidere esta Revolución 4.0. Pero para ello es necesario dotarse de tecnología y de talento, algo en lo que la administración tiene una particular responsabilidad”, admitió. Actualmente el 20% del PIB procede del mundo industrial, “Catalunya sigue siendo un país industrial, con un tejido industrial muy diversificado, con un alto porcentaje de empresas dedicadas a la Industria 4.0, lo que en el futuro supondrá una ventaja competitiva”.
Y aprovechó su participación en el encuentro para dar a conocer el Pacte Nacional pel Coneixement, una herramienta que quiere agrupar universidades y empresas para sacar el máximo partido a cada ámbito, “escuchando las necesidades del mundo empresarial y poderles dar una respuesta adecuada desde el ámbito del I+D, a la vez que se pretenden desarrollar niveles formativos reglados que respondan a la demanda del sector profesional”.
Tenemos los datos. ¿Qué hacemos con ellos ahora?
Xavier Marcet, presidente de la consultora especializada en innovación estratégica Lead to Change, expuso una de las próximas tribulaciones con que deberán lidiar las empresas. ¿Qué hacer con la cantidad ingente de datos que la nueva era computacional les depara? ¿Qué ‘cantidad’ de Industria 4.0 deben aplicar las empresas?... “El justo y necesario”, aseguró. Parece una respuesta simple pero no lo es. “¿Cuántas empresas —se preguntaba Marcet— tienen miles de millones de datos… de los cuales sólo usan el 2-3%?”. Y seguía: “¿Es importante el Big data? Sí, pero más importante es mantener la empresa a flote…”. Para Marcet, las empresas deben estudiar bien las herramientas disponibles, sin enloquecer, y mantenerse atentos a lo que realmente les suponga una oportunidad o les aporte una ventaja competitiva. “Deben apostar por las herramientas que les sean útiles… pero con sentido común”. Para el consultor, las empresas de cualquier sector, especialmente en el mundo industrial, deben preguntarse qué sentido tiene incorporar según qué grado de sensorización. “Es necesario evaluar qué aporta, qué necesidades tiene la empresa… en un momento en que todo es físico y digital, donde el mundo analógico 100% ya no existe ni para la vida cuotidiana, sigue siendo necesario saber qué grado de digitalización necesitamos, qué datos nos serán útiles y cómo podemos extraer conclusiones de los miles y miles de datos que las máquinas pueden proporcionarnos”. Y añadía: “Acumular datos sin más, no tiene ningún sentido. Al fin y al cabo, el objetivo final de una empresa es hacer negocio por lo que aplicar la transferencia digital —inyectar tecnología— debe servir para aportar valor añadido al cliente y hacer crecer la empresa”. En este sentido Marcet expuso cómo hoy muchas empresas integran la Industria 4.0 para fines internos, por motivos estrictamente de organización interna… sin orientarse al cliente. ¡Pero son el objetivo final! La incorporación de Big data, Industria 4.0, sensorización… debe servir para ser más competitivos, aumentar la productividad, mejorar el servicio al cliente, hacer nuevos clientes… crecer, en definitiva. “La tecnología debe ayudar a tomar decisiones empresariales, como por ejemplo dónde poner el esfuerzo comercia”. Por ello, el consultor considera que cada empresa debe hacerse una pregunta: “¿Qué necesita mi cliente que no me expresa?... y que no nos lo dirá porque el trabajo lo absorbe. En este punto, la tecnología sí puede ayudarnos, la inteligencia artificial jugará un papel importante, pero, aún más importante será según cómo se combine con la inteligencia humana” porque para Marcet, existe una condición de ésta que los robots no pueden cumplir (de momento): “interpretar gestos, las miradas, el entorno, las sensaciones…”. La combinación de inteligencias será la clave del éxito. Y para ello las empresas “deben aprender y desaprender... para innovar, a menudo es contraproducente ser un ‘experto’ en el sector y a menudo, el golpe, la innovación más disruptiva, viene precisamente de empresas y emprendedores ajenos al sector. “El cementerio de empresas está lleno de empresas que lo habían hecho muy bien” … “Hay que saber hacer dinero y hay que saber gastarlo, invertirlo, abrir la mente”. Y señaló ejemplos de innovaciones desarrolladas por aquellos que no ‘sabían’ que ‘eso era imposible’. Por ello es importante saber atraer y retener al talento, potenciarlo, y tener ambición. “Humildad y ambición, una combinación de éxito”, concluyó.
