Premio Nacional de Diseño en Máquinas-Herramienta

01/02/2002

Si hay un hecho que marca los años 90 es la globalización. La era electrónica hace realidad la aldea global e Internet se convierte en el medio que transforma de manera definitiva la comunicación humana. Una de las principales consecuencias de este cambio es la complejidad que añade al entorno empresarial, marcado por la saturación de los mercados, la extrema rivalidad, la madurez tecnológica y las múltiples posibilidades de elección que se ofrecen a los consumidores.

1990, el diseño en la era de la información

Ante este panorama los aspectos intangibles cobran protagonismo como factores de competitividad. El diseño aparece como una herramienta que permite anticipar las necesidades del mercado, distinguirse de la competencia, ofrecer calidad, coordinar eficazmente el proceso de desarrollo de producto y asegurar un crecimiento responsable.

A pesar de esta evidencia, diversos estudios demuestran que, a principios de los 90, no más del 2% de las empresas industriales adoptaban estrategias de innovación y que sólo un 40% realizaba regularmente actividades de diseño.

A fin de reducir distancias entre ambas realidades, los distintos agentes implicados en la promoción del diseño deciden aunar esfuerzos para lograr la integración real de esta disciplina en las empresas.

Origen del premio

El 31 de enero de 1990, el Instituto de la Pequeña y Mediana Empresa Industrial, IMPI, y DZ Centro de Diseño firmaban un Acuerdo Marco de Colaboración con el fin de promocionar la puesta en marcha de iniciativas que estimulasen la incorporación del diseño en los procesos de producción.

La primera actividad que ambas entidades decidieron impulsar fue la concesión de un galardón que distinguiera a aquellas empresas del sector de las máquinas-herramienta que se caracterizasen por su interés hacia el diseño, su capacidad de innovación y el esfuerzo por mostrar soluciones creativas en sus productos.

En palabras del entonces Consejero de Industria y Comercio del Gobierno Vasco: "el premio es un estímulo más para el empresarios, un reconocimiento público de mejora de la calidad en el ámbito del diseño industrial".

Desde entonces DZ organiza, en colaboración con la Asociación Española de Fabricantes de Máquinas-Herramienta y la Feria Internacional de Bilbao, este premio que patrocinan el Ministerio de Industria y Energía, a través de la Iniciativa ATYCA y el Departamento de Industria, Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco. El Premio tiene carácter bienal y se falla coincidiendo con la Bienal Española de la Máquina-Herramienta que se celebra en Bilbao con la misma periodicidad.

Único por su carácter monográfico

El Premio Nacional de Diseño en Máquinas-Herramienta es único en Europa por su carácter monográfico. Existen otros galardones en este sector industrial, pero ninguno de ellos limita la competición a máquinas-herramienta para la transformación de metales. Esto es: aquellas que son accionadas por una fuente exterior de energía, no son transportables a mano durante su funcionamiento, y trabajan la materia por arranque, deformación, procesos físico-químicos o una combinación de estas técnicas.

Ámbito de competición

Pueden acceder a este Premio todos los fabricantes de máquinas-herramienta cuya razón social y centro de producción se ubiquen en el Estado, excluyéndose las máquinas producidas bajo licencia extranjera, por filiales multinacionales o por centros tecnológicos y unidades de I+D ajenas a fabricantes. También quedan excluidos los accesorios, componentes y partes de máquinas.

Además, son condiciones indispensables que los modelos se hallen físicamente expuestos en la Bienal Española de Máquinas-Herramienta, que no hayan sido ya premiados, y que su aparición en el mercado no preceda en más de 4 años la celebración del certamen.

Jurado

El jurado está compuesto por un mínimo de cinco miembros y un máximo de nueve. Además de diseñadores, integran el jurado especialistas en seguridad, ergonomía y tecnología, así como representantes del MINER y del Departamento de Industria, Comercio y Turismo del Gobierno Vasco, entidades patrocinadoras del premio.

A la hora de evaluar los proyectos presentados, se otorga el 50% de la puntuación a criterios de diseño, el 30% a ergonomía y seguridad y el 20% a valores de tecnología.

Criterios de evaluación del jurado

El Jurado evalúa las máquinas presentadas a concurso según los siguientes criterios:

Criterios de diseño, aspectos formales y de comunicación

Soluciones estético-formales que contribuyen a mejorar la apariencia general de la máquina: acabados, coherencia formal, interacción con el entorno, atractivo visual, etc.
Se valora: La forma en que la máquina comunica la función que realiza y la identificación del producto y de su imagen, ya sea de marca o empresa.
Cómo transmite valores intrínsecos con relación a su aspecto formal: robustez, peso, estabilidad, nivel tecnológico, habilidad, etc.
El uso de técnicas de trabajo en equipo, ingeniería concurrente, etc., durante el desarrollo del proyecto.

Criterios ergonómicos y de seguridad

La relación directa entre producto y usuario plantea la adecuada respuesta de utilización, montaje, reparación, etc. Se valoran:

Los aspectos ergonómicos aplicados al producto y la relación dimensional entre producto y usuario.
Las máquinas deben cumplir la legislación vigente aplicable a cada una de ellas en materia de seguridad. Asimismo, se exige la declaración “CE” y el manual de instrucciones en castellano

Criterios tecnológicos

Aspectos relacionados con la función o funciones específicas del producto. Se valoran:

Las soluciones técnicas innovadoras que simplifican procesos y controles e incrementan la seguridad del usuario, la fiabilidad en el funcionamiento y la calidad.
Mantenibilidad, facilidad de reparación y recambio de los componentes
Soluciones relativas a la disposición de los sistemas hidráulicos, neumáticos, eléctricos y electrónicos.

Robótica Maser: Prensa electromecánica EM 10.
Candidata para el Premio Nacional de Diseño
en Máquinas-Herramienta 2002

Premios

El Premio distingue dos categorías de concurso:

máquinas-herramienta que trabajan por arranque de metal
máquinas-herramienta que trabajan por deformación

Además, el Jurado puede conceder distintas menciones especiales, ateniéndose a los criterios de ergonomía y seguridad, o formales y de comunicación.

El Premio carece de dotación económica y consiste en un diploma acreditativo y una escultura de bronce fundido creada por el escultor vasco Gotzon Cañada.

1998, récord de participación

Desde sus comienzos, el número de proyectos presentados a concurso ha ido prácticamente en aumento. Salvo la edición de 1994 que tuvo que ser anulada por la fuerte crisis que el sector padeció en el periodo 1991-1994.

El récord de participación se alcanzó en 1998 con un total de 21 proyectos. Ese mismo año, la producción española de máquinas-herramienta ascendió a 164.592 millones de pesetas, lo que supuso un incremento del 18% sobre el año 97 y uno de los mayores aumentos entre los principales países productores, consolidándose la etapa de 4 años de crecimiento del sector.