Xavier Marcet, presidente de la consultora especializada en innovación estratégica Lead to Change, llamó la atención de los presentes con su exposición. Aplicar Industria 4.0 sí pero... ¿tienen claro para qué?: “Acumular datos sin más no tiene sentido. Hay que saber qué hacer con ellos sacarles el jugo”.
La experiencia, el mejor ejemplo
Tras la primera pausa café Decomeeting inició la ronda de los bloques especializados. En primer lugar, el dedicado a los sectores médico y automoción, lo inició Albert Giralt, director general de Avinent. Giralt quiso poner especial atención a cómo debe abordarse la introducción de la impresión 3D en la empresa: “Es una herramienta, no la finalidad. Una herramienta para personalizar, adaptar, el servicio o producto al cliente”. En este sentido, comentó que la personalización no es una moda actual… sino algo que siempre ha sido la preferencia del cliente en todos los ámbitos. Pero el coste dificultaba su masificación… algo que la impresión 3D ayuda a resolver y, por tanto, ha impulsado el incremento de la demanda: “Se ha producido la tormenta perfecta con la combinación de un usuario empoderado con una tecnología que puede satisfacerlo. Hoy el cliente sabe qué quiere, lo expresa y lo demanda, que ha perdido la vergüenza y comunica lo que quiere usando infinidad de vías de comunicación… y las empresas deben captar estas preferencias y aprovechar la oportunidad. Además, la tecnología permite ofrecer productos con una capa de servicio, a menudo digitales, lo que facilita personalizarlos con el paquete de servicios”. La personalización, además, puede ser simple o muy compleja… desde elegir el color de unas deportivas a una prótesis individualizada.
Giralt advirtió sin embargo que la impresión 3D, si bien ofrece muchas posibilidades, también tiene limitaciones: “Es una tecnología en fase de creación, muy cambiante, con mucha diversidad… y hay que saber elegir. Otro hándicap es la necesidad de cumplir con las normativas en 3 bloques: instalaciones, proceso productivo y producto final”, en especial en Avinent que se dedican al sector salud. “Algo que deben tener en cuenta nuestros proveedores, como los mecanizadores o decoletadores de piezas”.
Tras la experiencia de Albert Giralt, participó Xavier Tutó, investigador senior de la Unidad de Fabricación del centro Leitat, que presentó cómo encajar la fabricación aditiva en los procesos de producción, algo en lo que en Leitat trabajan a fondo, con un centro demostrativo que puede ayudar a las empresas a resolver sus dudad y objeciones. Así, Tutó hizo un repaso de algunas de las piezas realizadas en el centro, donde se reemplazaron metales por polímeros, por ejemplo, buscando aligerar pesos. Precisamente, una de las principales ventajas de la fabricación aditiva es reducir el peso de las piezas, algo que permitirá afrontar las exigencias medioambientales en sectores como la automoción o la aeronáutica. Otra ventaja señalada por Tutó es la posibilidad de producir una sola pieza en lugar de diversas partes que deben ensamblarse a posterior…
El bloque 1 lo cerró Josep Nadal, Cluster Manager del ClAC, el clúster de la automoción de Catalunya. Nadal expuso la gran diversidad de proyectos en los que trabaja el clúster y puso ejemplos que muestran la entrada de nuevos ‘actores’ del sector relacionados con el coche conectado, como pueden ser los proveedores de sistemas electrónicos. “Igualmente —apuntó Nadal— las tendencias de futuro suponen cambios y afectaciones en diferentes niveles e la mayoría de empresas que forman parte del CIAC. Por ejemplo, fabricantes de componentes del sistema de calefacción o refrigeración del vehículo. Y por supuesto también existirá un porcentaje de empresas que verán que el coche eléctrico ya no necesitará de sus piezas…por eso hablamos de retos y oportunidades”.
Mejorar la productividad en el sector metal
Cerró la jornada una serie de ponencias y presentaciones prácticas por parte las empresas que también pudieron exponen sus productos en una nueva zona habilitada a modo de showroom. Entre ellas, Dixi Polytools, sobre herramientas para mecanizado; Maquinser, representante de algunas de las principales marcas de máquinas-herramienta como la japonesa Tsugami; Schunk Intec, que presentó las ventajas del sistema de cambio rápido Vero-S; Total España, que repasó el mundo del lubricante para el mecanizado; Visyon, centrado en la incorporación de la realidad virtual y aumentada para las fábricas del futuro; y MiR Robots, con soluciones para mejorar la logística en planta.
La jornada cerró recordando la próxima cita: el Congreso Internacional del Syndicate International du Décolletage, del 7 al 11 de junio de 2020 en Barcelona.